Hasta regresar a mi hogar

Capítulo 7 - Otra forma de ver

La película ya había iniciado

Iniciaba como todas, con una pequeña intro donde se mostraba el paisaje del lugar y lo tranquilo que era, para después comenzar a mostrar ordenes de búsqueda de personas desaparecidas, y todas con algo en común, y era que todas pertenecían a una de las clases de una prestigiosa escuela

Luego mostró la imagen de un adolescente pelirrojo caminando por las calles hasta llegar a su casa

Todo era normal... Hasta que el chico entró al sótano de su casa, ahí fue donde la pesadilla inició en aquella película de terror

Karma veía atento la película, aunque las acciones del protagonista pelirrojo lo dejaban algo confundido y a la vez extrañado, y era la forma de ser del adolescente

Pero también había algo más, y era la forma de actuar de sus compañeros, algunas actitudes les sorprendía, pero otras le molestaban

— ¿Qué no vaya a sobrevivir? ¡Ustedes mismos están condenando a su propio compañero! — Pensó con enojo

La película llegó a otra parte, donde ahora el protagonista hablaba con una de sus compañeras, confesando que la veía como su hermana menor, y eso lo confundió aún más, hasta que el protagonista dijo algo que le llamó la atención

"Ahora ya no hay marcha atrás, tengo que terminar con lo que inicie..."

— ¿Terminar con lo que iniciaste? — Pensó — Tú... No hiciste nada malo, ellos son los únicos malos, ellos te trataron mal y... A los malos se les da un castigo, era lo que mi papá siempre me decía —

Sus ojos se iluminaron en ese momento, viendo con más atención la película, algo en ella había cautivado algo en su interior

Matar sin querer hacerlo

Matar por venganza

Matar por diversión

Todo con el único fin de hacer sufrir a las personas que se encargaron de dañarlo hasta el punto donde su propia mente lo traicionó

~ • ~

La madre de Karma sentía que en cualquier momento gritaría de miedo, después de todo, ella no era tan fanática de las películas de terror, menos cuando se trataba de un adolescente matando y torturando a sangre fría sin ningún remordimiento

Ante su propio miedo vio a su hijo, esperando que este no estuviera igual de afectado que ella. Simplemente esperando a que lo estuviera pasando mucho mejor

Y claro que era así

Con sorpresa, vio a su hijo observar la proyección con una mirada fija, con un ligero sonrojo en sus mejillas y su boca ligeramente abierta mientras soltaba algunos suspiros, con sus manos entrelazadas a la altura de su pecho, sin mencionar que su cuerpo tenía ligeros temblores

Parecía excitado

Lo más extraño era que la imagen proyectada era usa escena sanguinaria apenas apta para la edad del infante

— ¿H-Hijo? —

Acercó su mano lentamente al hombro del infante esperando alguna reacción, y así fue

Su hijo rápidamente la miró, dejando ver la excitación en su mirada y en la ligera sonrisa que se había formado en su rostro con un sonrojo más grande

Por un momento, no fue capaz de reconocer a su hijo

— ¿Pasa algo, mamá? — Preguntó con inocencia

Después de unos segundos su sonrojo comenzó a desaparecer, mientras que su sonrisa tomaba nuevamente ese toque inocente al igual que su mirada, acomodando sus manos sobre sus piernas, aunque no tardó en tomar su bolsa de gomitas a medio comer

— N-No, no pasa nada hijo, sigue viendo la película — Respondió

Karma asintió con una sonrisa alegre regresando su vista a la película, esta vez ya más tranquilo que cuando su madre lo tomó del hombro

— ¿Quién... Era ese niño? — Pensó

Por su mente pasó nuevamente la imagen de ese niño parecido a su hijo, con una mirada llena de excitación, al parecer disfrutando aquella escena sanguinaria acompañada de varios gritos desgarradores

— ¿Era mi hijo? — Se cuestionó con seriedad regresando su vista hacia su hijo

Karma seguía en la misma posición después de regresar a la normalidad, comiendo gomitas mientras veía la película, pero entre la oscuridad y la luz que daba la proyección, vio de nueva cuenta ese sonrojo que se adueñaba de las mejillas del infante

— Karma... ¿Qué tanto te he descuidado? —

~ • ~

La película ya había finalizado, por lo que ahora madre e hijo se encontraban saliendo del cine, pensando en un lugar para ir a comer en ese momento

— ¿Qué tal si vamos a las hamburguesas? — Propuso la mujer pelirroja con una sonrisa mientras veía a su hijo

— ¡Hai! ¡Hamburguesas! — Exclamó con alegría viendo a su madre

La pelirroja tomó a su hijo de la mano, comenzando a caminar a una hamburguesería cercana que conocía. Estaba segura que a su hijo le encantarían las hamburguesas del lugar, después de todo eran unas de las más reconocidas en esa ciudad

Tardaron unos 5 minutos en llegar, y al entrar se sentaron en una mesa cerca de los juegos que había para que los niños se entretuvieran

— Karma, ¿Qué te parece si vas a jugar en los juegos mientras que llega nuestra orden? — Propuso sonriente

— ¡Hai! — Exclamó con entusiasmo mientras se levantaba de su silla para ir a jugar

Karma, un niño que sin saberlo comenzó a ver las cosas de forma distinta a las demás personas, dejando de lado la moral establecida para crear y creer su propia moral