Rinney - Brance - Grilly

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—Queria darte algo que te compuse meses atrás— dijo con el cassette en la mano, el peli castaño fruncio el seño.

—¿Que es?— pregunto aún más intrigado que antes y el peli negro le pasó el cassette, este lo cogió emocionado y empezó a inspeccionarlo.

—Es una canción que te quise hacer para tu cumpleaños, espero que te guste mucho— dijo y el peli castaño asintió con su vista aún fijada en el cassette.

—Gracias Robin, es el mejor regalo que e tenido en años— agradeció emocionado y el peli negro sonrió.

—¿No crees que me merezco algo?— cuestionó con una media sonrisa y el peli castaño alzó su vista y sonrió.

—Si— Se acercó para empezar un tierno besó, el peli negro puso sus manos en las caderas del peli castaño y este puso sus brazos alrededor de su cuello. Cuando había pasado un minuto estos se habían separado y sonrieron.

—Te amo— dijieron a la vez y juntaron sus frentes.

—¡Chicos ya llegué! — exclamó mientras cerraba la puerta. Los dos bajaron rápidamente.

—¿Como te fue hoy en el trabajo, madre?— preguntó Bruce con una sonrisa en el rostro, la señora lo miro extraño.

—Bien— respondió sin más y los dos asistieron sin quitar las sonrisas de sus rostros, la mujer entre cerro los ojos, todo esto ya se le está haciendo raro.

—Me alegro mucho señora, ¿Y como se siente?— fue el turno de Vance en preguntar esta vez y las sospechas de la mujer aumentaron más.

—Mejor que nunca.

—Que bueno— dijieron los dos a la vez y la mujer se cruzó de brazos.

—Bien, ahora me van a decir que demonios están tramando— dice y los dos se miraron nerviosos.

—Esque están haciendo una fiesta en la escuela y pues tenemos que pagar— le respondió Bruce y la mujer abrió los ojos sorprendida.

—¡Pagar!— exclamó ella —¡¿Pagar para que?!

—El director dice que para mejorar la escuela, ya que esta muy vieja y quieren ponerla más "bonita"— le explicó el mayor y hizo comillas por lo último mientras rodaba los ojos.

—¿Pero preguntarles a los estudiantes por dinero? Se me hace ridículo.

—Eso es exactamente lo que pensamos, pero el director dijo que sin dinero, no podríamos ir a la fiesta.

—No lo puedo creer— la mujer susurro mientras se llevaba una mano hacia su boca.

—Entonces, ¿Vas a darnos dinero?— volvió a preguntar el peli negro y la mujer asintió.

—Claro, pero tengo que hablar con el director antes— dijo y los dos asistieron.

Finn y robin ahora mismo se encontraban recostados en la cama del peli castaño hablando.

—¿Crees que podremos ir a la fiesta?— pregunto el peli castaño y el peli negro se encogió de hombros.

— lo dudo, recuerda que para poder ir necesitaremos dinero — le respondió y el menor hizo una mueca, de verdad quería ir a la fiesta.

—No es justo, no todos tenemos dinero para los gastos de la escuela— dijo y el peli negro solo le acarició el pelo.

—Ya se, pero no podemos hacer nada.

—Podríamos colarnos— volvió a decir y el peli negro solo lo miro con una ceja alzada, no podría imaginarse que su novio tuviera esos pensamientos tan rebeldes.