Con Aroma A Café

4.42

Jimin descansaba cómodamente en el sofá de la oficina de su hermano, lamentablemente esa paz terminó cuándo su hyung apareció haciéndole un montón de preguntas que quiso esquivar. Pero Seokjin tenía una intuición, una que le decía que cuidara a su hermano menor del asistente de su amado, no le terminaba de agradar y el que lo viera hablando con él la mayoría del tiempo lo hacía sospechar.

—¿Acaso te gusta?

—¡¿Pero qué dices?! —exclamó casi horrorizado—. ¡Claro que no! Jeon y yo solo somos... Amigos. Sí, eso.

—Hmm... Fingiré que te creo —sonrió pavoneando sus caderas mientras se dirigían a su escritorio—. Mejor dicho, espero que sea verdad. Ese sujeto me parece sospechoso, no creo que te convenga.

—A ti cualquier alfa que se me acerca te parece sospechoso —el menor rodó los ojos y tomó asiento en el sillón de la oficina.

—Eres mi hermanito, quiero que aquel que se atreva a invitarte a salir sea digno de ti.

—Hyung...

—Hablo enserio, Jimin... Pero si en dado caso te gustara, respetaré tu decisión —agregó sin dejar de verlo, Seokjin sentado y su hermano negando frente suyo—. Solo quiero tu felicidad, eso es todo.

—Y la tendré. Pero ahora no. Con lo de Hobi... Es suficiente.

—Jimin —su mirada lastimera la pudo notar el rubio sobre él.

—¡Ey! Quita esa cara. Estoy bien. ¿De acuerdo? Solo lo estoy superando, tampoco es que me haya dejado tan mal. Él.... No tiene la culpa.

—Y tú tampoco. No tienes la culpa de haberte enamorado de Hobi, él es un lindo y atento alfa, el sueño para muchos, así que no te mortifiques con eso...

—Y es mejor que nunca se entere. Menos ahora que el ya tiene a su pareja...

Seokjin suspiró con un asentamiento de cabeza, tampoco pensaba contárselo a su mejor amigo porque eso era algo que le tocaba a su hermano.

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—¿Ninguna chica te convence?

—No, realmente ninguna encaja...

—Ademas de contar con nuestra propia agencia de modelos, tenemos contratos con otras compañías para trabajar con nosotros. Y me temo que ya hemos traído a todas las chicas que cumplen con los requisitos que pide.

—Pero ninguna encaja con el nivel que quiero.

Los presentes se dedicaron miradas cansadas, llevaban un día largo con las audiciones y presentaciones de varias modelos. El mismísimo CEO de la marca de ropa más prestigiosa de Asia se encontraba con ellos para encontrar a la musa que se imaginaba una y otra vez. Pero no conseguían nada.

Seokjin se quedaba sin ideas, sus modelos eran hermosas y con el cuerpo perfecto, pero si su cliente no estaba convencido debía encontrar nuevas formas para darle lo que pedía. Quién diría que el CEO era tan exigente en busca de la modelo perfecta para promocionar su nueva línea de ropa.

—Es una lástima, si fuera un hombre hasta sería más sencillo —suspiró por milésima vez el pelimorado. Ya agotado se tumbó en la silla frente al catálogo de todos los modelos y mandó a descansar a las chicas que habían ido para la prueba.

—Es por eso que tú eres el indicado...

—Pero soy chico —habló con obviedad ante las palabras de aquel alfa que se la pasaba mandándole cumplidos y coqueteos disimulados.

—Lastimosamente para está ocasión —Ken suspiró resignado y tomó asiento a un lado del bonito omega. Seokjin no era tonto, sabía que le gustó a su cliente, pero su corazón ya tenía dueño y no pensó en seguirle el juego.