CAP 02-. PERFECTO, ES SOLO FACHADA

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CAPÍTULO 02-. PERFECTO, ES SOLO FACHADA

Hiro era un hombre de facciones perfectas, él había nacido con una belleza innata. Hombres y mujeres se giraban al verlo, pero aunque era hermoso socialmente era un desastre. Era incapaz de mantener una conversación sin tartamudear o ponerse nervioso. Sus traumas infantiles le impedían comunicarse y entablar relaciones fácilmente. Desde pequeño sufrió acoso por su aspecto y por ser de descendencia japonesa. Su padre era de Kioto y su madre de Nagasaki. Pero ambas familias habían vivido en Tailandia desde la época de la invasión. Aunque esto había pasado antes de que él naciera siempre sintió el odio y la discriminación por su origen. Aunque su familia fuera humilde y no tuviera nada que ver con la guerra en su pequeño pueblo siempre fueron tratados con frialdad. Constantemente fue menospreciado desde edad temprana. Será que por eso y por la rígida educación de su padre, lo había hecho ser tan introvertido.

Una vez Hiro llegó al instituto no fue mucho mejor. Era fácilmente centro de las burlas, no destacaba en nada salvo los estudios. Aunque si pertenecía a un pequeño club de japonés, en el que practicaban caligrafía y a veces en tiro con arco tradicional japonés. Pero su club fue cerrado en su último año de instituto a Hiro parecía no importarle. Su vida seguía centrada en el estudio.

También fue en el instituto cuando Hiro se dio cuenta de su orientación sexual. Nunca vio a las chicas como potenciales parejas, no sentía atracción o interés por ellas. A diferencia de los niños, en especial un joven alto y guapo que era muy popular, pero mal estudiante. Ese último año el profesor al saber que ya no estaba en ningún club le pidió a Hiro que le ayudara dándole clases particulares.

Aunque Hiro ocultaba muy bien su orientación y sabía que ese chico le gustaba jugar tanto con chicas como con chicos nunca se confesó. Pero si creía notar extrañas señales que en secreto le daban esperanzas. Su idea era decirle sus sentimientos después de los exámenes. Pero un día antes de los exámenes Hiro llegó antes de lo que habían acordado al aula. Los apuntes que había preparado salieron volando por una corriente de aire cuando se agachó a recogerlos nunca pensó que escucharía lo que iba a oír.

JOVEN-. ¿Oí... Pi Tom no tienes clase con Hiro ahora...?

TOM-. Es temprano...

JOVEN-. ¿Por qué aceptaste que Hiro te diera clases... si tanto te desagrada?

TOM-. Porque ese estúpido profesor me obligó, si no lo hacía me expulsará por fumar...

JOVEN-. Hiro es tan raro, siempre está solo...

TOM-. Es repulsivo, pero si me porto bien con él y aparento ser dulce y amigable me hace trabajar mucho menos y me da sus apuntes. Que luego vendo para ganar algo de dinero... Anda dejemos de hablar de ese estúpido cuatro ojos y juguemos un poco.

Esa tarde Hiro siguió escondido escuchando como la pareja mantenía relaciones en la escuela. Después la joven se marchó acompañada de aquel chico y Hiro salió de su escondite para que minutos después no muy lejos se toparás con él.

TOM-. Ah... Hiro hoy viniste tarde, ya me iba.

HIRO-. Oh si perdona, se me hizo tarde hoy... No puedo darte clases... pero te traje mis apuntes, con ellos no creo que tengas problema si hoy no damos clase.

TOM-. Gracias amigo, qué haría yo sin ti...

HIRO-. Uhmm...

Después de eso Hiro se excusó con el profesor para no darle más clase, diciendo que no podía ya que debía centrarse para los exámenes de acceso a la universidad.
El verano antes de entrar a la facultad Hiro se preparó.

Tras acceder a su facultad soñada, su meta era tener todos los créditos posibles para terminar la carrera. En su segundo año ya era de los primeros de su promoción y finalizando ya la carrera ya tenía empleo como profesor adjunto de filología, con especialización en literatura tailandesa y japonesa.

Por fin espera empezar su vida como adulto, mudándose solo y abandonando por fin las alas de sus padres para volar el mismo por primera vez.

PADRE-. Hiro ven...

HIRO-. Si Papa...

PADRE-. Sabes que ya eres adulto... Estamos muy orgullosos de ti, sigue trabajando y busca una buena mujer que te acompañe en esta vida.

La madre acaricia suavemente la espalda de Hiro y sacude la cabeza en señal al joven, ya que ella siempre ha alentado a su hijo y conoce su secreto.

HIRO-. Papa quiero centrarme en mi carrera...

PADRE-. Está bien, está bien... ¿Entonces cuáles son tus planes?

HIRO-. Trabajaré dos años como profesor adjunto y mejoraré. Luego quiero viajar y vivir en Japón unos años dando clase y después no lo tengo pensado.

PADRE-. Hijo debería postular para profesor en alguna escuela, quién no querría a alguien de tú nivel como profesor...

MAMA-. Querido, déjalo aún tiene tiempo para decidir...

PADRE-. Pero la gente hablará...

MAMA-. Es joven, sólo déjalo vivir...

Hiro daba la espalda a su padre conteniendo su propio carácter. Siempre ha sido así, desde que tiene conciencia de su ser, siempre ha tenido que contenerse. Ser el hijo perfecto, el estudiante perfecto. Pero aun así para su padre no parece ser suficiente. Sin embargo su madre es la persona que mejor lo comprende. Aunque nunca lo hayan hablado claramente la mujer sabe el sufrimiento de su hijo, también sabe su orientación. No fue difícil darse cuenta de que Hiro no tenía los mismos intereses que otro joven, carecía de curiosidad hacia el sexo opuesto. Uno pensará que si es gay desde el nacimiento le interesarían las cosas de niñas, lo femenino, pero nunca fue así. La madre solo recuerda una vez cuando Hiro tenía 5 años llegó llorando del colegio diciendo que le habían dicho que solo a las niñas le pueden gustar los niños. La única reacción de Hiro fue llorar amargamente. En ese momento fue cuando su afable madre entendió que su hijo era especial. No deseó ser niña, no se comportó diferente, simplemente lloró ese día y jamás más dijo algo más.

Ahora Hiro se va a mudar y empezará su vida adulta realmente. Aunque mientras estudiaba compartió dormitorio en la universidad, nunca miró a un chico de manera distinta que a la de un compañero. Ahora por fin en la intimidad de su nuevo hogar podrá ser el mismo. Aunque no es muy distinto a lo que ya es.

HIRO-. Puerta 1023... Aquí es bienvenido a casa Kimura Hiro.

Abre la puerta de la vivienda, es un piso que ofrece la universidad a los profesores. El edificio no está muy lejos del complejo universitario y de su vieja residencia. Era como si nada hubiese cambiado de hace unos meses hasta ahora. Hiro sólo trae unas pocas cosas. Ya que el resto fue enviado días antes. Tan solo unas pocas cajas de libros y su bolsa de ropa es su equipaje.

Es tarde así que decide que colocará todo mañana y que se irá a dormir. Tiene tiempo ya que hasta pasado mañana no tiene que presentarse en la facultad. Ese día va a conocer a sus nuevos compañeros, que antes eran sus profesores. Su cuerpo cansado por el largo viaje desde el interior del país, cae sobre la cama durmiendo se casi inmediatamente.

AMOR EN FORMA DE KANJIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora