Macau

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Se miró al espejo una última vez antes de ponerse un collar y anillo a juego, regalo qué no había utilizado.

Bajo rápido las escaleras encontrandose a sus padres cenando con su hermano.

-Hueles bonito- le dijo su hermano menor- también te ves bonito- señaló su ropa, que si debía admitir era nueva y la compro para esa fiesta en especial.

-¿Quien me va a llevar?- pregunto despues de jugar con el cabello de su hermano.

-Yo- hizo una mueca al ver que su papá Vegas era quien se ponia de pie.

-¿Te molesta? Hicimos un trato- le dijo mientras tomaba las llaves.

-No, no. Esta bien, vamos, llegare tarde- se despidió de su otro padre y su hermano para salir al auto.

Dio la dirección y avanzaron en silencio.

-Pa..- lo llamo nervioso- ¿Crees.. qué pueda ir a dormir a casa de Diao?- escucho un carraspeo salir de la garganta de su padre- Es para que no se desvelen esperándome...-

-Me desvele muchas veces contigo cuando enfermaste, una más no me hará daño. Mañana no trabajo. ¿A que hora vengo?- respondió su padre dando vuelta en la última cuadra.

-No lo se... te avisare cuando se acabe ¿Si?- pregunto cuando quedaron frente a la casa, podía escuchar la música hasta afuera.

-¿Hasta el final? Macau... hay cosas que no he hablado contigo, hijo...- se quito el cinturón de seguridad antes de interrumpirlo.

-Papá, no, no me des esa platica aquí. No soy tan tonto como para no saber esas cosas- reviso qué llevara su teléfono en el pantalón y abrió la puerta.

-Macau... los chicos son peligrosos, diviértete con responsabilidad. Se que hay muchas cosas en esa fiesta, cuida lo que tomas, si te sientes mal llamame y no confíes tan a la ligera en los demás- su padre había tomado su mano un momento.

-No estas confiando en mi juicio, crees que soy tonto y voy a caer fácil en esas cosas- saco el agarre de su mano con fuerza.

-No es eso, yo ya estuve ahí. Solo quiero que tengas cuidado  si algo te pasa...- Macau rodó los ojos.

-No pasará nada. No soy un niño papá, si te vas a poner así mejor llamare a papá Pete. Adios- salio del auto con prisa cruzando la calle sin mirarlo.

A veces lo trataban de proteger como un niño, cosa que no era. Un chico inteligente como él siempre iba un paso adelante, le ofendia qué su propio padre no creyera en él ni en sus decisiones.

Llego dentro encontrando más gente de la qué espero, algunos chicos incluso se veían muy mayores, no le sorprendía, su amigo era muy social con las fiestas. Busco con la mirada a alguien que conociera, aunque las luces y el humo de cigarrilo excesivo no lo dejaban ver del todo.

Se tenso un poco al sentir el jalón en su cintura haciéndolo caer sobre alguien en uno de los sofás.

-Tranquilo... te encontre- le dijo el chico acomodadolo en una posición mejor.

-Top, me asustaste. ¿Donde están los chicos?- pregunto tranquilo, algo mareado por el olor a vainilla en su colonia.

Top era el crush de Macau desde que entró a la preparatoria, aunque sabía en ese entonces que él un simple chico de 15 años era cosa nada para uno de 18 a punto de irse a la universidad.

Se consoló con verlo a lo lejos. Pero de alguna forma volvió a verlo un par de veces al salir de clases, según decía le quedaba de paso al ir de regreso a casa de su universidad.

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