Y aquí estaba yo, arreglándome el cabello para ir con mis hombres a la habitación de Damian, tenía que cumplir el trato para que así ellos pudieran cumplir el suyo, es un sacrificio que debo hacer ya que depende de mi el plan para descubrir a Raphael, el muy maldito se metió con la persona equivocada, tiene que pagar por lo que le hizo a mi papá y a Damian.
Salí de mi habitación para ir a la de Damian, la puerta estaba abierta así que saqué mis mejores pasos sensuales para seducirlos.
—¿Les gusta? —Tenía puesta una pequeña lencería de color blanco.
Ambos me miraron sin decir nada, solo estaban observando mi cuerpo como Leon qué desea comerse a una gacela, joder que excitante.
—Tal parece que no les gusta porque no han respondido.. —hice un pequeño puchero— supongo que se ve mejor así.
Bajo la atenta mirada de ambos, quite la parte superior de mi lencería quedando desnuda, bueno, casi. Azael estaba de pie recargado en la peinadora de Damian, mientras que el estaba sentado. Fui hasta Azael, el no dejaba de ver mis pechos.
—Aquí —subí su rostro para que me mirara, el sonrió de lado.
—Dejame decirte que si, se te ve bien la lencería, pero me gusta mucho más tu cuerpo sin ropa.
Mordí mi labio al escucharlo, no cabía duda de que ambos me encantan, me hacen sentir deseosa y de soy la única que los tiene a mis pies. Con mucho cuidado solté la camisa de Azael, mis dedos subieron a su pecho y sin pensarlo demasiado bese su cuello, luego su clavícula, me gustaba cuando se tensaba cada vez que lo besaba en esa parte de su cuerpo. Me separe un poco de el para tomar su mano y llevarlo hasta la cama y ahí empujarlo para que cayera acostado.
Me subí encima de él dándole la espalda, sentí mi piel erizarse al sentir sus manos acariciar mis muslos.
—Ven aquí —invité a Damian a venir a mi, solté quité su camisa y el me dio una sonrisa ladeada, quería tomar el control pero es difícil teniendo a Damian así frente a mi.
—Abre la boca nena.
Hice lo que me pidió, abrí la boca y el tomó mi mandíbula para meter su lengua dentro de mi boca, joder que rico. Sin poder evitarlo mis caderas se movían sintiendo la dureza de Azael bajo mi intimidad, necesitaba atención ahora. No se que paso pero Azael se sentó en la cama porque sentí como sus labios estaban en mi espalda y parte de mi cuello, sus manos estaban en mis pechos, también recorrían parte de mi cintura y abdomen.
Damian se separó de mis labios, pero aún sostenía mi mandíbula.
—Eres tan perfecta Gina —mis ojos no se quitaban de los suyos—, tan malditamente perfecta.
—Estoy excitada, necesito que me follen ahora...—jadeaba.
—Eres tan mandona —Azael mordió el lóbulo de mi oreja. Me solté de Damian para besar a Azael, sus labios estaban tan mojados y deliciosos, creo que no cambiaría esto por nada ni nadie— necesito esos labios pero no sobre los míos.
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¡Dos para Llevar! [+18] -Finalizada- ✔️
RomanceGina es una chica extrovertida, alegre y con un sueño.. Ser actriz. Su oportunidad de actuar se presenta cuando tiene que hacerse pasar por la Prometida de los hermanos Praxton, ambos caerán rendidos ante las ocurrencias y sencillez de Gina. ¿Amar a...