✧*:.。.49.。.:*✧

1.4K 142 28
                                    

[•••]

Al obtener el tan preciado permiso de los padres de TaeHyung, ambos adolescentes no pudieron evitar sentirse como si acabarán de casarse. Y es que, aunque sea por unos días estaría toda su pequeña familia junta las 24 horas del día.

Sin querer admitirlo, JungKook esperaba que Tae lo invitara a dormir con él. Ya habían acordado que el mayor dormiría en el cuarto de invitados y el menor en la principal para que tuviera más comodidades, sin embargo, aún mantenía la pequeña esperanza de quizás el menor lo dejara dormir en la misma cama. Tal vez incluso abrazarlo o cosas así, quién sabe, quizás un besito mañanero.

El corazón de JungKook estaba tan anhelante que se sentía como un niño a la espera de navidad.

Aunque volviendo al trato, en realidad fue más un acuerdo con engaños por parte del mayor, pues en su afán de que el castaño tuviera todo lo que quisiera y estuviera lo más cómodo posible, hizo parecer que la habitación de invitados era mucho mejor que la principal, por lo que el pobre Kim se negó a pasar las noches ahí alegando que la mejor habitación debía ser para el pelinegro pues él era quién salía a trabajar.

Jeon sabía que estaba siendo demasiado impulsivo y descuidado con la protección de su corazón, pero no podía evitar imaginar que en un futuro, tal vez este pudiera ser su día a día, tal vez, con su lindo esposo esperándolo en casa con la cena o cuando ambos llegasen del trabajo, o él cocinando para el menor, tenía tantas posibilidades y tantas expectativas que no podía esperar.

Y sus ansias eran aún más emergentes con esto, estaban en ese momento en la universidad haciendo algunos trámites finales para dentro de unos meses recibir su certificado, pero eso no era lo importante. Lo importante aquí era la sensación de orgullo y la gran calidez que ambos sintieron cuando entraron juntos, con el mayor sujetando firmemente las caderas del menor en un intento de protegerlo de cualquier cosa, física o verbal.

TaeHyung se sentía orgulloso de alguna manera, no sabía el porqué exactamente, pero estaba seguro de que se trataba del pelinegro que lo apretaba contra su pecho. Quizás la cálida sensación era simplemente seguridad, la seguridad que le brinda el mayor o tal vez había caído.

Quizá había caído tan bajo y tan profundo por su mayor como jamás imaginó, a lo mejor él se la pasaba fantaseando cómo sería si algún día se casara con Jeon o cómo se verían viejitos, arrugados y juntos. Tal vez Kim no quería admitir que esos pensamientos llenaban su corazón de una manera tan cálida y linda que no podía dejar de esperar, esperar que algún día así sea. Que, si lo cree con la suficiente fuerza, a lo mejor, un día será merecedor de tal vida.

— Si me sigues viendo así te voy a besar hasta que se me caigan los labios. — Jeon le susurró al oído, la voz ronca logrando hacer a TaeHyung estremecer.

— Mhm, ¿Lo harías? — No le pregunten de dónde sacó tanto atrevimiento. De repente era como si quisiera ser el único centro de atención de su Hyung.

Quería serlo todo. Sólo TaeHyung. Que sólo piense en él. Él es mejor que cualquier otra persona, Jungkookie debe saber eso.

— ¿Quieres averiguarlo? — La mano en las caderas de TaeHyung dió un apretón haciéndolo pegarse aún más al pecho contrario.

No sabía porqué TaeHyung desde el beso había estado tan coqueto, sin embargo, por favor, hagan que pare. No es sano para el pobre y sensible corazón de Jeon que TaeHyung sea tan coqueto con él. No, señor.

A pesar de que está coqueteando también, cree firmemente que los latidos de su corazón se escuchan a 20 millas a la redonda.

Oh, por favor, solo díganle a ese hermoso ángel que le tenga algo de piedad y deje de mirarlo así, como si estuviera apunto de saltarle encima, teme que se desmaye antes de siquiera poder tomarlo.

𝗛𝗲'𝘀 𝙢𝙮 𝗻𝗲𝗿𝗱 [kσσktαє]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora