Capítulo 43: Romanov

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Romanov en multimedia

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●★● Sariah Mansour ●★●

Romanov

— Mejor ve a tu casa y descansas, la misión fue caótica.— Vanessa se interpone en mi camino, como si estuviera ocultándome algo.

— No debes preocuparte, estoy bien, dejaré el informe en mi oficina y luego iré a casa.— la hago a un lado.

— Eres terca, por lo tanto, no tengo de otra que decirte.— me detengo.— Lo que verás podrá interferir en tus nervios, pero es real.— abre los ojos como plato, Jacob ríe.

— Ni que fuera a ver un fantasma.— Jacob y yo reímos a carcajadas.

— Creo que lo verás.— mi sonrisa se borra al ver a Dimitri salir de la base acompañado del general y demás superiores, estos ríen.

Dimitri me mira, conectamos, miradas, siento mi respiración irse, no aguanto más y termino desmayándome en los brazos de mi amigo, todo se vuelve negro y no recuerdo nada más, las voces de Jacob y Vanessa es lo último que escucho.

El olor a alcohol me despierta, abro los ojos aturdida, estoy acostada en mi habitación, Vanessa sostiene un algodón en las manos, lo quita de mi nariz al verme despertar, solo estamos nosotras dos en la habitación.

— Antes de que digas algo, no fue un sueño, todo lo que viste es real, te desmayaste por la impresión.

— ¿Cómo es que está vivo?— me levanto lentamente, todavía me siento un poco mareada.

— Él lo hablará contigo, pero no te preocupes, lo harán en su momento, cuando te sientas lista para hacerlo.— deja el algodón en la pequeña mesa al lado de mi cama.

— Tengo miedo de que no sea real.— pellizco mi piel para asegurarme de que esto no es sueño.

— Dejaré que proceses todo sola, lo necesitas.— besa mi frente y sale de la habitación, dejándome sola.

Me quedo sentada sobre la cama, proceso todo lo que acaba de ocurrir a mi alrededor, no puedo creer que mi mejor amigo está vivo, esto es algo que va fuera de lo normal, durante seis años había creído que estaba muerto, que hoy la realidad sea otra es algo que no tiene explicación.

Lavo mi cara, cuando siento que estoy preparada salgo de mi habitación, Dimitri se encuentra en la oficina del general, tomo un respiro antes de entrar, Iván, Salvatore, Vanessa y Jacob observan cada paso que hago, es como si les asustara mi reacción.

— Si no estás lista, no entres.— Vanessa se acerca a mí.

— Lo estoy, es mejor enfrentarlo en cuanto antes.— abro la puerta, Dimitri se encuentra sentado frente a la puerta, al verme se pone de pie.

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