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En medio de la noche Seokjin entró a su habitación hecho una furia, pero sus lágrimas traicioneras brotaban de sus ojos como cascada a pesar de querer retenerlas. No podía ocultar sus emociones decaídas cómo resultado de las palabras de su papá.

Estaba molesto. Muy enojado de sentirse la marioneta de su querido padre y que encima fuera el responsable del corazón lastimado de su querido alfa. Su lobo aullaba inquieto en forma de reprensión al temer que cometiera una estupidez, y él lo sabía. No sé daría por vencido tan fácilmente, buscaría la manera de que su novio no saliera afectado.

Flashback

Aquí es. Y recuerda, nada de llamar la atención con tu "relevante personalidad". Comportate.

El señor Park quitó su expresión seria y en su lugar puso una enorme sonrisa que adornaba su rostro, caminó al lado de Seokjin para guiarlo con los invitados. El omega tuvo que sonreír falsamente al caminar al lado de su padre, no le prestaba tanta atención a las personas que se acercaban a saludarlo ya que prefería dirigirse directo al área de bebidas, pero el agarre en su brazo lo detuvo y tuvo que tragarse las maldiciones que amenazaban con salir de su boca.

—Mira, Jin. Aquí está el joven Wang que te acompañara el resto de la noche.

Buenas noches, señor Park —el alfa giró en su dirección con la radiante dentadura de felicidad—, y Seokjin, es un gusto que al fin podamos salir.

—Debes ser una broma —el omega negó, se hubiera esperado de todos una broma así, pero no de él—. ¿Qué haces aquí?

—Jin... —su padre lo reprendió—. Trata bien a tu invitado... Disculpa lo.

—Oh no se preocupe señor Park. Cómo le mencioné, Jin y yo ya nos conocemos. Por algo estudiamos en la misma universidad.

—No sé que piensas lograr con esto, Jackson, pero te dije que no te acercaras a mí.

Seokjin, basta —al señor Seojoon no le gustó para nada la actitud que tomó su hijo frente al chico que era su cita. Se había imaginado que la reunión sería amena debido a que estudiaban juntos, pero se había equivocado—. Trata bien al joven Wang, te lo advertí.

—No, papá, yo no quiero establecer ninguna especie de relación con este... Alfa.

—Jin, ya se que las cosas no se dieron bien la primera vez que nos vimos, es por eso que ahora tendremos más tiempo para conocernos —su actitud madura le sorprendía al señor Park, pero era el omega el que nunca se tragaría esa falsedad de inocente cordero.

No quiero nada que venga de ti, ni siquiera este estúpido traje.

—Yo... Creí que te había gustado —bajó la mirada intentando ocultar su decepción fingida—. Lo lamento señor, Park. No quiero seguir molestando a Jin, creo que no fue una buena idea.

—Pero no digas eso, Jackson. Jin solamente está actuando rebelde últimamente. ¿Verdad, Seokjin? —su orden pasó de largo con su hijo y eso le empezaba a irritar—. Disculpate.

—No haré nada que tenga que ver con este —fulminó con la mirada al alfa causante de muchas molestias y se alejó de ahí soltando el agarre de su brazo con brusquedad.

El alfa mayor lo vió alejarse sin poder detenerlo, respiró intentado quitar su molestia y miró con una sonrisa apenada a la cita de su hijo. —Lamento esa escena que acaba de hacer mi hijo, ahora ha estado más desafiante y testarudo que es difícil controlarlo.

—Oh, no se preocupe señor, yo entiendo... Es decir, yo estaría igual si debo fingir felicidad a otro que no sea mi novio —ese comentario había salido con intención de sembrar cizaña, y por la mirada confundida del otro se dió cuenta de su logro.

Con Aroma A Café Donde viven las historias. Descúbrelo ahora