Mr. Caos

«11»

Eran las 6:30 de la mañana cuando Jisung bajo a la cocina aún con su pijama de seda gris, calzando sus pantuflas azules, teniendo su cabello desordenado por la almohada, la cara lavada y su boca limpia.

Los rayos del sol entraron por la ventana iluminando la cocina mientras terminaba de preparar su café en la prensa francesa. Al tener la bebida lista entre sus manos tomó un sorbo disfrutando de su aroma agradable y sabor amargo.

A paso lento se dirigió hacia el sótano, a esa hora de la mañana Chris salía a correr por el vecindario, Hyunjin estaría durmiendo en una posición muy extraña y Changbin seguramente estaba en el gimnasio de la mansión.

Paz, había tanta paz esa mañana.

Abrió la puerta y comenzó a bajar con cuidado de no derramar su café, la madera desgastada de los escalones crujía a cada paso, el olor a humedad se mezclaba con el café recién hecho haciendo el ambiente más ameno. En el último escalón sus pantuflas se mancharon con un líquido que parecía ser aceite para auto, siguió caminando hasta llegar al interruptor, la lámpara que colgaba del techo iluminó una parte de la habitación.

Podía verse un estante pegado a la pared con diversas herramientas, desde martillos de diferentes formas hasta hachas grandes y pequeñas, a un lado del estante estaban dos barriles grandes de lámina de acero, del otro extremo habían un fregadero de dos llaves.

Justo frente al azabache, Eun permanecía boca abajo inconsciente, solo tenía la ropa interior puesta, su piel se encontraba manchada por la suciedad del lugar, los moretones relucían en cada rincón de su cuerpo.

Jisung tomó el control del sistema de carga, activándolo, el sonido mecánico resonó junto al de las cadenas siendo elevadas. El azabache tomó un sorbo de su bebida humeante mientras observaba como Kang se levantaba por las cadenas.

Kang comenzó a quejarse mientras se despertaba por la molestia en sus muñecas, aturdido pestañeo para enfocar su visión al hombre parado frente a él.

El dolor de sus extremidades siendo estiradas lo termino por despertar, Jisung sonrió al ver la expresión de dolor en el rostro del hombre, detuvo el sistema y apretó otro botón. Estaba tan alto que las manos de Eun podían tocar el techo.

El sonido de las cadenas cayendo al suelo amortiguó el chocante estruendo de la cara de Eun impactándose con el concreto.

—Lo siento— Han se inclinó para observar mejor — ¿Te dolió Eunnie? — Dijo en tono suave.

Eun alzó su rostro, su pómulo izquierdo estaba rojizo e hinchado, su nariz sangraba al igual que su boca, se había roto un diente frontal y sus labios estaban dañados por el golpe.

—Púdrete — Respondió con dificultad.

Han sonrió ampliamente al ver el aspecto desagradable del hombre.

—Que bueno que aún puedas hablar.

Kang apoyándose con las palmas de las manos elevó un poco su torso, miro a los ojos a Han y escupió sangre a sus pantuflas. El azabache se acercó y derramó el café caliente en Kang, haciendo que este apretará la mandíbula para no quejarse, al derramar todo en contenido aventó la taza al suelo haciéndola añicos.