Después de esa noche, las cosas no volvieron a ser iguales, pero para bien; Betty y Jughead pasaban todo el día y todos los días juntos, y Jessica no volvió a aparecer, por suerte para ellos dos.
El verano avanzaba y ellos intentaban aprovechar cada día como si fuera el ultimo. ¿A dónde llegaría esto? Ellos no lo sabían, y tampoco les importaba.
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Era temprano cuando Betty bajo las escaleras de su casa, sonriente, y se encontró solamente con su madre en la sala de la cabaña, leyendo un libro mientras se tomaba su respectiva taza de café. Era un sábado en la mañana y no había muchas cosas que hacer.
—Buenos días mami— Saludo Betty a su madre, acercándose a ella y besando su mejilla. —¿Por qué tan sola?—
Alice miro a su hija, dejando su libro de lado y su taza de café en la mesita frente al sofá. —Polly aun duerme, no se qué le pasa, últimamente solo quiere dormir. Y tu padre salió con Clifford. En un rato me juntare con Penélope en la playa. ¿Quieres venir?—
—Ya luego los alcanzo, mamá. Voy a salir un rato a... bueno... ya sabes con quien me voy a juntar— Explico Betty, sonrojada, jugando con un mechón de su cabello.
Alice miro a su hija con una ceja alzada. —Lo sé, pequeña. Cuídate y dale mis saludos a Jughead— Pidió, poniéndose de pie.
—Claro, te amo, mamá— Se despidió Betty, abrazando a la mayor para entonces irse de la cabaña con una sonrisa.
Ella salió de esa cabaña con una sonrisa que no podía ocultar; El tener al menos la idea de poder encontrarse con Jughead la llenaba de una emoción y unas sensaciones que eran algo nuevo para ella, algo extraño.
Salió a la playa y no tuvo que buscar mucho para ver a ese Jughead sexy sin camisa, con sus músculos de futuro doctor al descubierto, con esa mirada impactante y esa sonrisa inquebrantable.
Betty se acerco a el y ambos se saludaron con un cálido y dulce abrazo, un abrazo del que ninguno de los dos se quería separar. Estar en los brazos del otro lo era todo para ellos.
Jughead se separó, y la miro con una sonrisa mientras colocaba un mechón de su cabello detrás de su oreja. —¿Cómo estas, rubia? Te ves hermosa hoy—
Betty sonrió y se sonrojo. Aunque básicamente ya estuviera acostumbrada a que el le hablara así, seguía sonrojándose cuando él le ponía esos dulces apodos.
—Si antes de venir aquí estaba bien, ahora estoy mejor— Aseguro, sonriéndole mientras acariciaba su cabello con algo de dificultad por su altura.
—Perfecto, vamos a caminar. ¿Quieres?— Le pregunto, tomando su mano.
Betty asintió, y así ambos empezaron a caminar por las orillas de la playa, tomados de las manos, admirando el perfecto paisaje mañanero de la hermosa playa de California, en silencio. Cuando disfrutas la compañía de alguien, no es necesario hablar mucho.
Ese silencio duro hasta que Cheryl y Toni se acercaron a ellos corriendo, tomadas de las manos y en sus bikinis; Se veían emocionadas y no se sabía por qué.
—Tenemos algo divertido para hacer esta noche— Anuncio Toni, emocionada.
—¿Quieren salir con nosotras esta noche? También díganle a Jason y a Polly— Pidió Cheryl, igual de emocionada que Toni.
—Perfecto, pero... ¿A dónde?— Pregunto Betty, confundida, al igual que Jughead.
—Habrá una fiesta en un bar de la ciudad y nos pareció buena idea asistir todos. O sea, los que quieran ir. Tu y Jughead, Polly y Jason, Cheryl y yo...— Hablo Toni, mirando a la pelirroja con una sonrisa.
—Yo se lo comentare a mi hermano para que valla con Polly a ver que dice. Pero... ¿Ustedes irán si o no?— Pregunto Cheryl, con los ojos brillantes, mirando a la rubia y al pelinegro.
Betty miro a Jughead, y el la miro a ella; Ambos buscaban la aprobación del otro, pero al mismo tiempo ninguno de los dos decía nada.
—Entonces...— Empezó a hablar Jughead, mirándola.
—Yo si quiero ir, solo si es contigo— Admitió Betty, mirándolo con una sonrisa.
Jughead sonrió. —Entonces vamos—
Betty sonrió, y el le sonrió a ella; Sus miradas conectadas una vez más, y otra vez esa tensión tan perceptible que tanto Cheryl como Toni notaban apareció entre ellos.
—¡Perfecto!— Chillo Cheryl, aplaudiendo. —Hoy a las siete de la noche. Ahora le diré a Jason, si es que esta en casa y no se ha ido con tu hermana— Dijo, divertida.
—Perfecto, ahí nos vemos— Aseguró Betty, con una sonrisa, mirando a Jughead. —¿Verdad, Juggie?—
Jughead asintió con una sonrisa, besando su mejilla. —Yo iré a recogerte esta noche—
—Estoy de acuerdo— Acepto Betty, abrazándolo.
—Que romántico...— Le murmuro Cheryl a Toni en el oído, chillando en voz baja.
Toni también chillo. —Nos vamos a divertir mucho esta noche—
—Disculpen... ¿Qué cosas están murmurando?— Les pregunto Betty, igual de confundida que Jughead.
—Oh... nada. Iremos a ver si Jason aun esta en casa y lo invitaremos para que invite a Polly. Si Polly sigue en casa díganle también— Pidió Cheryl, tomando de la mano a Toni y largándose a correr.
—¡Nos vemos esta noche!—Exclamo Toni, corriendo con Cheryl.
Betty y Jughead soltaron una pequeña risa y se tomaron de las manos una vez mas para seguir caminando por la playa, tranquilos y con la mente despejada y serena.
—Una fiesta en el bar esta noche... ¿Eh?— Pregunto Betty, mirando a Jughead mientras caminaban a orillas de la playa.
Jughead suspiro y la miro, aun caminando a su lado. —No lo sé, la mayor razón por la que acepte es porque se que quieres ir, pero no me gusta la idea de ir en donde habrá mucho alcohol por lo que te paso la ultima vez que lo consumiste— Admitió, bajando la mirada.
Betty lo miro con ternura. —Lo se... pero no te preocupes. No habrá agua tan cerca y esta vez me voy a cuidar de tomar de más. Es lindo que accedieras a ir solo porque yo quise. Pero... no es necesario—
—Claro que lo es, alguien tiene que cuidarte, Betts. ¿Quién mejor para hacerlo que un doctor como yo?— Pregunto Jughead, sonriéndole.
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Un doctor como el para cuidarla 😍
Se que me he desaparecido una semana, pero he tenido demasiado trabajo, he estado muy estresada y algo enferma. Agradezco su paciencia, los amo❤
