VEINTISÉIS +1 // LA SCALONETA

35

[9/12/22]
📍Lusail Stadium
🇦🇷Argentina Vs. Países Bajos🇳🇱
Cuartos de Final.

Locales nuevamente.

En el Lusail retumbaban los cantos Argentinos poniéndome los pelos de punta. El clima para el partido de hoy era un poco tenso por las declaraciones rivales. Papá nos prohibió hablar sobre ese tema ante cualquier conferencia y/o entrevista, y nos hizo mantener un perfil neutro dejando con la intriga a todos sobre lo que planeaba el cuerpo Argentino.

Los chicos estuvieron sumamente enfocados en estudiar muchísimo al oponente y armar estrategias en puntos débiles. Los entrenamientos, los cuales presencié, fueron duros; y a ellos no los veía nada más que para entrenar y comer.

—¡Patadas altas!¡Va! —grite y pegue un aplauso.

El cuerpo técnico estaba reunido en el vestuario hablando sobre estadísticas, así que me pusieron a dirigir a los chicos, ya que tenia que disimularse un poco y fingir que yo era parte del "cuerpo de preparadires fisicos", segun papá,  para que no me hechen a la mierda. Mire el rejor, y luego de unos cuantos segundos aplaudi nuevamente.

—¡Bien, acerquense! —dije haciendo señas —Elongamos y entramos —dije mientras me acomodaba en frente de ellos para mostrarles los ejercicios.

Cuando terminamos, se acercaron el equipo de arqueros y el cuerpo técnico, que ya habían salido; unas últimas palabras de aliento se cruzaron antes de entrar al vestuario. Me acomode en el banco de suplentes y luego de un rato, salieron para hacer la formación y dar momento a los himnos.

Los suplentes se hicieron presentes en el banco, junto al equipo de técnicos y médicos un momento antes de que los titulares salgan.

—Brasil quedó afuera —me anunció Paulo con una sonrisa en cuanto paso por mi lado.

El equipo brasilero jugaba un par de horas antes que nosotros, su derrota significaba que el encuentro clásico no se iba a poder dar en este mundial, y también un "alivio" al saber que no íbamos a competir con ellos. Por un lado me ponía feliz al saberlo, y por otro triste, soy consiente de que este Mundial puede llegar a ser el último de muchas figuras importantes en el fútbol, y Neymar entraba en esa bolsa.

"Oh juremos con gloria a morir" sonó como última estrofa del reducido canto argentino, sentí la piel erizada, se escuchaba a los hinchas gritar a todo pulmón mientras los chicos se daban palmadas de aliento al grito de un "vamos eh" en la formación. La ilusión de los argentinos crecía cada vez más, y estábamos un poco más cerca de la gloria.

—¿Estas bien? —preguntó Lean a mi lado agarrándome la mano y regalándome una sonrisita. Ahí me di cuenta que una lágrima bajaba por mi mejilla derecha.

—Si amor, estoy emocionada no más —dije pasándome la mano por la cara.

El cuerpo técnico para hoy había elegido un 3-5-2. La defensa se mantenía intacta con Licha, Ota y el Cuti. De centrales estaban Acuña, Alexis, Enzo, De Paul y Molina. Mientras que la delantera era compuesta por la Araña y la Pulga. Y obviamente, no faltaba el Dibu en el arco.

Luego del himno Neerlandés y del saludo de Capitanes, el partido se dio por comenzado cuando el árbitro Español hizo sonar el silbato.

Los minutos pasaban lento, el ambiente era tenso, y papá daba indicaciones a los gritos.

...