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CAPÍTULO 43

N/A: Buenas, buenas... por aquí os dejo el nuevo capítulo en el que veréis por fin cuál era el regalo especial  que Ona le hizo a Lea el día de Navidad, espero que lo disfrutéis y que le deis mucho amor. Como siempre os leo en comentarios y os mando muchos besos!!!!

LEA

- Ona, ¿es enserio? – pregunto sin terminar de creer lo que estoy viendo.

- Lea Martínez, desde que nos conocimos no ha habido ni un solo día en el que no haya pensado en ti. Eres el motor que impulsa mi vida, siempre los has sido, daba igual que estuviéramos a miles de kilómetros de distancia, pensar en ti era lo que me hacia se mejor cada día, dentro y fuera del campo. Hemos crecido juntas, y aunque hace relativamente poco tiempo que me lo reconocí a mi misma, siempre te he querido, siempre has sido tú, love, y me encantaría haber dado el paso de confesarte mis sentimientos mucho antes, porque podríamos haber creado miles de recuerdos más, pero precisamente por eso me he propuesto no perder más el tiempo, quiero pasar contigo el resto de mi vida, quiero seguir creciendo a tu lado, derribando muros juntas, luchando por un futuro más justo y amable, porque la vida debe empezar a ser mejor contigo, porque cada vez que me llamas pecas el corazón se me acelera, porque cuando te tengo al lado nada más importe, porque cada vez que me besas es como si explotarán fuegos artificiales en mi interior, por eso y por mil cosas más que en este momento no se me ocurre, te quiero preguntar una cosa. Love- dice bajándose del sofá para arrodillarse en el suelo- ¿quieres casarte conmigo?

No me puedo creer que esto me este pasando justo en este preciso momento, era lo que menos me esperaba, pero no puedo estar más feliz. Las lágrimas empiezan a rodar por mis mejillas, y una sonrisa inmensa adorna mi rostro antes de empezar a asentir frenéticamente con la cabeza.

- Por su puesto que me quiero casar contigo, pecas. Nada me gustaría más en el mundo- confieso antes de arrodillarme frente a ella y besarla como si no hubiera un mañana- Te quiero, te quiero, te quiero- digo cuando nos separamos.

- Eres lo mejor que me ha pasado en la vida Lea. Te quiero- confiesa antes de volver a besarme con la misma intensidad que lo había hecho yo hace apenas un minuto.

Cuando nos separamos, nos volvemos a sentar en el sofá y Ona enseguida toma la pequeña caja de terciopelo rojo entre sus manos para, con mucho cuidado, sacar el anillo para colocarlo en mi dedo.

- Me queda perfecto, ¿cómo has acertado la talla? – pregunto sorprendida de que le haya atinado a la medida.

- Pues porque me lleve uno de tus anillos para asegurarme de comprarlo bien- confiesa rascándose la nuca un poco nerviosa.

Yo me río y me acerco a ella tomando su rostro entre mis manos para volver a besarla.

- Eres la mejor, pecas, ¿no sé qué haría sin ti?

- No exageres, yo si que no sabría qué hacer sin ti- dice abrazándome y tirándonos a las dos sobre el sofá.

En ese momento Dama salta sobre mi regazo para unirse a nuestro pequeño momento, y empieza a ladrar y a lamernos la cara como si fuera consciente de lo que acaba de pasar y hubiera entendido lo que estábamos hablando.

- Ey, que tus mamis se van a casar- le dice una mientras le rasca la barriga como sabe que le gusta.

- Madre mía, que nos vamos a casar- digo feliz y emocionada- todavía no me lo creo.