Capítulo 33

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Hannah

Respiro profundo para tranquilizarme y vuelvo a tocar la puerta, llamé a Isak de camino al hotel y no me contestó así que vine hasta acá con la esperanza de que no haya regresado a Noruega, sin antes aclararle todo y pedirle perdón. La puerta se abre y él aparece frente a mi con cara de no haber dormido nada.

-Hola. -saludo bajito pero no sé si me escucha.

-Pasa. -contesta serio.

Entro a la habitación y él cierra la puerta.

-Isak, yo…

Me interrumpe y habla mirando mi vientre.

-Sabes, cuando te ví armando la carpa me dije que tú no encajabas en esa imagen, te veías tan elegante y delicada que no pude evitar seguir mirándote mientras luchabas por montar la carpa, así que te ofrecí ayuda y terminamos con la tarea, me seguí preguntando que hacía una mujer como tú en medio de la nada. -acaricia mi vientre y se siente tan bien que coloco mi mano sobre la suya- cuando te pregunté, me hablaste con tanta pasión al describir todo lo que querías hacer en el viaje y todo lo que habías visto, que me enamoraste al momento porque jamás había visto a nadie disfrutar tanto de algo como tú en ese momento. Tu ojos brillaban al ver la aurora y te veías tan hermosa que no pude quitarte la vista de encima mientras las luces del cielo te tenían absorta.

Acaricio su rostro triste y me parte el corazón verlo así, pensar que yo soy la causante me hace sentir peor.

-Te amo Isak. -confieso y se siente tan bien decirlo- Siento no haber sido sincera contigo en el momento en que me hablaste de tus sentimientos pero estaba tan confundida. -rompo a llorar- No quería aceptar que tenía sentimientos por otro hombre que no era mi esposo y me asusté aún más al enterarme que el bebé no era de Aiden. Perdóname.

-Anhelé tanto escucharte decir que me amas cuando estuvimos juntos, aún así acepté que no lo expresaras, pensé que no sentías lo mismo porque todo fue tan apresurado, pero que le restaras valor a nuestra relación cuando para mí era lo mejor que me había pasado me molestó y por eso me fui, me dije que no podía estar con alguien que no me quisiera, sin embargo pasé semanas pensando en que era toda una contradicción que dijeras que éramos algo pasajero mientras me besabas y mirabas con tanto amor. -pone su otra mano en mi vientre y me acaricia- No podía estar sin respuesta y me decidí a venir, ya el resto lo sabes.

-Estaba tan asustada por la reacción de Aiden, de mis padres y no sabía qué hacer. -contesto.

-¿Y mi reacción?. -pregunta- ¿Llegaste a pensar en mi?. Es mi hijo al que llevas en el vientre y otro lo ha visto crecer porque no fuiste honesta con nadie. Ni siquiera contigo misma, te amo Hannah, lo hago con todo el corazón pero no te perdono. -sus ojos enrojecen conteniendo las lágrimas- No puedo olvidar que querías ocultarme la existencia de mi hijo.

-Isak, perdóname. -lloro- Yo no sabía qué hacer, sentí que el mundo se me venía encima, pero nunca pensé en ocultarte nada, solo no sabía qué hacer. ¿Cómo le decía a mi familia que estaba embarazada de otro hombre?.

-Eso se llama enfrentar las consecuencias de tus actos, Hannah. De haberme llamado al enterarte, habría venido a ti sin dudarlo para apoyarte porque te amo, fuese esperado a que te separaras de tu esposo, a pesar de no saber que estabas casada. Habría sido toda una sorpresa pero habría entendido muchas cosas.

Se separa de mí y frota su cara con frustración.

-Debo volver a Noruega, me necesitan en la empresa. Quiero estar contigo lo que queda del embarazo y obviamente quiero estar con mi hijo pero no puedo vivir en Londres y se me haría muy difícil viajar seguido.

Estúpido AidenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora