Capitulo 29

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Se fueron cuatro largos años desde aquel verano que cambio la vida de varias personas para siempre, y las cosas no volvieron a ser iguales.

Jughead continuo con su carrera de medicina, porque salvar vidas seguía siendo su pasión. Ser uno de los doctores más reconocidos lo mantenía ocupado para dejar de pensar en ella, aunque sea por un momento muy fugaz.

Aunque se fuera a emborracharse cuando estaba libre, para distraerse del dolor.

Betty, en cambio, se fue a estudiar arquitectura a la universidad de Harvard y se convirtió en la mejor arquitecta de Riverdale, siendo la responsable de las obras mas importantes del pueblo.

Eso no fue todo. Polly dio a luz unos siete meses luego de la boda con Jason y nacieron los gemelos pelirrojos Juniper y Dadwood; Una niña y un niño de tres años que rápidamente se volvieron los consentidos de la familia Cooper y la familia Blossom.

Aunque su vida fuera exitosa, no había olvidado a ese hombre del que se enamoro aquel verano, aunque su vida fuera totalmente diferente hoy en día.

Y él no había olvidado a esa mujer que transformó su vida sin darse cuenta.

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Betty acababa de participar en la inauguración de uno de sus proyectos más importantes en Riverdale junto al alcalde del pueblo y muchas otras autoridades involucradas, pero al final solo se quedo celebrando con los obreros que hicieron posible el proyecto.

Ella estaba en medio de la obra que había dirigido; Era un enorme edificio destinado a ser un apartamento, con un hermoso jardín detrás. En ese jardín Betty estaba celebrando con sus obreros el inmenso éxito que había sido su proyecto.

—Señores, todo esto es merito de ustedes. No sé qué habría sido de la obra sin que ustedes hubiesen participado. Felicidades, lo hicimos— Felicito Betty a los obreros, feliz, alzando su copa de licor.

—Oh no, patrona. Esta obra no hubiese sido posible si usted no la hubiese guiado— Aseguro uno de los obreros, mirando a los demás. —¿Si o no, muchachos?—

Todos festejaron con un grito de triunfo, juntando sus copas de licor en nombre de Betty; Ella se había convertido en inspiración y ya era bastante querida por todos, no solo por sus obreros.

En eso llego Archie, y después de saludar a los obreros, se acerco a su mejor amiga rubia y se sentó a su lado, en donde ella estaba, emocionado.

Betty rio, divertida, viendo lo acelerado que andaba su amigo. —Archie, ya, puedes respirar—

Archie tomo una gran bocanada de aire, mirándola. —Okey, vine corriendo, perdón— Se disculpo, sin dejar de mirarla. —Escucha... vine porque quiero que me acompañes a mí y a Verónica a una increíble fiesta de máscaras que habrá en el antro que esta cerca del parque. Es esta noche—

—¿Una fiesta de máscaras?— Pregunto Betty, alzando una ceja.

—Es una de esas fiestas en las que cuando entras, te dan una máscara que después de la fiesta puedes conservar— Aclaro Archie, emocionado. —Bettsi por favor... si Verónica sabe que vas, es más difícil que me diga que no— Suplico.

Betty lo pensó un momento, y termino aceptando. Había tenido un día realmente largo, pero pensó que lo ideal seria divertirse un rato.

Llego a su innecesariamente gran casa de arquitecta exitosa, y tomo un relajante baño después de un día largo y agotador; Tras salir de ahí, se puso un fabuloso vestido brillante, color rosa suave sin tirantes, ajustado a su maravilloso cuerpo de veinteañera.

Se miro al espejo y lo pensó un poco antes de ir; Después de Jughead, no se había vuelto a enamorar. Había conocido chicos, pero solo pasajeros, buscando conocer a alguien que la llenara nuevamente.

Pero hasta ahora le había sido imposible.

Tomo aire, reprimiendo los recuerdos del pasado que querían volver a ella, y termino de arreglarse frente al espejo con su cola de caballo bien alta, con unos mechones cayendo libremente alrededor de su rostro, con un labial rosa también.

Salió de su casa, y el antro que menciono Archie quedaba bastante cerca, solo un par de cuadras. Cuando llego, identificó a sus amigos de inmediato.

Los identifico cuando los vio comerse a besos frente al antro, con sus respectivas ropas elegantes y ese empalagamiento que los caracterizaba.

Tomo aire y se dispuso a acercarse, aunque no quería hacerlo. Antes de que ella llegara a acercarse, sus amigos la visualizaron y sus rostros brillaron al verla con ese radiante vestido.

—¡Estas preciosa B!— Chillo Verónica, acercándose a la rubia y abrazándola. La morocha traía un vestido igual, pero color purpura.

—Realmente luces bien— Admitió Archie, mirando a ambas chicas con una sonrisa y rodeándolas con sus brazos a las dos.

Los tres entraron al antro, no sin que antes una persona en la entrada les diera sus respectivas máscaras, como temática de la fiesta. Una fiesta exclusiva para personas con alta posición dentro de la sociedad del muy desarrollado Riverdale.

El ambiente dentro de la fiesta estaba muy caótico; Música moderna, trajes elegantes, mascaras fabulosas y luces de colores con el olor a alcohol en el aire.

—Esto es increíble. ¿Bailamos o no?— Pregunto Verónica, mirando a su novio y amigos.

—Bailen, si quieren— Dijo Betty, encogiéndose de hombros.

—No, bailaremos los tres— Exigió Verónica, abrazando a su mejor amiga.

—Error, chicas. Primero hay que calentar motores— Contesto Archie, acercándose al mostrador en el que se encontraban todo tipo de bebidas alcohólicas. Pidió dos botellas de ron y una botella de coctel, y volvió a acercarse a las chicas. —Alcohol para Betty y para mí, y jugo para Ronnie. Yo invito, animo—

Betty tomo una de las botellas de ron, y miro a Verónica, extrañada. —¿La borrachona Lodge no quiere alcohol?—

Verónica miro a Betty, después de tomar su botella de coctel. —Después te lo digo— Aseguro, con una sonrisa.

Betty la miro, con una ceja alzada mientras se tomaba un trago; La noche avanzaba, y ella no hacia nada mas que ver como sus mejores amigos eran felices juntos. Ellos la habían invitado a bailar, pero ella sentía que estaba de más.

Imagínate ver como tus amigos con felices siendo pareja, y que tu estes solo o sola. Que te sientas sobrante, el mal tercio todo el tiempo.

Ella tomo aire, dejando su botella vacía a un lado, y fue a buscar mas alcohol al mostrador. Pidió la botella, y cuando se la entregaron, se dio la vuelta y choco con alguien que provoco que su mascara cayera al piso.

—Oh por favor no... perdón, perdón— Se disculpo Betty, agachándose a buscar su mascara, apenada.

—Oh no, no. No se disculpe, señorita. Perdóneme a mí, permítame— Pidió el hombre, agachándose a su lado para recoger al mascara por ella, hasta que se detuvo a mirarla. —Espere... creo que yo a usted la conozco— Admitió, fijando su mirada en ella. —¿Betty?— 




¿Reencuentro?? Esto se pondra bueno🔥


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Samy

♡Amor de Verano♡ ▪Bughead▪ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora