SIN ETIQUETAS

CAPÍTULO 30

ONA

La entrega de premios termina y, después de que Lea salude a algunos de los invitados y atienda a la prensa, ponemos rumbo a nuestro apartamento. Esta vez soy yo la que conduce, mientras Lea enreda con su móvil, supongo que editando alguna foto o viendo las que le hayan mandado. Llegamos al garaje y, según nos bajamos del coche, me acerco a Lea, coloco mis manos en sus mejillas y la beso como llevo toda la noche deseando hacerlo. Entre besos y caricias conseguimos llegar a la habitación. Nuestra ropa no tardo en adornar el suelo mientras que nuestros cuerpos ansiaban ser tocados por la otra. Mi piel parece arder a su contacto, las sábanas son testigos de nuestra pasión y estoy segura de que si nuestra cama hablara se convertiría en profesora de sexo y anatomía. En cierto punto de la noche perdemos la noción del tiempo, solo existimos nosotras, el resto se ha desvanecido.

No sé cuando caemos en los brazos de Morfeo, pero ahora mismo una llamada entrante al teléfono de Lea nos ha sacado de las sábanas. Mientras mi chica contesta el teléfono yo decido ir al baño y darme una ducha, porque después de la noche de ayer es más que necesario.

Cuando estoy lavándome el pelo siento como tras de mí la mampara de la ducha se abre, y a los pocos segundos siento el cuerpo de Lea pegado a mi espalda.

- Buenos días- dice dejando un beso en mi hombro.

- Buenos días, love. ¿Todo en orden? – pregunto girándome en sus brazos y alzando ligeramente mi cabeza ya que ella es más alta que yo.

- Sí, tranquila, era Olga, me quieren mañana por la noche de invitada en el programa ese de entrevistas que ve media España, por lo visto el invitado de hoy ha cancelado en último momento y soy el segundo plato.

- ¿Y quieres ir? – empiezo a jabonar su cuerpo mientras espero su respuesta.

- A ver, querer lo que se dice querer no, pero reconozco que es una plataforma muy importante y, contando que ahora no estoy sacando música ni haciendo conciertos... No sé, es una buena oportunidad para hacer ver a mis fans que sigo ahí.

Lea coge el cabezal de la ducha y procede a aclarar mi pelo sin decir absolutamente nada más, pero su cara demuestra que su cabeza está trabajando a mil por hora.

- Ey, ¿Qué anda rondando por esa cabecita tuya?

- Pues que últimamente parezco ser siempre el segundo plato, primero el otro día con los del himno en tu debut, y ahora esto. Parece que la gente solo se acuerda de mí cuando les falla la primera opción. Y sé que es absurdo decir esto cuando ayer he ganado uno de los premios más importantes de la industria musical pero...- las lágrimas la impiden seguir hablando.

- Tranquila- digo abrazándola- estoy aquí, dejar salir todo lo que tengas dentro.

Después de unos minutos, cuando se tranquiliza un poco, terminamos de ducharnos y salimos envueltas en un par de toallas. El resto del día lo pasamos tranquilas en casa, aprovechando para ver alguna peli tumbadas en el sofá, con Lea recostada entre mis piernas.

El lunes amanecemos con mejor humor, desayunamos algo rápido y nos vamos directas al club para los primeros entrenamientos de la semana. Cuando llegamos todas las chicas corren a felicitar a Lea por su premio, cosa que muchas ya habían hecho por sus redes sociales. Además, ya se ha hecho público que esta noche Lea saldrá en la tele y todas le dicen lo orgullosas que están de ella y de todo lo que está consiguiendo.

Nosotras, las jugadoras, tenemos doble sesión de entrenamiento, pero Lea junto con el equipo de fotógrafos solo trabajan medio día, ya que no hay ningún evento muy relevante cerca, y el club no quiere atosigarnos todo el día con las cámaras. Al final decidimos que, cuando termine el entrenamiento, todas iremos a casa de la capitana para cenar en equipo mientras vemos la entrevista de mi chica.

Después de salir del vestuario, como no tengo coche, porque se lo llevo Lea al medio día, voy con Alexia al supermercado a comprar las cosas para la cena antes de ir a su casa.

- Tierra llamando a Ona- dice Alexia cuando apaga el coche y ve que no hago ni un solo movimiento por desatarme el cinturón y bajar del vehículo.

- Perdón, estaba perdida en mi cabeza.

- Y ¿puede saberse que te tiene tan absorta?

- Es Lea.

- Cómo, no, debí suponerlo- dice mi capitana.

- Es que sé que no está cien por ciento cómoda con la entrevista, y además tengo un mal presentimiento. Déjalo, creo que estoy empezando a enloquecer.

- No estas loca Ona, y sabes que pase lo que pase nos tendrás a todas a tu lado.

- Gracias Ale, de verdad, por todo. No sé que hubiera sido de mí en el mundial sin ti a mi lado.

- Para eso estamos nena, ahora vamos a comprar que tenemos a todo un equipo que alimentar. Y no se a ti, pero a mi una Mapi con hambre me da miedo- dice para romper un poco la tensión en el ambiente.

Alexia es la mejor dentro y fuera del campo, de eso no tengo la menor duda, es como mi hermana mayor, siempre parece saber qué decir o hacer. Terminamos de comprar lo que necesitábamos y vamos directas a la casa que comparte con su novia, quien por cierto está acompañando esta noche a Lea. Ambas han quedado que en cuanto termine la entrevista se vienen directas para la casa de la capitana.

Entre todas, como buen equipo que somos, conseguimos hacer la cena y poner la mesa en tiempo récord, para sentarnos a cenar justo cuando va a empezar el programa.

- Chicas callar, que empieza- grita Mapi antes de sentarse junto a Ingrid.

A todo esto, hemos tenido que poner los subtítulos en la tele en inglés para que, como dice Torrejón, el team guiri se pueda enterar de lo que pasa. 

N/A: Capítulo corto, pero también lo será la espera, mañana tendréis los próximos capítulos. Besos y nos leemos en comentarios.