Años han pasado en la vida de este joven Oscar que por cosas del destino su vida se fue a pique, obligandolo a convertirse en el principal sustento de su familia.
Un dia un ascenso laboral una oportunidad llama a su puerta que lo llevara a un pequeñ...
¿Por qué olvidamos las cosas? si el día que las recordamos las emociones se desbordan.
La noche sería larga y Oscar lo sabía, Mildred había salido a visitar a su hermana y por primera vez en semanas él estaba solo y no se sentía cómodo.
En la mañana había sufrido un susto tal vez fue su imaginación, él no lo sabía pero recuerda su rostro o lo que se asemejaba y era el de su amiga de la infancia.
Después de regresar de su trabajo, la casa se sentía vacía y demasiado calmada él planeaba descansar y de alguna forma alejar esas ideas, podría haber sido su imaginación.
Oscar prendio la television y dejó un canal al azar, el solo quería algo de ruido para pasar el rato, por casualidad terminó en un canal de comedia, los chistes eran malos pero al menos las risas de fondo lo complementaban, al menos hasta que Oscar se percató de otra risita a su lado.
Con algo de cuidado Óscar volteo y miro nuevamente a ese fantasma, este estaba mirando el programa y se estaba riendo de los chistes.
Oscar permaneció inmovil al menos varios minutos, pero entonces el fantasma se movió a un lado suyo y se le quedó mirando.
— Hola, ¿está todo bien? tal vez algo nervioso — El fantasma le comentó como si fuera un conocido.
Tras unos momentos de incómodo silencio, el pequeño fantasma se le acercó un poco mas.
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— Sabes que es de mala educación cuando no le respondes a las demás personas — El fantasma comentó.
Oscar tratando de evitar salir corriendo de ahí comento sin mirar al fantasma — Me estás hablando a mi? —
— No veo a nadie más en este cuarto a quien mas le estaría hablando — El fantasma insistió.
— Vas hacerme daño o algo así — Oscar comento aun nervioso.
— ¿Bromeas? ni siquiera puedo tocar nada — El fantasma se quejó.
Oscar no esperaba que su aparición fuera tan ... sociable, asi que mas calmado volteo a mirarlo. era simple, no mas grande que un balon pero su voz e incluso su forma era algo familiar.
— y? ¿Te encuentras bien? — El fantasma insistió
— Solo algo nervioso, debo estar muy cansado del trabajo — Oscar comentó.
El fantasma lo miro desde diferentes ángulos — Si te ves fatal, deberías de dormir más —
El fantasma solo se quedó mirando la televisión y riéndose ocasionalmente mientras Oscar no sabía ni que hacer ni cómo reaccionar.
Después que terminara el programa, Oscar apagó el televisor esperando una acción diferente del fantasma pero solo comenzó a buscar por todas partes.
— ¿Se te perdió algo? — Oscar comentó ya más calmado.
— Si, estoy buscando a mi mejor amigo — El fantasma comentó.
