cap 33

286 27 1
                                    

Cuando fuimos a grabar la película, Jennie me mostró aquellos sexy vestuarios que iba usar atravidos y pequeños,
- te gustan -; para nada, ella se veía hermosa con todo lo que usaba, pero solo podía atreverme a decir
- sí -
- te amo - apretó mi cuello y me estampó un beso en la boca, q
- Debo estar a las tres de la tarde en la tienda, no estaré mucho tiempo - nuestras profesiones iniciando a dividirnos de la forma más cautelosa y lenta.
- tranquila, mamá estará aquí - se empieza a poner alguno de los vestidos mientras yo la observo.
En ese la puerta se abrió, las personas encargadas de los vestuarios llegaron a su camerino para ayudarle con el corcet,
Eso significaba que ahora solo podía actuar como su mejor amiga.
Aún yo no había conocido a los actores en ése momento, estaba nerviosa por qué alguno fuese demasiado atractivo o también fuese demasiado bueno, igual a Esteban.

Mi competencia ahora no eran los actores, era mismo Director un hombre joven de tan solo veinti tres años, de un cabello risado ojos azules, una barbilla marcada y un gran sentido del humor, además de amable.
- Él es Joe Pitt, Director de la película - cuando lo ví junto a los guionistas , frente a mi con su estúpida sonrisa la piel se me puso de gallina porque esté, cuando vió a jennie junto a mi hizo la misma mirada que yo, pero adiferencia de Esteban todo ese encanto era una simple Máscara.
Apezar dé ésas señales de alerta no tomé precauciones, Joe, la película mi trabajo nuevo se convertirían en escalones que poco a poco me empujen a dejarla.
- bueno, creo que debo irme ya, has un gran trabajo - .

No tengo nada de que lamentarme, después de aquellos nervios que me dieron a ver a Joe no sentí nada más, así que sólo me fui pague a una de las sirvientas de jisoo por cuidar de ella, entonces empecé a hacerme cargo con la mente puesta en Jennie, respecto a mi pequeño negocio en ése momento estaba bien no era el gran negocio pero si era bien,

Eran mis inicios no había mucho que decir, pero si había mucho porque competir, ya que frente a mi también había una mujer vendiendo vestidos, que puso su mirada en mi tienda, además de que cada vez que llegaba se entraba, la odiaba sin saber su nombre era una pequeña mosquita muerta que iba a darme Muchos problemas.
Creo que sí ella no hubiera estado hay las cosas horribles que pasaron después no me hubieran ocurrido.

la musa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora