cincuenta y siete

679 76 12
                                    


—Con que aquí estabas.

—Sarada, ¿por que te fuiste sola?

Abrimos la puerta de la torre en la que hablaríamos con Sasuke encontrando a su hija pegada a la pared, examine el área, una marca de Katana se hallaba al lado de la Uchiha.

—Supongo que nunca vas a perder la costumbre de intentar matar a la gente que quieres, Sasuke. —Bromeé.

—Perdona el retraso, Sasuke. —Se disculpó mi esposo.

—Naruto, Kiyomi ¿qué significa esto? ¿por que trajeron a las niñ...?—El pobre pareció sorprenderese cuando Chouchou coloco su mano sobre su cabeza, como habia hecho anteriormente con Naruto.

—Me gustaba la idea, pero creo que era más pesada.

—¿A que juegan?

—Es una especie de búsqueda, ella quería comprobar si tu eras su padre. —Le expliqué.

—Vine a... ¡Vine a verte! —Sarada llamo la atención de todos. —Cuando supe que Kiyomi-san y Nanadaime venían a verte, los seguí. —Tenia la mirada baja. —Por que quiero preguntarle algo.

—¿Preguntarme algo?

—Si, yo... —La pequeña poso sus ojos sobre Sasuke, parecía llena de miedo. —¿Mi mamá de verdad es mi mamá? —El silencio inundó la habitación por segundos. —¡Respondeme! ¿Es mi verdadera mamá?

—¿Qué pasó? —Se limitó a contestar, estuve a punto de clavarle un kunai.

—¿Que qué... ? —Preguntó la niña quien parecía llenarse de frustración. —¡Nunca estas en casa! ¡¿Por qué nunca estas con mi mamá?! ¿¡Tan poco te importo que hasta olvidaste mi cara?! ¿¡Quién es la chica con mis mismos lentes qué está a tu lado?! —Admiré la fotografía que Sarada mostraba, se trataba de "Taka" el grupo de Sasuke, junto a él se encontraban Suigetsu, Karin y Jugo. —¿¡Crees que le podía preguntar eso a mi mama?!

—Esa foto... —Naruto la observó con detenimiento.

—¿Tuvieron tiempo para tomarse una foto?

—Esto no me gusta nada. —Mencionó la morena aferrándose a la capa del Hokage.

—Mi mamá no me dice nada y tu nunca estás ¡Ningúno de ustedes confía en mi! ¡Todos son problemas! —Si voz se quebraba. —¡Incluso Kiyomi-san me ha informado más que ustedes! —Se detuvo un momento para tomar aire. —¿Dónde pasas el tiempo y qué haces?

—No es de tu incumbencia. —Mire a mi esposo, negó ante cualquier idea que pudiera tener ¿en serio no puedo tirarle un kunai a Sasuke?

Los ojos de la Uchiha se cristalizaron. —¡Esta bien! —Grito antes de salir de la torre.

—Oe...—Le llamo Naruto.

—Eres un pésimo padre, Sasuke. —Sentencie. —Iré a buscar a Sarada.

Salí detrás de ella hasta encontrarla.

—Sarada. —Coloqué mi mano sobre su hombro. —Te contaré algo, tu papá es alguien muy fuerte, si. —Sus pupilas se fijaron en mi. —Pero también es un idiota sin tacto, no es de mi incumbencia contarte ¿sabes? Pero ese idiota de allá adentro simplemente intenta no darte una vida como lo fue la suya. —Suspire cuando ella se levantó e intento irse, tome su muñeca para evitarlo. —Espera, Sarada.

—¡Aléjese! Si no me van a contar la verdad, buscaré a la chica de lentes y se lo preguntaré a ella. —Aviso.

—Intenta hablar con tu padre de nuevo. Quizás... —Me interrumpi a mi misma cuando una especie de cuchillas se dirigieron a nosotras. Active mi mangekyo sharingan para protegernos con el brazo del susanoo. Sin embargo otra vez llovieron aquellos objetos filosos y con pesadez se hizo presente el torno de mi armadura espíritual. Abracé el cuerpo de la pequeña. —Encarguense de esto, Naruto, Sasuke.

𝐑𝐔𝐁𝐈𝐎.- Uzumaki NarutoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora