-Señor, hemos llegado- como si no lo notara.Bajé del avión a ¿la nada?
-Y esto es exactamente
-Ecuador señor, una parte no habitada- asentí -Debemos caminar tres horas bosque dentro.
-También alimentarme- si me enfrentaría a un grupo de locas de la naturaleza debía estar fuerte, también tener mi poder en sus máximas.
De algo sirvió la coqueta azafata
Nos adentramos al bosque y comenzamos a caminar, luego de varias horas divisé a lo lejos las flores.
¿Eso es ocultarse para ellas?
Las puedo oler a kilómetros y con todos esos colores verlas desde un avión.
-Me esperarás para regresar- demandé y me abrí paso hasta acercarme, estaban todas prácticamente desnudas como acostumbran.
-¿Que hace un chupa sangre en mis tierras?
-Busco a un grupo de Ninfas de oriente
-Esto es occidente, largo de aquí- negué entre risas y me acerqué con rapidez hasta tomar su cuello y apretar.
-No me subestimes, no me tiembla el pulso para matarte.- miré más allá de ella y las notaba a todas inmóviles en su sitio. -Tu- llamé a la que parecía caería desmayada -¿Donde están?- y en efecto, señaló la cabaña tras ellas. -Tráiganlas
-¿Donde está ella?- exigí apenas las tuve en frente
-Amo Min
-Hablen
-Madai se fue apenas dejarnos- Madai, así que ese era su nombre -No sabemos su paradero.
-¿Que desea este ser despreciable con mi hija?- la Ninfa que se encontraba aún recuperándose en el suelo luego de ser lanzada preguntó.
-¿Hija?- reí -Entonces debería presentarme Suegra. Min Yoongi
...
Luego de horas de hacerme perder el tiempo porque en efecto, no poseían alguna información, decidí marcharme.
Apenas llegamos nuevamente al avión y cuando mi teléfono encontró señal marqué a Chan, era uno de los vampiros que había enviado y aún no se reportaba.
Luego de varios tonos respondió.
-Habla- mandé
-Lo siento señor, no he encontrado ninguna Ninfa terrestre.- me harta todo esto -Solo una Ninfa de agua que se esconde entre cuevas a la orilla del mar.
Para este punto no me importa quien sea, solo quiero que me den su paradero. También está el hecho de que puede ser una de las que hulleron con ella y se apartó del resto. -Tu ubicación
-Las Bahamas señor
-Ubicación actual en la que pueda aterrizar el avión, en 5 minutos- cerré la llamada y subí al avión para comenzar con el camino. -¿Que hace aquí?- señalé el cuerpo inerte.
-No sabíamos si dejarla señor- puse los ojos en blanco.
-¿Y pretenden que cruce todo el Atlantico con ella ahí tirada?- idiotas, si no les mando a hacer no hacen.
Al cabo de unas horas habíamos llegado, vuelo idiota y sin sentido para algunos. Pero para mi que tengo años detrás de ella no lo es.
Para mí que sueño con su olor contra mi piel, con su sangre llenando mi paladar y mi polla entrando en ella sin descanso. Mis manos apretando su cuello hasta que no haya vida.
Y saciando al fin el odio que le tenia al no lograr sentirme satisfecho con nada, con nadie. Horas de sexo y no daban ningún alivio. Tratar de saciar mi sed de sangre y no lograrlo nunca. Siempre estaba esa sensación de hambre.
Ese dolor desmembrante en cada extremidad, las vueltas de mi cabeza por las noches y los dolores intensificándose con la luz del Alba.
Lo duro que me pongo con solo recordar su cuerpo desnudo sobre el mío. Me la follare antes de matarla.
En cuanto me libre de todo esto.
Bajé del avión y divisé a lo lejos quien me había hablado, parecía estar de vacaciones el maldito. Bermudas y camisa abierta.
-¿Donde?
-A 5 minutos a pie y 20 en auto.
-A pie- no sé el porqué pero sentía mi dolor disminuir.
Era como cuando la tenía cerca.
Recuerdo cuando padre la mandó a los calabozos, el dolor que sentía al día siguiente era tan grande que no pude beber. Comparando los síntomas y hablándolo con madre entendí lo que pasaba.
Así que me vi teniendo que mandar por ella y mantenerla cerca, olerla, sentirla, tocarla, beberla en todo el sentido de la palabra.
Al menos no logré acostarme con ella. Parecería irónico porque justo ahora era lo único que tenía en mente, pero de haberlo hecho en aquel momento no tendría escapatoria.
Creía que con acostarse con una Ninfa esta te embrujaba de alguna manera hasta la obsesión. Por eso nunca lo hice. Vaya sorpresa me llevé al enterarme de que con beber su sangre bastaba. Pero ya era tarde para ese entonces, aunque supongo que no se me puede culpar.
Solo tenía 50 años para ese entonces, era apenas un crío insolente. Ahora con más años y habiendo aprendido a vivir con el dolor de estar lejos de ella entendí lo estupido de mi actuar.
Lo alenté a correr y apenas unos minutos después llegamos al lugar. Eran cavernas de rocas básicamente. Prácticamente sumergidas bajo el agua y es temporada de mareas bajas en el lugar.
Era claro que solo una acuatica podría estar aquí y de no ser porque mi dolor se sentía prácticamente inexistente habría dado media vuelta y regresado, pero es que debía ser ella o al menos ella debía estar cerca.
-Si no es quien busca.. ¿podría no matarla? Quiero divertirme un poco- no respondí, aún así la mataría si no era. Aunque pensándolo bien. Quizás si la deje viva para que sea otro idiota pase por lo que me aqueja.
Bajé de un salto hasta una de la cavernas y juraba que podía olerla, había solo un pequeño árbol de cerezo en una esquina, plantado en un pequeño recipiente.
Y donde no alcanzaba el agua ahí estaba ella, cubriendo su pecho con sus rodillas.
Apenas su vista fue puesta en mi se puso de pie, temblaba como un siervo. -Hola Florecita.
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Dominio
ספרות חובביםElla huye de lo que se espera de ella, busca en el refugio. ¿Cómo puedes refugiarte en el mal? Sexto Libro de la Saga Paranormal Primer Libro: Gritó Lobo Segundo Libro: En Las Sombras Tercer Libro: Probar Cuarto Libro: Corre Quinto Libro: Te Atrapé...