Mr. Caos

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La brisa fresca de la noche tocó su piel desnuda, frotaba sus brazos tratando de buscar calor pero era inútil, estaba en ropa interior esperando que aquel chico cumpliera su palabra.

"Nos vemos en el lago a media noche, espérame sin la molesta ropa"

Con su bella sonrisa, no pudo negarle nada al castaño de ojos avellana, rosados labios y de esbelta figura.

Se había enamorado a primera vista, como un tonto, observaba de lejos al chico más hermoso que había conocido en su corta vida.

Chris decía que él no era de fiar, pero sin previo aviso en la excursión de verano estarían compartiendo la cabaña durante una semana, Han Jisung el chico raro y Lee Minho el chico popular.

El primer día fue un desastre, Jisung se limitó a ignorar al castaño por el temor al rechazo, para el segundo día Minho se mostró amable, conversaron aún con las palabras torpes de Jisung, la suave risa de Minho calentaba el corazón triste del azabache.

Para el quinto día Minho beso su mejilla y Jisung juro que moriría en ese mismo instante, por la tarde el castaño tomó su mano y susurró en su oído dicha cita. Fue así como llegó al lago y aún con dudas decidió obedecer al castaño.

Él azabache tenía los nervios de punta y rogaba a todos los dioses que el chico apareciera.

Algunas ramas crujieron a lo lejos, con el corazón aliviado Jisung soltó un suspiro, se enderezó y una sonrisa tímida se formó en sus lindos labios.

-¡No puede ser! - La voz chillona de uno de sus compañeros se hizo presenté -Realmente ha venido.

Detrás de él tres chicos corrieron para ver a Jisung, la sonrisa en sus labios desapareció y trato de cubrirse con sus pequeñas manos, sin mucho éxito, era más delgado que cualquiera de sus compañeros, su estatura lo hacía ver aún más pequeño aunque tuviera 15 años.

-Min realmente te ha creído, te dije que era realmente patético - El chico de voz chillona que parecía ser el líder llamo al castaño.

Minho se abrió paso entre sus compañeros para ver al azabache, la luna iluminaba su piel nivea, aunque la mitad de su rostro estaba a oscuras pudo ver sus ojos cristalinos y su mirada llena de confusión.

Eun aprovechó el momento para abrazar por los hombros al castaño y mofarse de la incredulidad del azabache, sus subordinados comenzaron a sacar fotos y videos. Con movimientos torpes el azabache trato de levantar sus prendas e irse pero una pada llegó a su costado derecho que le hizo perder el equilibrio.

-¿A dónde crees que vas? - El líder se acercó y recogió la ropa- Apenas empieza la diversión.

El castaño observo como su compañero sujetaba el rostro del azabache, sus mejillas abultadas eran apretadas con tanta fuerza que se tornaron rojas, sus labios formaban un circulo. Estaban tan cerca que el asqueroso aliento de su agresor golpeo los sentidos del azabache.