cap 8

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Narrador
Las cámaras iluminaban el lugar, Jennie estaba nerviosa, apretaba fuertemente sus manos mientras no dejaba de sonreír. Escuchando el sonido de los flashes y también a Miles de personas preguntándose:
—¿Quien es ella? —.
—¿Quien es Jennie Ruby? —.
Quien era la joven que tenía un hermoso vestido rojo que la hacia resaltar su cuerpo y su piel, combinando con su personaje.
—¡ Jennie! —.
—¡Jennie! — Jennie Ruby de mi deseo la perla de mi tristeza y el diamante de mi beso lleva a la fosa misma un pétalo de mi cuerpo, manos que sois la vida, manos que sois ensueño. Delmira Agustini
Ese poema resopló en mi cabeza cuando la ví atráves de la pantalla para él estreno de la película que la llevaría a la fama, se notaba que estaba nerviosa pero eso no opacaba lo hermosa que se veía, la cámara se concentró con ella cuando inclinó su rostro y en unos segundos la vió de cerca.
Aunque todo era a blanco y negro, mis ojos podían verla entre el rojo del vestido y la alfombra, ella combinando con esos colores, si el diamante Rubi fuera una persona sin duda sería Jennie.
—Pero que hermosa es nuestra joven adolescente, en su rostro se ve que es una Lolita— escucho al estúpido locutor del programa que no paraba de recalcar la belleza de jennie con inmoralidad.
—Después del estrenó de la película Lolita en cines, a enloquecido a muchos adultos— ¿de que tenían que enloquecer los adultos? estaban viendo a una niña coquetear con un adulto desde su punto de vista, ¡el escritor lo explico!. Debieron hablar sobre lo increíble y perverso que es la mente de un pedófilo. Pero en vez de eso todos veían una sexy adolescente de catorce años.
—Sin duda, es un exquisito bombón si fuera adolescente haría lo que fuera por estar con ella— pocas veces alagaban su actuación, la cuál fue estupenda, pero siempre hablaban de lo sexy que se veía, sin las palabras correctas.
Las que yo uso, diamante, tesoro, rosa convertida en persona. No pude soportar a ésos hombres, así que apague el televisor me recosté en mi cama con la mirada hacia arriba y mi mano posada en mi frente, pensando en Jennie, no había visto aún la película porque apenas era su estrenó tampoco me interesaba hacerlo.
Hasta ese momento.
—Lili— Jennie llamó a mi puerta, aún tenía puesto el vestido y una hermosa sonrisa en sus labios rosados, lo que pronto serían mi perdición.
—Lo viste, ¡Todos gritaban mi nombre!. Estaba nerviosa, solo se me ocurrió sonreír— se sentó en mi cama para quitarse los tacones.
—¿Tu madre?— me senté a su lado.
—Está igual de felíz, ya está aceptando otros proyectos para mí, todo está siendo un éxito— dijo bajo, pero su emoción no era la misma.
Jennie quería hacer esto con su madre contarle cómo se sintió, cosas sencillas, pero su madre empezó a buscar más trabajo para ella, cómo de costumbre fue ignorada, eso me hizo dar cuenta de que yo era especial para Jennie, lo iba a ser toda su vida, pero seguiría los pasos de su madre después.
—Que bien por tí, me hubiera gustado estar ahí en el estreno y ver tu ecena—.
—Pronto lo harás, en mis próximas películas tu y yo estaremos en primera fila—.
Ya sabía para ese momento que ella me gustaba, pero hasta sierto punto, no sabía si era una ilusión o un sentimiento eterno.
Aunque sí quería estar en ésos momentos con ella para después cuidarla y descubrir cuánto la amaba, mientras Jennie reía contando toda su experiencia yo la veía atentamente como cuando escuchaba a la hermana enseñandome a cocer.
—“Inserta la aguja de adentro hacia afuera y tira de ella a través hasta que captures el nudo”—.
—“Inserta la aguja en el lado opuesto de la abertura directamente al otro lado del nudo y traerlo de vuelta a través de aproximadamente un octavo de pulgada de largo”—.
—“EN EL MISMO LADO”—.
Eran cosas diferentes que terminaron igual, me dieron el mismo asombro.
—¿Puedo dormir contigo? — me dijo de pronto.
—eh—.
—Siempre e querido dormir abrazada con alguien ¿puedo?, además no parare de hablar— confesó.
Ésa noche fue las más hermosa de las dos.
—Claro— Jennie quería que yo supiera todo los detalles y yo quería escucharla hasta tener que soñar con su voz.

—Claro— Jennie quería que yo supiera todo los detalles y yo quería escucharla hasta tener que soñar con su voz

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