El amor de mi vida (Mario Casas y Tú_______)

Capítulo 50° (Campamento en el Bosque)

Llegamos a las afueras de un bosque en España, nos desmontamos del coche y sacamos las cosas del maletero. Nos instalamos, encontramos una casa abandonada en el bosque y fuimos allí.

》(Ainhoa): Valla, tenemos que amanecer aquí? -dije un poco asustada.
》(Mario): Tienes miedo?
》(Ainhoa): no, no, solo que.... -Mario me interrumpe.
》(Mario): Tienes miedo.
》(Ainhoa): Si, tengo miedo, no me gusta para nada estar aquí.
》(Mario): Tranquila Ainhoa, no te pasara nada si estas conmigo.

Ainhoa

Esas palabras, esas palabras me acuerdan a mi antiguo novio, me decía que nunca me pasaría nada si estaba con el, que el me aferraria a sus brazos y que nunca me pasaría nada junto a el, y lo perdí, lo mataron en mis ojos, no lo pude proteger, no pude hacer nada, le dispararon en una riña que había en la calle, y se le pego un disparo en el corazón.

》(Mario): ¿Porque lloras pequeña?

Vi a Ainhoa llorar y no sabia el motivo, tal vez no le agrada nada el sitio.

》(Mario): Bajos, recoge tus cosas, olvida la apuesta Ainhoa, tu eres más importante ahora.
》(Ainhoa): Mario, no, no es porque estamos aquí, solo que esas palabras que me has dicho me acuerdan a mi novio, que ahora está muerto.
》(Mario): lo siento Ainhoa, mi intensión no fue ocasionarte un daño, solo que quiero que sepas que conmigo no te pasara nada vale, que estarás bien.
》(Ainhoa): olvidemos eso Mario vale, mejor arreglemos nuestras cosas y hagamos una fogata, para azar marbaviscos.
》(Mario): vale. -le mostré una sonrisa enorme.

Ensendimos una fogata y comenzamos a azar malvaviscos, mmmm...deliciosos malvaviscos, son tan ricos y perfectos para un campamento.
Cuando terminamos decidimos tumbarnos en la cama que hemos hecho en el suelo, estábamos hablando de como era nuestra vida, que nos había pasado, si teníamos o no a alguien especial en nuestro corazón que ahora no está físicamente en el, y que nos gusta y que no, y cosas haci.
Mario me contó lo sucedido con su chica, es una historia interesante y a la vez triste, porque el más sufrido aquí ahora mismo es Mario, porque el se nota que la amaba y ahora no puede estar con ella.

Yo Me acerque a el y lo abrace y nos quedamos haci por un buen rato, se sentía perfecto, el era perfecto, tiene todo lo que una mujer busca en un hombre.

De repente Mario se quedo dormido, yo me quede un momento observándolo fijamente, como dormía, como respiraba, como se agitaba, por el movimiento, era tan tierno dormido, luego le seguí yo y nos quedamos los dos dormidos abrazados.