Capítulo 80: Tres Días Después

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Unos tres días después, habían sucedido varias cosas. Ahora, dentro de una sala con algunas camillas pequeñas, estaban acostados sobre las mismas unos pequeños kongs, todos de diferentes especies. Aquellos niños kongs parecían estar en reposo luego del trágico evento ocurrido en ese lugar.

De pronto, uno de estos niños, quien era un orangután, comenzó a abrir los ojos con lentitud mientras parecía tratar de recuperar la noción del tiempo. Más tarde, este trató de levantarse, aún con una mirada perdida y frotándose la sien... no sin antes sujetarse la zona abdominal, donde al parecer, sintió un dolor punzante e insoportable que lo hizo emitir un ligero chillido. Cuando se observó a sí mismo, se percató de que tenía adherido una especie de pegatina blanca, la cual comenzó a retirársela.

—¡Oye, no te saques eso! —exclamó de repente otro de los niños, quien era un mono capuchino en la camilla de al lado—. Y qué bueno que ya despertaste.

—¿Qué? —expresó Jemky mirándolo con extrañeza mientras se volvía a dejar la "pegatina" en su lugar, no sin antes haberse visto lo que tenía debajo de esta—. ¡¿Q-qué es esto?! ¡¿Por qué... —agregó antes de emitir un chillido de dolor luego de tratar de levantarse.

—Cálmate, no te muevas tan brusco o te dolerá —replicó Rocky—. Es que tienes una herida. Nos enfrentamos a esos domadores mientras tratábamos de escapar con nuestros papás, ¿no lo recuerdas? Si no me equivoco, uno de ellos te disparó. Y según lo que les he escuchado a unas personas de bata blanca que andan por aquí: te sacaron los proyectiles y luego te cosieron las heridas, y por eso debes descansar como todos aquí.

Jemky le dio otra mirada de rareza por unos segundos. Luego, se volteó a observar el resto de la sala, en donde sobre otras camillas cercanas, se hallaban Mandrew, Melenky y también Diddy dormidos aún.

—Están dormidos todavía —comentó Rocky—. Pero según esas personas, no tardarán en despertar.

—¿Y tú no estuviste dormido también? —le preguntó Jemky.

—Sí, pero creo que solo por unas horas luego de esa masacre. Ese domador que tenía un parche en el ojo solo me disparó esas jeringas para dormir. Al resto de ustedes sí les dieron con proyectiles.

—¿Y nuestros papás dónde están?

—Ellos están descansando en otra sala de aquí; aún deben recuperarse. De hecho, tu padre también ya está despierto y solo debe recuperarse de unos golpes como yo; a él también solo le dispararon jeringas para dormir. Mi padre también ya ha despertado. Los otros aún continúan dormidos... Bueno, eso ha sido todo lo que me he enterado hasta ahora.

—Ah, ¿pero por cuánto tiempo debemos quedarnos a descans... ¡Ayyy! —emitió Jemky un chillido y se agarró del abdomen luego de tratar de bajarse de la camilla de un salto—. ¡Demonios, esto duele como una caldera! Ni cuando Dixie me disparó o me hayan dado una buena golpiza... Oye, y por cierto... si el mono también está aquí, ¿dónde está Dixie? —agregó señalando a Diddy y percatándose de cierta ausencia de Dixie.

—Eh, bueno... según lo que escuché: ella sí ha estado bien afectada. Creo que aún le están haciendo algún tipo de sanación, por eso no la han traído acá todavía. Ella también recibió solo de esas jeringas, pero... creo que fueron bastantes.

—Ah, entonces aún está sanándose —dijo Jemky mientras se bajaba de su camilla con cuidado, y luego empezó a subir a la Mandrew—. Ehh, oye, Mandrew... ¿estás despierto? —agregó agitándolo de los hombros.

—¡Oye, no lo muevas! —replicó Rocky—. Los señores de ropas blancas dijeron que no deben moverse así, o tendrán complicaciones.

—¿Y entonces por cuánto tiempo más estarán...

La Isla del Huracán [Diddy Kong x Dixie Kong]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora