{ 23 }

775 53 11
                                        

- ¡Si! - chillo con una sonrisa y el peli negro aplaudió al ver como el chico alcanzó su record.

- Lo lograste, felicidades Vance - le felicito y Vance solo lo abrazo, cosa que sorprendió al peli negro, pero correspondió.

- ¡Gracias Bruce! - se separó y el peli negro solo le regalo una sonrisa.

- De nada, ¿Me enseñas a jugar? - pregunto y el peli Rubio asintió permitiendole el paso y el peli negro se puso en el juego rápidamente.

- Bien, solo tienes que hacer esto... - el peli Rubio le empezó a explicar, pero el peli negro estaba distraído por el mayor, estaba muy nervioso, Vance estaba detrás de el mientras tomaba control de sus manos y le enseñaba como jugar, sus manos ahora mismo se encontraban arribas de la suya, estaba muy rojo.

Finn y Gwen ahora mismo se encontraban jugando a las muñecas, pero el peli castaño no se estaba divirtiendo mucho, cosa que la chica noto, poniéndola preocupada.

- Finn ¿Estas bien? - le preguntó mientras dejaba de jugar y lo miraba, el chico negó.

- No, no me siento bien Gwen, me parecería demaciado mal dejar a Robin de la nada, sin decirle que ya no poder pasar tanto tiempo con el - le respondió con la mirada baja y la chica solo lo miro triste y se reincorporó.

- Podemos mentirle a papá, diciendole que vamos al parque, total creo que nos dejara - dijo y el chico la miro con esperanza mientras una sonrisa se formaba en su rostro.

- ¿Encerio crees que funcione? - cuestionó y la chica asintió sonriendo.

- No perdemos nada con intentar - volvió a decir y el peli castaño asintió.

Los dos chicos dejaron las muñecas en su lugar y bajaron a la sala, encontrándose con su padre durmiendo en el sillón con la televisión prendida, los dos solo rodaron los ojos y se acercaron lentamente.

- Papá - lo llamó la chica mientras lo sacudía y el señor se reincorporó, abriendo sus ojos lentamente.

- ¿Que pasa? - pregunto con una voz ronca y los ojos entre cerrados.

- Queríamos saber si podríamos ir al parque, le juramos que volveremos dentro de 30 minutos - dijo y el señor solo se tallo los ojos con una mueca.

- Si, hagan lo que quieran - murmuro con sueño mientras volvía cerrar los ojos.

Los chicos se miraron con una sonrisa cómplice y se dirigieron a la salida. Cuando salieron notaron que el sol todavía estaba puesto asique todavía estaba temprano. Al llegar a la casa de Robin el castaño tocó la puerta dos veces, esta siendo rápidamente abierta por el chico, que los miro sorprendidos.

- Hola chicos, ¿Que hacen aquí? - pregunto mirandolos confundidos y los dos se miraron.

- Tengo que decirte algo Robin - dijo el peli castaño volviéndolo a mirar y el chico se preocupó y lo dejo pasar. Ahora ya estaban sentados en el sillón.

- Entonces, ¿Que me quieres decir? - cuestiono aún preocupado y el chico suspiro mientras miraba hacia abajo.

- Mi padre se dio cuenta de todo el tiempo que pasamos juntos y ahora quiere que me quedé en casa por más tiempo, y que cuando salga solo puedo llevar a Gwen o no puedo ir - respondio jugando con sus manos y Robin solo asintió.

- Sabría que pasaría - dijo y el menor asintió, la chica solo los miraba a los dos con pena.

- Padre es muy fácil de engañar, asique cada vez que quieras estar con tus amigos o con Robin en general, podremos hacer una excusa y listo, no creo que le importe - sugirió la chica y los dos la miraron como si estuviera loca.

Rinney - Brance - GrillyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora