Capítulo 22: Divorcio

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●★● Sariah Mansour ●★●

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●★● Sariah Mansour ●★●

Divorcio

Despierto totalmente desorientada, toda la habitación se encuentra en total oscuridad, me volteo, la cama se encuentra vacía, al parecer se levantó, hace rato, el reloj se encuentra en la mesa de luz, son las nueve de la mañana, me levanto corriendo de la cama, el dolor de cabeza es fuerte, pero lo puedo soportar.

Entro al baño, busco entre los cajones un cepillo dental nuevo para usarlo, cepillo mis dientes, gradúo el agua, quito la ropa que llevo puesta, tomo una ducha corta y me visto de nuevo con la misma ropa. No uso la misma tanga porque esta se encuentra sucia, como llevo un vestido no me preocupo mucho.

— Te he dejado sobre el tocador una bandeja con jugo, agua y unos analgésicos.— este se encuentra bien peinado, oloroso y arreglado de manera formal.— Cualquier cosa que necesites la señora de la limpieza puede ayudarte.

— Gracias por las atenciones, pero ya debo irme.— arreglo mi cabello frente al espejo.— Cuando me fuiste a buscar al club, ¿Tenía mi cartera conmigo?

— Jacob se quedó con ella, todas tus cosas personales están en su casa.

— Bien, de igual forma, gracias por todo.

— Quiero hacerte una pregunta.— abotona su camisa.

— Adelante, te escucho.— tomo una pastilla y el vaso de agua.

— ¿Te estás cuidando?— su pregunta me toma por sorpresa.

— Sí, he vuelto a usar implante, pero este es más efectivo y no me causa daños.— suelta un suspiro de alivio al escucharme.

— No lo tomes a mal, pero no sería conveniente que quedes embarazada de mí y menos divorciándote.

— No te preocupes, no soy idiota.— tomo la pastilla y agua.

— Una cosa más, esto que sucedió anoche, no se puede volver a repetir, no quiero que confundas las cosas, solo podemos tener sexo, no te estoy usando; sin embargo, considero que es lo mejor para los dos.— me mira fijamente en espera de alguna reacción.

Me mantengo neutra ante él.

— No pienso ilusionarme contigo, ya bastante tengo con mi matrimonio y sé que para lo único que te intereso es para follar, así que tranquilo.— dejo el vaso nuevamente en la bandeja.— Lindo día.— salgo de su habitación.

No me detengo a mirar hacia atrás, toco el botón del ascensor y entro en este, cuando la puerta se cierra me desmorono en el piso. Puedo verme dramática, pero siento tantas cosas juntas que es inevitable no explotar, siento tanta mierda junta que ya no sé como sacarla.

El seguridad del edificio me pide un taxi, le doy la dirección de la casa de Jacob, le pago y camino hacia la casa de mi amigo, toco el timbre, no tarda en abrirme.

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