El retorno de Ranpo

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Mori estaba sentado en su despacho. Oficialmente estaba trabajando, pensando en cómo recuperar la situación económica y el mismo nivel de empleados que antes del conflicto Cabeza de Dragón.

Extraoficialmente estaba planeando a dónde llevar a Elise de compras esa tarde.

De repente, la puerta se abrió bruscamente y entró un chico de cabello desordenado.

- ¿¡Has nombrado ejecutivo a Dazai sin mí!?

- Buenos días, Ranpo-kun, gracias por llamar tan educadamente a la puerta - Mori procuró que se le notase el sarcasmo en la voz.

- Venga ya, si ni estabas trabajando. Sé perfectamente que estabas haciendo planes para esta tarde con Elise. Está muy bien eso de evadir responsabilidades.

- Ranpo, te fuiste hace más de tres meses, no eres tú el mejor para reprocharme eso - le recordó Mori.

- Sí, tres meses, dos semanas, cuatro días, catorce horas, veintitrés minutos y seis segundos - puntualizó él -. Pero era por un buen motivo.

- Abandonaste a la organización en su momento de máxima crisis - le echó en cara Mori.

- No esperarías que me quedase en un conflicto que duró 88 días. Todas las tiendas de dulces cerraron.

- ¡Estaba a punto de decir que eras un traidor!

- Mentira, jamás habrías hecho eso, soy demasiado valioso para ti.

- Desde que te acogí ese día has sido un dolor de cabeza para mí - suspiró Mori.

- Me secuestraste, que es distinto, no lo romantices.

- Espero que al menos tu ausencia haya servido para algo.

- Claro que sí, ¿por quién me tomas? - la duda ofendía a Ranpo - He encontrado la forma de revivir a Yosano.

La cara de sorpresa de Mori le alegró el día a Ranpo.

- También he descubierto a la persona detrás del conflicto Cabeza de Dragón y unas cuantas amenazas para el futuro de Yokohama. Ah, y también que este mundo es una mentira.

Mori tragó saliva y respiró hondo.

- ¿Puedes ir por orden, Ranpo?

- Uno, hay un libro en el que lo que sea que escribas se hace realidad si tiene coherencia narrativa, usaré eso en cuanto lo tenga en mi poder. Dos, el responsable era un ruso, un tal Fyodor Dosty... Dosto... Dostoevsky, eso era. Ese lo provocó todo. Tres, va a volver en algún momento con más gente para conseguir el libro. Y cuatro, bueno, esto es más una teoría así que no quiero añadir nada más. No quiero terminar con mi fama de nunca equivocarme.

- ¿Entonces no tienes el libro? ¿Sabes al menos si es real?

- ¿Ves a Yosano viva? Lo primero que haría con él sería revivirla, el resto como que me da un poco igual. Pero sí, sé que es real porque el Gobierno tiene unas páginas en su poder. Y creo que sé como conseguir el resto del libro, aunque eso nos meterá en una guerra con muchas otras personas.

- ¿Por qué no me has puesto todo esto mejor explicado en un informe?

- ¿Desde cuándo hago yo informes? - Mori pensó que eso era cierto, normalmente siempre le cargaba el muerto a alguien - Pero no nos desviemos. ¿Cómo es que has nombrado ejecutivo a Dazai sin mi voto? ¿No necesitabas la aprobación de todos los ejecutivos para nombrar a uno nuevo?

- Los demás dijeron que sí y tú estabas desaparecido - sonrió el jefe -. Sé que Ozaki-kun habría preferido que nombrase a Chuuya pero no discutió mi criterio. En el fondo sabe que Dazai-kun es lo que necesita la organización en estos momentos. Por cierto, ¿cómo es que no me dijiste nada sobre el conflicto que se venía?

- Tú no mereces ni que te dé la hora siquiera - Mori arqueó la ceja levemente ante la vehemencia con la que lo dijo Ranpo - Se lo dije a Dazai y a su amigo en vez de a ti porque, seamos sinceros, tú sabías tan bien como yo lo que se venía.

- Puede ser.

- Bueno, me voy a felicitar a Dazai por el nombramiento. Ahí te quedas.

Mori le vio marcharse. Su primer pensamiento fue que Ranpo nunca cambiaría pero luego pensó que creía que sí había cambiado. Algo en sus ojos se veía diferente, como si estuviera determinado a hacer lo que tuviera que hacer para conseguir su objetivo.

Dazai estaba en su despacho mirando unos documentos con expresión vacía. Acababa de ser nombrado ejecutivo y, lo más importante, había sido nombrado ejecutivo ANTES que Chuuya. Sin embargo, no parecía feliz.

En realidad, casi nunca estaba feliz. Normalmente se limitaba a sentir una sensación de vacío en su interior. Una vez más, suspiró y se preguntó si habría algo en la vida que pudiera llenarle.

De repente, la puerta se abrió y Dazai agarró su pistola y la apuntó hacia la persona que se atrevía a interrumpirle.

- Ya dije que no quería que me molest... - lo que había empezado como una amenaza en un tono helador terminó con la frase a medio terminar.

- ¿De verdad vas a dispararme a mí, Dazai?

- ¡Ranpo-san! No, a ti no te disparo. Si fueras uno de mis subordinados la cosa cambiaría.

- Hombre, gracias es un honor. Felicidades por el ascenso para el cual mi opinión se la pasaron por el Arco del Triunfo.

- Al final solo es más responsabilidad  y haber tenido que escuchar el aburrido discurso de Mori - Dazai realizó una imitación bastante buena del jefe -: "El Conflicto Cabeza de Dragón ha sido el más sangriento en la historia de Yokohama. Tras muchos esfuerzos, la Port Mafia ha prevalecido y ha aplastado a todas las organizaciones rivales, aunque no hemos salido ilesos. En 88 días hemos perdido a cientos de integrantes, incluyendo a uno de nosotros, el ejecutivo conocido como Coronel. Ha llegado el momento de que alguien ocupe su lugar y no creo que haya nadie mejor que el hombre que ha conseguido nuestra victoria. Si todos estan de acuerdo, Dazai Osamu ocupará su lugar entre los cinco ejecutivos de la Port Mafia."

- Todos menos yo - remarcó Ranpo -. Y encima me has quitado el puesto del ejecutivo más joven de la historia de la Port Mafia, que lo sepas. También me da rabia que os hayan puesto un apodo muy chulo a Chuuya y a ti: soukoku, el doble negro.

- Ugh, yo no quiero nada que me relacione con ese enano.

- No te conformas con nada, ¿eh? Por cierto, ahora que eres ejecutivo necesitarás subordinados de confianza.

- En eso estaba pensando. Mira, tengo dos opciones - dijo tendiéndole dos carpetas a Ranpo - pero no sé a cuál elegir.

- Hum, un emo y un gato. ¿Por qué no te quedas a los dos?

- ¿No es suficiente con un adolescente traumatizado a cargo de otro adolescente traumatizado?

- A ver, en realidad yo no te dejaría a cargo de ninguno de los dos pero sus habilidades se podrían complementar de una manera excelente. Y si te echa una mano algún adulto responsable como Odasaku. Imagínate que se acostumbrasen a trabajar en equipo desde el primer momento. Podrían ser justo lo que necesitamos de cara a todo lo que se nos viene encima.

- Acabamos de salir de una crisis y se nos viene otra, luego me preguntan que por qué me quiero morir.

- Pero una cosa, Dazai.

- ¿Sí?

- Déjame ir a mí a por el gato. Siempre he querido adoptar un gato.

- ¿No secuestraste en el bar uno?

- Eso no cuenta, luego le dejé marcharse. Y no era un gato. Bueno, sí pero no.

- Entiendo - asintió Dazai -. Está bien. Yo iré a por el emo. Me da que se van a llevar como el perro y el gato.

- Ahí está la gracia - sonrió Ranpo.

Un mundo de monstruos (una historia de Bungō Stray Dogs)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora