Capítulo 11: La curiosidad no solo mata a los gatos.

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El vértice de la cueva debajo de la residencia Wayne palpitaba y ondulaba con un vasto techo de piel enmarañada y carne viva.

Murciélagos...

Y debajo de esa manta había una gran cámara que sirvió como museo y base de operaciones al murciélago durante casi veinte años de lucha contra el crimen.

Lo primero que podría llamar la atención eran los recuerdos de casos anteriores, sobre todo el enorme centavo con la fecha de expedición de 1947, obtenida después de que Batman luchara contra Penny Plunderer. O el Tiranosaurio Rex animatrónico de seis metros de altura de cuando Batman y Robín lo derrotaron en el parque temático de Murray Wilson Hart. O incluso el enorme naipe... Un Joker, por supuesto.

Había bahías en los costados de la cueva para varios tipos de vehículos. Había una plataforma para la motocicleta que se llamaba "Batpod" y había una percha para el avión llamado "Batwing". De hecho, la única bahía que tenía un gran bulto metálico era la del Batmóvil, ya que el Joker lo había descompuesto la noche en que murió. Y como esa fue la noche en que Bruce Wayne dejó de operar como Batman, nunca reparo su vehículo.

En el centro de la habitación había una computadora enorme, con un monitor integrado aproximadamente del ancho de un semirremolque. Tenía interruptores, perillas, interfaces, puertos y otros elementos esotéricos variados que la computadora militar promedio del Pentágono ni siquiera podía identificar, y mucho menos usar.

Unos metros a la izquierda de la Batcomputadora había cinco vitrinas con maniquíes adentro, y cada maniquí vestía un traje diferente.

El primer maniquí de la izquierda llevaba el traje de Batman que Bruce Wayne no había usado en seis meses.

El siguiente maniquí a la derecha era el viejo disfraz de Robín de Dick Grayson. Consistía en una túnica unida a una armadura roja, pantalones verdes y una capa amarilla, con botas verdes que completaban el conjunto. Dick no lo había usado desde que se había ido de Gotham hace dos años.

Casi al centro estaba el segundo disfraz de Catwoman, que consistía en un traje morado de cuerpo entero con botas negras y guantes del mismo color. Selina Kyle se lo había dejado a Bruce en su apartamento la noche en que partió de Gotham City. La razón por la que Bruce lo había puesto ahí, ni siquiera el la sabia.

Y era aquí donde las historias adjuntas a estos disfraces tomaban el aire de lo trágico, ya que junto al traje del primer Robín estaba el traje de la primera y única Batgirl, Barbara Gordon. Era una capucha y armadura negras, la capa negra tenía incrustaciones amarillas, y la insignia del pecho era amarilla al igual que las botas. Tampoco se había usado en tres años. Barbara Gordon solo había sido Batgirl durante tres años cuando Joker le disparó en la columna vertebral, robándole la capacidad de caminar. Ni siquiera estaba actuando como Batgirl en ese momento. Estaba sentada en su apartamento como Barbara Gordon, mirando televisión cuando Joker tocó el timbre. Nightwing se culpó a sí mismo por no estar en Gotham para protegerla. Batman y Selina también se culparon por aproximadamente lo mismo. Barbara solo culpó al Joker. Amaba a Dick y a Bruce, y casi consideraba a Selina como una vieja amiga.

Y junto a eso, estaba el disfraz modificado de Robín... el de Jason Todd.

Jason Todd era un matón adolescente que tuvo bastante suerte. Una noche trató de robar los neumáticos del Batmóvil, que estaba aparcado en un callejón aledaño a donde Batman estaba deteniendo a una banda de tratantes de niñas. Bruce vio sus habilidades, vio su rabia y esperaba salvarlo de sí mismo pidiéndole que hiciera el mismo voto en esa misma cueva que Dick y Barbara. Al igual que Barbara, Jason solo se puso la capa durante un año pero ya había formado una amistad bastante duradera con Dick y Barbara y había llegado a querer bastante a Alfred. De hecho, pasaba más tiempo con el que con Bruce y mientras que el playboy de Gotham City luchaba junto a la Justice League o iba a un viaje de negocios junto a su esposa Vicki Vale, Jason se quedaba con Alfred. Ya sea en la residencia o luchando contra el crimen en la ciudad, Jason ya había encontrado a su figura paterna en el rostro de Alfred Pennyworth. Pero al igual que Barbara, el tiempo de Jason Todd como Robín había llegado a un final brutalmente sin ceremonias a manos del Joker y Harley Quinn. El payaso lo había golpeado casi hasta morir con una palanca y luego lo encerró en una habitación con una bomba real. Batman no pudo llegar a él a tiempo.

Batman: La Broma FinalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora