Angela
Mi día con mi hermano está siendo fantástico porque al fin vinimos a comprar la cuna del bebé, vimos los 3 modelos que me habían gustado al principio pero terminamos eligiendo una completamente blanca siguiendo el consejo de Aiden. Estoy feliz porque mi hijo se movió y fue la sensación más maravillosa que pude haber experimentado.
-Hay cosas hermosas aquí. -le digo a mi hermano queriendo llevarme todo lo que hay en la tienda mientras veo los pijamas.- Lo quiero todo Ang.
Mi hermano se ríe por lo emocionada que estoy y seguimos caminando.
-¿Aún no compras toda la ropita?. -me pregunta mirando unos pantaloncitos.
-No, solo tengo algunas cosas que compré en Edimburgo pero aún me falta mucho. Es que no he querido venir sola porque sino me llevo toda la tienda. -respondí mordiendo mis labios para no reír.
Él niega con la cabeza y me pasa el brazo por los hombros instandome a caminar.
-Eso imaginé pero debes darte prisa porque este pequeño -toca mi panza- nace dentro de poco y ya debemos irnos porque estoy ansioso por verlo. -dijo Ang dejando un beso en mi mejilla- No quiero que lleguemos tarde a la consulta con el médico.
Para aprovechar el día con mi hermano pedí la cita con el doctor Méndez para hoy ya que las 2 veces anteriores he ido con Aiden, sé que a mí hermano le hace mucha ilusión ver a su sobrino y se nota cuando no me quita las manos de encima tampoco deja de preguntar si me siento bien o si tengo hambre.
Cuando llegamos al consultorio veo a toda mi familia en la oficina del doctor y volteo a ver a Ang sin poder creerlo.
-Todos queremos ver al bebé. -informa mi hermano- Lamentamos no estar disponibles siempre para ti pero te lo vamos a compensar.
Mis padres, los Kang sin Aiden, mi cuñada y mi sobrina me miran con una sonrisa en el rostro, entonces me pongo a llorar.
¡Cómo odio andar de llorona!
Mi hermano me abraza y escondo la cara en su cuello para que no me vean.
-Disculpe doctor, ella no suele ser llorona pero le ha afectado el embarazo. Ha estado muy sensible. -habla mi padre y lo siento detrás de mí abrazándome.
Esto solo me pone peor porque durante toda mi vida hemos sido nosotros tres, aunque los Kang nos han tratado como si fuéramos sus propios hijos fue Ryan Williams quien luchó contra todo por darnos un hogar feliz.
-Mi niña hermosa no llores. -habla mi padre y trato de calmarme, sé que no le gusta verme así porque le recuerda cuando llegaba llorando de la casa de Angelina.
-No se preocupen, ya regreso. -dice el doctor y sale de su consultorio.
Poco a poco voy dejando de llorar y los veo a todos de nuevo.
-Lo siento, es que me puse feliz al verlos. -le digo limpiando mis lágrimas- Saben que no soy ninguna lloraba.
-Yo también estoy feliz pero no lloré. -comenta mi terremoto y todos ríen.
Los saludo a todos y hablamos hasta que llega el doctor pero no viene solo.
-Buenas tardes a todos. -saluda Aiden y Abby sale corriendo hacia él- ¿Cómo está mi niña hermosa?.
-Muy bien, ¿También viniste a ver al bebé de la tía?. -lo interroga colocando su bracitos alrededor del cuello del hombre.
-Así es, todos vinimos a ver al bebé. -le responde a la niña dándole un toquecito en la punta de la nariz.
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Estúpido Aiden
Chick-LitAiden Kang mi amor imposible desde que soy adolescente, siempre lo ví desde lejos y cuando tuve el valor de confesarme me rechazó sin miramientos. Seguí mi vida con el mismo sentimiento intacto en mi corazón hasta que tuve valor otra vez y fui recha...