Retomando el rumbo.

Cap 67 Y ustedes quienes son?

Tras la aparición de Jim y la destrucción de medio pueblo las vacaciones familiares fueron canceladas, así que Susie y sus amigas mandaron una canasta con artículos variados como compensación, a pesar de que Sue no la quería recibir Andy y Oscar ya estaban literalmente devorando la sección de dulces y bebidas.

Si Oscar consideraba difícil adaptarse, para Jim fue peor que el infierno — ¿No puede ser esta es la velocidad máxima de internet? — La chica se retorcía de ira por tal mal servicio tanto que incluso sus pequeños berrinches eran difíciles de ignorar.

Ahora solo debían seguir esperando, Susie prometió que sus pequeños amigos ya trabajaban en resolver esta supuesta crisis, debían de esperar y hacer tiempo.

Claro Jim no perdió el tiempo, ella estaba consciente de la fecha y lo jodidamente fácil que era entrar en los registros y crearse una identidad falsa.

La chica era más lista que el promedio y conocía de antemano varias estrategias que su madre le había inculcado.

Tratando de apegarse al plan de pasar desapercibida decidió usar su tiempo libre, conocimiento y habilidades de hackeo y amasar un minúscula fortuna y repartirla en diferentes paraísos fiscales, con una identidad falsa y tan sutil que sería aun en estos días casi imposible de detectar.

— Identidad falsa listo, respaldo económico listo y mi primer fraude fiscal listo — Jim podía ver reflejada en la pantalla de la vieja computadora una sonrisa de satisfacción — Y todo en un fin de semana—

— Puedes ya dormirte, llevas dos días sin dormir — Oscar se quejo — Simplemente no es saludable y si ya entendí que buscas respuestas —

— Error, si duermo mis reglamentarias ocho horas diarias, me hidrato y como mis alimentos en base a su porción nutrimental — Jim se jactó orgullosa — simplemente el internet es tan jodidamente lento que solo se puede usar de madrugada —

— Bien solo no hagas que Sue se preocupe, suficiente tiene con la impresión que le generé estos días — Oscar se envolvió nuevamente en las sabanas pues al día siguiente tenía que ir a la escuela.

A pesar de los malos hábitos de Jim de trabajar a muy altas horas de la noche Oscar agradece su metabolismo, sólo una ducha express y estaba como nuevo.

Trato de llevar una actitud positiva, sentía culpa ver como esta Sue se preocupaba a diario, un dia cuando la miro llorar de la angustia fue el día que decidió fingir para al menos no dejar esta carga a los que realmente se preocupan por este Oscar,

Desde su regreso trato de incorporarse de manera "normal" a su vida escolar, familiar aunque le costaba un poco más de esfuerzo lidiar con Erizo sobre todo por que ahora notaba un poco más lo exigente que podía ser su amistad, posiblemente de más joven eso no lo percibe como ahora.

Oscar comenzaba a disfrutar un poco más su nueva infancia, no recordaba la última vez que almorzaba literalmente un postre y no caer enfermo de algún maestra estomacal.

La ruta a la escuela era la de siempre, a veces acompañaba a Erizo pero estos días había preferido tomar otras rutas que normalmente ignoraba, aprovechaba esos arranques de adrenalina para correr como loco sin siquiera sufrir el desgaste del esfuerzo.

Erizo estaba a veces confundida al encontrar a Oscar tirado en el suelo del salón tratando de recuperar el aliento después de una carrera sin sentido.

Para Oscar se le habría hecho fácil y divertido incluso ser el chico malo pero le daba remordimiento darle más preocupaciones a esta Sue, así que se prometió a sí mismo a ser el Oscar que ella recuerda, aunque le costara trabajo.

Incluso con todo el esfuerzo del universo trato de que su relación amistosa con Erizo fuera lo más normal y saludable posible.

Todo parecía perfecto, estaba en clase, era amistoso, un ejemplo y al receso saldría y disfrutaría almorzar con Erizo hasta que comenzó a complicarse el asunto.

El profesor interrumpio la clase para dar la bienvenida a una nueva estudiante — Chicos démosle una calurosa bienvenida a Jim, ella se mudo hace poco y espera llevarse bien con todos ustedes —

Oscar no lo podía creer, e incluso cuando esta se presento su cara de enojo era evidente.

— Puedo escoger asiento — Jim señaló un pupitre al lado de Oscar que estaba desocupado y al ver la aprobación esta se acomodo y tomó una posición relajada — Que hay hermano como te trata la vida — Comentó a Oscar en forma de broma.

— Qué haces aquí — Oscar mencionó — no puedes estar aquí, literal ni existes legalmente para poder estar en una escuela.

— Error — Jim le mostró credenciales — Identificación, licencia de conducir, pasaporte y tarjeta de la biblioteca —

— ¿En serio? Esta identificación Mclover de Hawai? — Oscar miró con desdén mientras Jim no podía enviar divertirse.

— Son de broma, solo hackee el sistema para registrarme en la escuela — Jim miró con ojitos de cachorro mientras le abrazaba del brazo — Me volveré loca con esa velocidad de internet así que prefiero un poco de tiempo de calidad padre e hija —

Oscar la obligó a soltarse y le susurro — Bien pero dime Oscar nada de papá o papi, debo asumir mi rol —

— ok — Jim contestó alegre — Pa... digo mi nuevo mejor amigo —

— Ejem, vamos a continuar la clase, Oscar puedes decirle a tu nueva amiga en donde vamos — El profesor señaló haciendo que surgieran un par de risillas en el grupo.

Bien podría decirse que era una especie de alivio interno para Óscar tener a Jim cerca al final del día era una bruja y una poderosa aunque se excusara de no poder usar magia sin su varita el no le creía completamente.

Para la chica era como estar como pez en el agua, era la intelectual y carismática amiga de todos pero sobre todo muy , pero muy apegada al joven Oscar que solo alentó las burlas de sus compañeros y eso que solo había pasado una hora de clases.

Pero justo antes que Oscar pudiera decir la famosa frase "no podría salir nada peor" el profesor presentó a una nueva alumna.

— No me jodas — Oscar pensó para sí mismo mientras Jim edificaba para cubrirse una barda hecha de libros y su mochila.

— Maldición viene a vengarse — Jim le susurro a Oscar.

— Ella es Mildred acaba de mudarse, si gustas puedes tomar cualquier pupitre solo — El profesor señaló.

— Quiero ese lugar al lado de Oscar — Mildred señaló.

— Vaya son conocidos, adelante — El profesor miró como esta recatada y seria chica tomó lugar al lado de Oscar quien estaba un poco más tenso de lo normal.

— Que haces aquí — Oscar le susurro a Mildred.

La encubierta bruja lucía un traje casi cercano a lo gótico, más parecía un cosplay que una vestimenta de uso normal — Estoy trabajando de incógnito — Mildred señalo a Jim — Ella es peligrosa y debo mantenerla vigilada —

— Además Susie me platico que clase de relación teníamos en tu mundo y me da solo un poco de curiosidad — Mildred fue directa lo que provocó un poco de enojo de Jim.

— Ho no! escuchame aqui la unica persona peligrosa eres tu maldita enana se bien lo que eres capaz de hacer así que no me uses como pretexto para tratar de seducir a Oscar — Jim casi estaba encima de Oscar reclamando a la recién llegada.

— Bajen la voz van hacer que me llamen la atención — Oscar les susurro ante los los muy silenciosos reclamos de estas dos.

Claramente nada discretos solo pequeñas risitas se escucharon en el salón de clase.

A la hora de descanso Erizo se adelantó gustosa para encontrarse con Oscar pero cuál fue su reacción al ver que dos chicas, una con pinta de hippy y una gótica estaban jalando del los brazos a Oscar peleando por él como si un hueso se tratara para un par de fieras hambrientas.

— ¿Y ustedes quiénes son? — Erizo levantó la voz uniéndose en lo que sería la lucha por la atención de Oscar.