El multiverso de FNAF

Pilero

(Esta historia no está hecha con el objetivo de ofender. No tengo nada en contra de las personas que prefieren a Microsoft antes que Sony. O que piensan que la Xbox es mejor consola que la PlayStation. Este relato está hecho con el fin de entretener y hacer reír... En la medida de lo posible, al lector. Dicho esto, que comience el show)

En una noche como cualquier otra, las puertas de la popular pizzería "Freddy Fazbear Pizza Jr's" terminaron por cerrar, dando por terminado el turno diurno de los animatronicos para dar paso al turno nocturno... Y aquí, es donde todo lo verdaderamente interesante ocurre...

"¡Ah! ¡Lo tengo! ¡Lo tengo! ¡Está tocadisimo! ¡Lo voy a matar!"

Gritó Ballon Boy a todo pulmón mientras jugaba al tan popular "juego Battle Royale cliché promedio". Tomándose el juego con tal seriedad y de manera tan sumamente intensa, que aparte de pegar gritos como si fuese un loco también hacía movimientos erráticos de un lado a otro, como si estuviera esquivando balas en la vida real también

"¡Bonnie! ¡Dispara! ¡Ven aquí rápido! ¡Aquí, estoy herido! ¡Pasa el botiquín!"

Ordenó el animatronico con forma de niño desesperado por sobrevivir en aquel simple juego, para así quedar primero y conseguir ganar junto a su equipo

"¡No puedo ir contigo! ¡Estoy peleando contra otra persona!"

Respondió el conejo sin brazo ni cara tratando de ganar el enfrentamiento contra el otro tipo lo antes posible, para así poder ir rápido con su amigo y salvarlo antes de que terminase muriendo

"¡Pero tronco! ¡Juegas como un maldito manco!"

Exclamó Ballon Boy viendo la pésima forma que tenía el conejo de jugar. Aunque... Al decir eso de que parecía un manco... Terminó ignorando un dato crucial de suma importancia: REALMENTE era alguien manco

"¡Ya de por sí me falta un brazo, idiota!"

Dijo Bonnie enfadado por la forma en que su supuesto amigo y compañero lo había llamado en ese momento. O bueno, en realidad, llevaba insultando a sus amigos desde que empezaron a jugar, así que aquello no era nada nuevo

"¡Foxy! ¡Ven tú a por mí! ¡Que me matan!"

Pidió el niño pensando que Foxy, a diferencia del manco sin nivel que era Bonnie, sí que iría a por él para rescatarlo... Spoiler: No fue así

"No puedo hacer eso ahora. Estoy ayudando a JJ con un enemigo, ella está con menos vida que tú y la está pasando peor. Recuerda que esta es su primera vez jugando"

Explicó el zorro negándose a ayudar a su amigo, cosa que lo hizo enojar mucho pues se le estaban comenzando a acabar las alternativas

"¡Por el amor de Dios, JJ! ¡Juegas tan mal que pareces una mujer de verdad!"

Se quejó el chico de los globos en un ataque de rabia. Pero tal y como pasó anteriormente con Bonnie, el animatronico estaba olvidando algo importante: JJ era una chica

"¡Ballon Boy! ¡Soy una pta chica! No, peor aún: ¡Soy tu maldita novia!"

Respondió la chica resaltando el estúpido y evidente error que había tenido su novio, mismo el cual la hizo enojar un poco

"Oh... Jeje, sí, lo siento..."

Dijo él sintiéndose algo estúpido y arrepentido por su evidente error. Y justo después de eso, el pobre Ballon Boy terminó por ser asesinado por su enemigo, pereciendo en el combate, y terminando con todas sus esperanzas por ganar la partida.

Lo siguiente a esto era bastante predecible: el ataque de rabia fue tan intenso, que las palabrotas, gritos e insultos fueron las cosas más leves que salieron del infante robótico. Lo más grave, sin embargo, fueron la multitud de cosas destrozadas que dejó a su paso el animatronico; Mesas, sillas, muebles, ventanas... Todo fue destruido en la habitación. Y cuando se dio cuenta, no quedaba casi nada en esta misma, todo se había convertido en un cúmulo de escombros y basura destruida que quedaban esparcidas por el suelo de cualquier manera. Lo único que aún seguía en pie era el televisor, la consola, y por obvias razones, el mando. El problema aquí fue que, al intentar cambiar de juego por otro diferente, el mando justo se quedó sin pilas. Y como no, dicho suceso provocó otro ataque de ira por parte del animatronico...

...

Si antes no quedaba nada en medianamente buen estado, ahora directamente no había nada. El robot con forma de niño había hecho posible lo imposible: Había creado la suficiencia energía con sus golpes como para destruir toda la materia de los muebles rotos. No quedó nada, toda la materia fue destruida a nivel atómico liberando cantidades ingentes de energía (E=M*C²). Por obvias razones, el tremendo ruido que causó haciendo todo eso no pasó desapercibido por la resta de animatronicos

"¿¡Se puede saber qué demonios está pasando aquí!?"

Exclamó Puppet rompiendo la puerta de la habitación para ver por qué demonios parecían escucharse bombas nucleares detonando en esa habitación. Topándose con la imagen de Ballon Boy en una sala completamente vacía

"¡Mami Puppet! ¡Se me acabaron las pilas del mando!"

Gritó Ballon Boy haciendo algo de berrinche en el acto. Solo para ser recibido por una fuerte bofetada por parte de Puppet

"¿Y a mí qué me importa que ya no tengas pilas? Cállate la boca un rato y deja de molestar. Si quieres unas pilas nuevas, entonces ve a conseguirlas tú mismo"

Respondió la marioneta enojada por el mal comportamiento que estaba teniendo su "hijo" en ese preciso instante. Y entonces, Ballon Boy, sabiendo que ya no podría depender de nadie más para cumplir su objetivo, decidió hacer las cosas por cuenta propia... Decidió hacer las cosas él mismo...

"No me queda de otra... ¡Mangle! ¡Es hora de montarte!"

Dijo el animatronico para después comenzar a montar sobre Mangle. Subiendo encima suyo y comenzando a cabalgar sobre él/ella como si se tratase de un caballo. Y acto seguido, emprendió viaje en búsqueda de pilas... Recorrió mar y tierra... aire y atmósfera... Escaló montañas, surcó ríos enteros. Todo con un solo objetivo: Obtener esas jugosas pilas para su mando de Xbox...

...

"Espérate aquí, chica. Ahora mismo vuelvo"

Dijo Ballon Boy deteniendo a Mangle en frente del pasillo de la oficina, aparcándola en una de las salas y atándola a un palo para evitar que escapara. Y ya con su vehículo aparcado, llegó el momento de conseguir esas jugosas y suculentas pilas...

"Esas pilas serán mías... Pronto le quitaré a ese guardia lo que es mío, y entonces... Me volveré el mejor jugador de Xbox de la historia"

Dijo en voz baja mientras se escondía en una de las esquinas oscuras de la habitación, esperando el momento oportuno para saltar sobre el guardia y robarle las pilas. Y tras un pequeño rato de espera, el momento indicado llegó y el pequeño muchacho se lanzó hacia él para obtener esas increíblemente buenas pilas...

"¡Ahora! ¡Es mi-! Oh, hola, Freddy"

De manera casi mágica, el guardia había desaparecido y ahora en su lugar solo se encontraba Freddy. Sentado en su silla como todo el oso gordo y mórbido que era. Pero Ballon Boy, sin cuestionarse absolutamente nada de lo ocurrido, simplemente decidió irse de la habitación como si nada. Total, no había ido ahí por ninguna razón en primer lugar...

"Oh, espera...

¡Ese no era Freddy!"