Una historia inusual de Dabi, aquí no os encontraréis a un Dabi yandere que solo quiere secuestrar y matar. Esta historia Dabi es un ser humano, tiene sentimientos y comete errores (al igual que la prota)
Contiene Spolier del Manga desde el primer c...
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Otra noche de luna llena de asomaba. Lilith estaba apoyada en la barandilla mirando a la nada. Al fondo estaba la ciudad desprendiendo luz. En sus manos sequía teniendo un cuchillo que utilizo hace un par de horas. Tenía la cara algo manchada de sangre.
Ya pasó un mes desde que los dos novatos llegaron, su primera misión sería en verano. Ella tendría que ayudarles a buscar información del lugar, pero no le dijeron para que.
En una semana tendría que infiltrarse en la U.A. No para atacarles, si no que vería a su hermano participar en la competición que hacia cada año para las agencias.
Sus sentidos de pusieron alerta cuando la puerta se abrió silenciosamente. Notaba como alguien se acercaba por atrás. Lo tenía a unos metros, se paró unos segundos y luego siguió avanzando hacia ella.
Se giró rápida y la puso el objeto afilado justo debajo de la mandíbula.
— ¿Haces eso siempre o solo te caigo mal? - dijo el pelinegro.
Ya no se asustaba, varias veces le amenazo con uno de sus cuchillos. Era común.
— Podrías haber dicho algo cuando entrabas - bajo su mano y volvió a su posición ignorando le.
Dabi se puso a su lado un poco alejado, le echaba miradas algunas veces. Lilith pensaba que pararía al de un rato, pero seguía.
— ¿Que quieres? - le pregunto cansada mirándole.
— Nada - el chico se cruzó de brazos y miro al horizonte.
La castaña estaba molesta, ya había notado su comportamiento extraño. Era distante, frío, maniático, psicópata por lo que pudo ver cuándo mataba. Un villano cualquiera.
Pero cuando tenían que entrenar, o una reunión para información o hasta incluso cuando estaban en el bar. Solo hablaba cuando Lilith lo hacía.
Aún que el solo quería saber porque no le reconocía, estaba distinto si, todas las cicatrices le cambiaron mucho. Pero pensaba que sabría quién era, quería saber el porqué.
— Tengo curiosidad - dijo en un tono coqueto ladeando la cabeza y apoyándose en la palma de su mano.
— ¿Con qué? - Lilith jugaba con el cuchillo, parecía preparada para matar a alguien.
— Como pasaste de heroína a villana. - contesto con simpleza.
Un dolor le dio en la espalda por lo que hizo una mueca y se apoyó en la barandilla más cerca de la chica.
