With you Ω KM.

Capítulo 55.

El juicio más polémico y controversial de todos los tiempos para Corea, finalmente había acabado.

No solo habían caído políticos, sino que también empresarios de renombre. Y las condenas variaban para todos ellos, pero ninguna bajaba de los ochenta años que pasarían tras las rejas, además de ejercer servicio comunitario dentro y fuera de prisión.

Jimin no había estado pendiente del juicio, por más televisado que haya sido, y no porque no le interesara, porque lo hacía, pero el hecho de ver sus caras tranquilas, llevando sus mejores trajes en cada judicio, respondiendo con voz plana y sin una pizca de remordimiento, sólo provocaba en él furia y tristeza.

—El dinero no sirve de consuelo —comentó Jimin con un poco de molestia, sin apartar sus ojos de la pantalla de su teléfono.

Con Jongsuk finalmente como el nuevo presidente, muchas cosas prometían cambiar.

En su primer discurso, luego de la ceremonia que se había preparado y de dar todos los agradecimientos correspondientes, anunció el depósito que se le realizaría a todos los afectados en la fábrica. Era una generosa indemnización para todos aquellos que sufrieron sin razón alguna por seres crueles y despiadados.

—Lo sé. Yo los hubiera agarrado a todos y los hubiera matado muy lentamente.

La indemnización también correspondería a las familias de aquellos que habían perdido la vida en la fábrica, mientras trataban de huir, así también para los que todavía seguían desaparecidos.

—Mmh... —tarareó Jimin, dejando el teléfono sobre la mesita de noche para volver a acomodarse en la cama. La cantidad de dinero que le acababan de depositar era suficiente como para comprarse una linda casa de dos pisos y un auto con modelo año— ¿Crees que se arrepienten?

Jungkook lo miró, con su ceño ligeramente fruncido. Era tarde ya, y ellos estaban acurrucados en la cama mientras el televisor proyectaba una película.

Jimin alzó su rostro para encontrarse con su mirada.

Jungkook reprimió una mueca de disgusto, sintiendo a través del vínculo todas las emociones negativas que le provocaba a su omega cada vez que mencionaba y recordaba lo ocurrido. En cambio, le acarició el cabello, liberando suaves feromonas para envolverlo en ellas, enviando a través del vínculo paz y amor.

—No —afirmó con seguridad, viendo como las cejas de su omega se arqueaban angustiosamente— Es una mierda, cariño, pero la gente poderosa no se arrepiente por destruir a los más débiles, sino por ser descubiertos. El mundo es cruel e injusto.

Jimin apretó los labios, conteniendo las ganas de decir alguna cosa, y se volvió a acurrucar entre los brazos de su alfa. Jungkook lo abrazó y besó sus cabellos.

Estuvieron un buen rato en silencio, supuestamente viendo la película que Jimin había elegido al azar, cuando en realidad ninguno de los dos estaba realmente pendiente de ella.

—Jungkook... —Jimin murmuró.

—¿Mhm?

—Mi papá... mi papá también era omega.

Era la primera vez que Jimin le hablaba de su padre omega, y aunque él algo sabía ya que en un inicio lo había mandado a investigar, jamás preguntó ni presionó para que su omega le contara su historia. Le dio tiempo, para que confiara en él y se abriera, para que le contara sus secretos y todo aquello que entristecía su alma, así él buscaría la manera de ayudarlo a sanar y a superar cualquier cosa juntos.

—Lo sé —admitió, sin intenciones de negar lo que ya sabía.

Jimin frunció suavemente el ceño, un poco sorprendido porque su alfa tenía conocimiento de aquello, pero luego sonrió ligeramente, sabiendo que Jungkook en sus inicios era un verdadero acosador.