"Hey, Old Man. Dios nos ha llamado, quiere decirnos algo"
Dijo Scott apareciendo en mi bosque para informarme de algo importante relacionado con Dios. A lo cual, yo decidí levantarme del suelo e ir con él para ver de qué se trataba, yendo ambos al paraíso junto al mandamás para saber de qué se trataba aquella cosa que nos quería decir él
"Mis queridas deidades... Ustedes sabéis que os quiero mucho, y que, por más pecados que comentáis a diario, como mantener cautivo a vuestro propio hijo en contra de su voluntad hasta que él mismo decidió escapar, o también, como no ayudar a los que viven en el multiverso de Flumpty, yo os seguiré queriendo porque para mí sois como mis hijos. Pero... Bueno, veréis... Un día estaba yo tan tranquilo en mi palacio celestial... Ya sabéis, haciendo cosas normales y todo eso, cuando de pronto me llegaron los impuestos y... ¡Oh, yo mío! ¡Los impuestos estaban por las nubes! Y creo que ahora me arrepiento de haber votado a ese partido político en concreto... Pero al caso, pues eso, los impuestos están muy altos, el presupuesto muy limitado, y yo ya no sé qué hacer con vosotros, y por ello... ¡Os he vendido a Disney!"
Anunció él haciendo que tanto yo como Scott quedáramos increíblemente confundidos y desubicados, pues en ese entonces, no sabíamos a qué se refería al decir eso
"¿Qué?"
Preguntó Scott en espera de una respuesta por parte del todopoderoso. Respuesta la cual, para su suerte, terminaría recibiendo
"Lo que escucháis, ahora ya no me pertenecen vuestros derechos. En estos momentos, vuestros derechos les pertenecen a Disney, así que... Ahora, si me disculpan, me voy con el dinero que he conseguido vendiéndote a ti, a tu compañero Old Man, y también a TOOOOODA la existencia. Jiji, chau"
Fue lo último que dijo Dios antes de montarse en su Toledo 5 plazas y marcharse de ahí para no volver jamás, pues ya había conseguido el dinero que necesitaba. No obstante, y pese a que para él, esta maniobra fue cuanto menos inteligente, para nosotros fue un caso completamente diferente...
"Bueno... Decidle hola a vuestro nuevo Dios..."
Dijo el enorme ratón con una cara similar a la de una persona que ha consumido 8 kilos de substancias ilegales. Mirando con una sonrisa en su rostro a aquellos dos
"Tú eres Disney, ¿Verdad?"
Preguntó Scott intimidado por la apariencia y tamaño que tenía aquel ser superior a nosotros. Y para responder su pregunta sin necesidad de hablar, se limitó a simplemente asentir con la cabeza como forma de afirmación
"Bueno... Pues... Ho-"
Y antes de que pudiera terminar mi propia frase, Disney no me dio la oportunidad de continuar hablando y me mandó a callar inmediatamente
"¡A callar! ¡Menos charla y más trabajo! ¡RAPIDITO!"
Ordenó él en un tono ya no tan agradable como el del inicio. Y nosotros dos, incapaces de oponerse, decidimos no hacer otra cosa más que obedecer y marcharnos a nuestros respectivos lugares de trabajo, no sin antes, darnos cuenta de un dato un tanto... peculiar...
"Buff... Menuda faena ahora, ¿tú qué opinas de esto, Old Man...?"
En alguna situación normal, hubiese respondido a su pregunta tranquilamente y sin dilación. Pero esta no era una ocasión normal ni mucho menos...
"O-Old Man... ¡Tu piel! ¡Tu piel está cambiando!"
Exclamó la deidad en estado de completo shock apuntándome con el dedo, mientras veía como de manera dolorosa e inhumana, mi piel iba pasando de un rojizo intenso, a un negro marrón
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El multiverso de FNAF
General FictionEl multiverso... Una fuente infinita de posibilidades, en donde hasta la cosa más improbable puede llegar a suceder, aquí, encontrarás algunas de las historias que ocurren en el extenso e infinito multiverso de FNAF PD: Cabe la posibilidad de que se...