TERCERA PARTE VOL. I
2022
Pedro
Febrero
Si hace unos meses me hubieran dicho que estaría número uno en España con una canción, probablemente diría que estaban locos. Que no era posible eso. Unos chavales de las islas estaban coronando, fue lo que Félix, mi manager, dijo cuando llegó el disco de oro. Seguía sin creerme que en mi habitación en las paredes ya no habían colgados pósters de películas o fotografías, sino un disco de oro encima del escritorio. A mi madre la paraban las señoras por la calle, felicitandome por el éxito. No era solo mío, decía mi madre siempre.
Miré la pantalla con atención, buscando el vuelo. Mis amigos también no hacían por las otras. Sergio, Juseph, Mimi y Noelia me acompañaban junto con Alejandro y Félix a Argentina. Grabaría con los más grandes, le dije a mi hermana menor cuando anuncié en casa que me iría un par de semanas al país de Latinoamerica.
Pasaríamos primero dos días en Nogoyá, donde grabaría 'Si Quieren Frontear' con Duki y De La Ghetto. Dos referentes para mi desde el principio. Seguía sin creerme cuando el argentino me envió la canción. Obviamente no dudé en querer unirme. Y para el videoclip sería grabado en Nogoyá. El pueblo de la novia de Mauro. Luego de esos dos días, estaríamos una semana en Buenos Aires. Grabando con nada más y nada menos que Bizarrap.
Encontré la puerta de embarque y fui a avisar a mis amigos. Caminamos arrastrando las maletas hacia allí. Iba con una maleta grande, que facturamos, y otra de mano. Viajábamos en un vuelo comercial, pero en primera clase. No quería ir en primera clase, pero Félix y mi hermana - que eran los que llevaban mi carrera profesional - insistieron en ir en esa línea del avión.
Subimos y yo me puse mis cascos y el típico cojin de viaje alrededor del cuello. Y al poco, caí muerto de sueño.
Llegamos a Buenos Aires a las cuatro de la tarde. Estábamos muertos de hambre, por lo que antes de poner rumbo a Nogoyá paramos en un restaurante cercano. La comida del avión no fue la mejor y apenas comí. Si le sumas con que dormí medio vuelo, todo mal.
Sentados todos en aquella mesa, esperando a la comida, comencé a darle vueltas a la cabeza.
¿Qué estaba haciendo allí?
Volé a la otra punta del mundo para hacer música. Se me había ido la olla, pensé. No sabía que hacía ahí. Porque lo hice siquiera. Un dolor en el pecho me invadió, haciendo que llevara mi mano hacia él. La respiración cada vez era más difícil y sentí que estaba a punto de ahogarme.
-Voy a fumar un momento - murmuré a Sergio, sentado a mi lado mirando el móvil. Dejó de mirarlo para dirigir su vista a mi -. Voy solo tranqui - mi amigo asintió y volvió a lo suyo.
Me levanté rápidamente en busca de la salida. No quería fumar, solo tratar de recuperar la respiración.
Tras poner un pie fuera, fui directo a sentarme en las escaleras de la entrada del restaurante, una muy clásica y con estilo. Saqué mi teléfono del bolsillo y cuando fui a teclear el contacto, pensé en llamarla a ella. Sabía perfectamente que con ella todo iría mejor. Siempre pasaba. Columbia fue mi lugar seguro. Un lugar al cual, en aquellos momentos, deseaba regresar. Y respirar. Pero no la llamé a ella, sino a Laux. Mi hermana menor.
Respondió al segundo tono.
-Pero si es mi hermano favorito - dijo la muy pelota, haciendo que sonriera. Justo lo que necesitaba.
-Soy tu único hermano melona - así llamaba a Laux de manera cariñosa. Eso o Laux, pero siemprevde todo menos Laura.
-¿Para qué llamaste? ¿Pasó algo en Argentina? - preguntó, dejando atrás la risa para pasar a un tono más serio.
-Creo que - hice una pausa, tratando de regular mi respiración - tengo un ataque de ansiedad.
No hubo respuesta inmediata. Cosa que me puso de los nervios. Más aún.
-¿Por qué no la has llamado? - preguntó.
Porque no quería que mi primera interacción con ella fuese contándole que estaba en la otra punta del planeta con un ataque de ansiedad.
-Miedo - confesé -. Puro miedo. Soy un cobarde - me dije por lo bajo, pero ella claramente lo oyó, para luego suspirar.
-No eres cobarde. Colu tenía sueños y tu también. Y a veces para cumplir esos sueños uno debe sacrificar sus bienes más preciados. Os habéis perdido el uno al otro por ambición. Pero puede volver.
Una lágrima cayó lentamente de mi ojo. No la limpié, porque enseguida cayeron más y más. Y fue imposible controlarlo. No podía controlar nada. Comenzaba a sentirme impotente. E inútil, ya que estaba llorando sentado en la puerta de un restaurante a miles de kilómetros de casa. De la isla.
-La echo de menos - confesé entre lágrimas.
-Ella a ti también - respondió Laux.
Ella tenía un novio en Nueva York y por lo que mi madre decía a pesar de todo parecía que vivía feliz en la gran manzana. Probablemente estaría teniendo una vida de ensueño. Una en la que yo no formaba parte.
-Sabes que no está bien mentir Laux.
Al cabo de los minutos terminé estando mucho más tranquilo. Encendí la cámara del teléfono para ver si mis ojos se veían llorosos. Por suerte, no sé notaba en absoluto.
Abrí su chat. Sin dudarlo.
Colu <3
Te echo de menos
Enviado a 18:03 p.m.
Eliminado a 18:04 p.m.
Regresé a la mesa junto con todos. Habían unas copas de vino ya servidas. Tomé la que me habían puesto y la alcé nada más sentarme junto a Sergio.
-Propongo un brindis - dije con una gran sonrisa -. Este verano, es pa' beber. Así que, grabemos aquí, volvamos a las islas y gocemos del verano porque nos lo hemos ganado a pulso.
-¡Chin chin! - dijo Mimi, feliz y con una gran sonrisa.
Todos chocamos nuestras copas con sonrisas. Y fingí que nada había pasado. Pero con una frase muy clara en mi mente. Ese verano sería un antes y un después. Lo presentía.
Columbia
Pedro D. Quevedo <3
Yo también te echo de menos
Por cierto, vuelvo a la isla en junioEnviados a 02:05 a.m.
Eliminados a 2:05 a.m.___
¿Os gustan los reencuentros? A mi personalmente me encantan.
Estamos a nada de presenciar uno✨️
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COLUMBIA | Quevedo
FanfictionColumbia quiere triunfar en el baile. Eso siempre lo ha tenido claro. Dejará atrás su isla, su familia y amigos. También a él. A Pedro, su mejor amigo prácticamente desde que nació. Pero su sueño está por encima de todo y todos. Y no parará hasta co...