Capítulo 1 - Un día normal

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El Sol empezaba a mostrar sus primeros rayos de luz comenzando a elevarse, alejando toda oscuridad que la fría noche había dejado y alejando a la Luna hasta las próximas doce horas

Nos encontramos en un vecindario tranquilo en la ciudad de Tokio, donde lo único que se escuchaba eran los cantos de los pájaros y las alarmas de niños y adolescentes para despertarse y acudir a sus diferentes sitios de educación

Entre los niños que se despertaban, se incluía un niño pelirrojo de seis años de edad

Apagó su alarma tranquilamente, frotando después sus ojos para poder despertarse mejor y así ver mejor su entorno

Revisó su habitación con la mirada, viendo la oscuridad que la envolvía debido a la poca luz que entraba por las ventanas, que no era suficiente para iluminar la habitación

Se sentó en su cama, viendo sus pies que no alcanzaban a tocar el piso, para después dar un pequeño brinco para levantarse tocando suelo firme

Como siempre, prendió la luz de su habitación, revelando lo colorida de esta

El piso era de caoba con una alfombra roja al rededor de la cama y de una mesa de cristal frente a esta misma. Las paredes eran de un color rojo intenso con algunas hojas blancas con dibujos hechos por él mismo, también con cuadros donde se mostraban reconocimientos que se había ganado en el preescolar, primero de primaria y unos pocos meses de segundo

También tenía un baúl abierto al lado de la puerta de su clóset, y de lo que se podía ver de su contenido, eran juguetes, como dinosaurios de plástico, carritos, muñecos y demás

En la mesa de vidrio ya mencionada anteriormente, se encontraba un vaso también de vidrio en el centro con una rosa roja, mientras que en el espacio que quedaba había algunas hojas blancas y lápices de colores

Se acercó al clóset abriendo la puerta para después entrar, tomando su uniforme que estaba perfectamente colocado en unos estantes del fondo

Salió tranquilamente acercándose a su cama, donde colocó su uniforme, después se quitó su pijama y se cambió con dicho uniforme

Ya cambiado, fue a su escritorio en una de las esquinas de su habitación, ya que era una mesa que se adaptaba a las esquinas teniendo dos cajones abajo, teniendo estantes a los lados que también servían como soportes, finalizando con tres estanterías que al igual que la mesa, se adaptaban a las esquinas

Movió la silla giratoria que había, acercándose a su mochila que estaba sobre la mesa

Quitó y agregó algunos libros, sacando el dinero perfectamente escondido en un compartimento oculto, guardandolo en uno de los cajones que tenía la mesa, donde se podía observar más dinero, aproximadamente 600 dólares incluyendo el dinero que había guardado en ese momento

Ya casi será el cumpleaños de mamá, espero que me alcance el dinero — Pensó sonriendo ligeramente

Terminó por cerrar su mochila, la acomodó en uno de sus hombros y se acercó a la puerta que daba con el pasillo

Abrió la puerta lentamente para evitar hacer algún ruido, cerrandola de la misma manera una vez que estuvo afuera. Después caminó por los pasillos evitando los tablones que hicieran ruido, bajando después de unos dos minutos por las escaleras

Ya llegando a la primera planta, fue a la cocina prendiendo la luz de esa habitación

Dejó su mochila en el piso, abriendo el refrigerador comenzando a sacar algunas cosas, leche, cereal, lo esencial para un desayuno al menos decente, aunque también sacó arroz, zanahoria y otras cosas

Hasta regresar a mi hogarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora