Los dos gatitos de Luo

Capítulo 41. Humbert Humbert VIII

<La niña desaparecida se llama Qu Tong, de 11 años. Originalmente estaba en el autobús. Al tratar de ayudar a la profesora a distraer al delincuente, arrojó un dispositivo de alarma por la ventana y durante la conmoción, salió por la ventana y huyó. No sabemos qué dirección tomó.>

—Haz que traigan algunos perros de búsqueda del condado Xiling.— Al escuchar la noticia, la expresión de Luo Wenzhou se mantuvo tranquila. —Está bien, una niña no puede ir tan lejos. Busca a algunas personas para que hablen con los padres y los tranquilicen. Para ser honestos, si ella no hubiera huido en ese momento, el secuestrador habría descubierto que ella había activado el dispositivo de alarma; el resultado sería totalmente diferente. Me parece que la niña es bastante lista.

Fei Du giró la cabeza y silbó en dirección a sus escandalosos acompañantes. En esta sociedad de ociosos, él podía reunir a cientos con solo un llamado. Los niños ricos primero habían conducido motocicletas bajo la lluvia; luego, cuando el agua sobre ellos aún no se había secado por completo, participaron en una operación de rescate. A pesar de que solo habían sido piezas de utilería y ni siquiera habían visto la apariencia del secuestrador, seguía contando como estímulo suficiente para el resto del año. Al oír el llamado de Fei Du, se acercaron rápidamente. —Señor Fei, ¿qué sucede?

—Desde la Oficina Municipal.— Con solo unas palabras, Fei Du resumió hábilmente toda la gloriosa vida del hombre apuesto frente a él. Luego dijo, —Una niña de once años que iba en el autobús desapareció. Enviaré una fotografía al grupo en un rato. Si no tienen nada por hacer esta noche, ayuden a buscarla.

—¡Está bien, no hay problema!— Zhang Donglai por primera vez pudo estar de pie orgullosamente frente a Luo Wenzhou. —Hola, Capitán Luo. Si necesita algo, solo pídalo. ¡Todos somos familia!

Luo Wenzhou lo observó con frialdad. Había escuchado que después de toda la controversia, el Joven Maestro Zhang había estado confinado en una pequeña habitación oscura de su casa por un par de meses. Aquí y ahora, tal vez acababa de "ser liberado por cumplir su sentencia". Llevaba un chaleco que dejaba los brazos al descubierto y unos pantalones con un gran agujero a cada lado. Tenía un corte de cabello nuevo, en forma de cresta de gallo, con una línea de cabello largo de varios colores que resaltaba en la cima de su cabeza. En la parte posterior de su cabeza, un carácter había sido marcado.

Con curiosidad, Luo Wenzhou dijo, —¿Qué tienes en la cabeza?

Zhang Donglai respondió de inmediato, —Es el carácter de "resistir".

Inesperadamente, Luo Wenzhou sintió algo de veneración; resultaba que el comportamiento payaso del Joven Maestro Zhang era debido a su resistencia.

—Capitán Luo, no se preocupe, estoy familiarizado con este lugar,— dijo Zhang Donglai. —Los burgueses somos el gran contaminante de este lugar. Aparte de lo extravagante y corrupto, no hay ningún otro flagelo aquí. En cincuenta kilómetros a la redonda, lo más agresivo que hay es una pequeña ardilla. ¡Definitivamente no hay ningún peligro!

Eso en realidad era cierto. Para empezar, en esta era, Xiling era un lugar elitista y remoto, y la tormenta probablemente había hecho que el lugar estuviera aún más desolado. ¿Qué tan lejos podría correr una niña pequeña?

Al escuchar la noticia, nadie se agitó demasiado. Todo el trabajo se estaba haciendo metodológicamente. El desquiciado Han Chengzheng había sido sacado en una bolsa para cadáveres; una ambulancia se había llevado a la profesora Hu con heridas de gravedad y al secuestrador Han Jiang, quien aún respiraba. Los niños asustados se marcharon en grupo, acompañados por sus padres, para que los examinaran físicamente y que iniciaran consejería psicológica. Los perros de búsqueda fueron rápidamente puestos en posición.