Quackity está muy interesado en el mejor amigo de su hermanastro, incluso, le ha llegado a coquetear.
Pero aquel chico siempre ignora sus coqueteos o se ríe de ellos tomándolo como broma.
¿Por qué parece que todos están en su contra? ¿Por qué no pue...
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Un chico de ojos rubíes miraba atentamente a su mejor amigo, quien le había tocado exponer un tema relacionado a su clase de biología. En realidad, no prestaba atención a lo que el azabache de ojos violetas decía, estaba más concentrado en el movimiento que hacía con sus manos cada vez Samuel explicaba el tema, miraba el como su mejor amigo se hacía su cabello hacia atrás cada cierta cantidad de tiempo.
La alegría de Samuel era tan contagiosa que Luzu siempre sonreía al ver como esos ojos color violeta se achinaban, al ver su blanca y perfecta dentadura, sonreía enternecido al ver como su mejor amigo en ciertas ocasiones se rascaba la punta de su respingada nariz debido a los nervios.
Estaba enamorado de Samuel, su mejor amigo, y no podía seguir callandolo pero tampoco quería perder su amistad por esos sentimientos tan oportunos.
El chico de mirada carmín salió de su trance al escuchar el montón de aplausos que recibía el azabache por su buena presentación del tema, y al igual que los demás, comenzó a aplaudir aunque no haya prestado ni un poco de atención.
El azabache se dirigió a su asiento, que se encontraba a un lado de su mejor amigo.
–¿Qué tal me fue? –preguntó en un susurro.
El ojirubí le sonrió al chico de cabello negro y alzó su pulgar izquierdo.
–Lo hiciste muy bien, Vegetta... Como siempre –puso los ojos en blanco y soltó una pequeña risita.
El azabache sonrió divertido y desvió su atención hacia el siguiente compañero que le tocaba exponer un tema diferente pero relacionado con esa misma clase. Luzu recargo su brazo sobre su pupitre y dejó caer suavemente su cara sobre su palma izquierda, así admirando el perfil tan atractivo que el azabache poseía.
Lo adorable de todo esto... Era que Samuel le correspondía y estaba al tanto de los sentimientos de Luzu, pues no hace falta mencionar, que Vlogs no era muy disimulado con sus acciones y Vegetta... Hacía exactamente lo mismo.
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Hubo un silencio por unos pocos minutos que se sintieron eternos, Quackity no pronunció alguna palabra, estaba esperando que el castaño lo hiciera, además, de que no sabia que decir exactamente.