ALEJANDRÍA, PRESENTE
Sin atreverse a acercarse, Crowley y el resto contemplan las ruinas completamente quemadas, esperando ver entre ellas algún movimiento.
La tierra comienza a temblar bajo sus pies. El cielo se "parte" sobre el punto más alto del terreno, inundando todo con una extraordinaria luz; como un meteorito, Raphael desciende hasta las ruinas, camina con desesperación hasta la Columna de Pompeyo y busca insistentemente con la mirada. Allí yace la copa, y más nada.
Sabe que Remiel ya no volverá a aparecer a su lado.
Las nubes y el suelo se sacuden con su dolor; el viento sopla con la fuerza de su rabia, y la luz se desvanece junto a su esperanza.
En una explosión de emociones, el Arcángel desaparece.
—¡CROWLEY! —Llega Aziraphale desde el sur—. ¡Crow...!
—¡¿Ángel?! ¡¿Qué haces...?!
—¡Por el Amor de Dios! ¡¿Estás bien?! —El ángel se prende del cuello del demonio.
—...Estoy bien.
—¡¿Qué acaba de pasar?!
—...Uh... Un dragón... atacó al Arcángel rubio... y lo destruyó, aparentemente...
—...¿Qué?
—...Sí; fue extraño... ¿Qué haces aquí, por cierto?
—Oh, claro. No podía quedarme sin hacer nada... mientras tú te arriesgabas, y... ¡Hey! ¡El Ángel! ¡Estaba aquí!
—¿Eh? Ah, sí... Desposeída, al parecer...
—¿Ahora qué?
—No lo sé.
—El propio Remiel frustró el Plan de los Arcángeles, al envenenarse a sí mismo con el contenido de la copa; pero aún quedan otras seis...
—...¿De dónde salió ese dragón?
—Quién sabe...
—...Lilit dijo que su madre tenía un dragón en el pecho —interviene Eva—. Tal vez era ella...
—...Lilith... Dijo que quería hacer las cosas a su manera... Bien pensado, querida...
"Querida". Aunque parezca una expresión bastante casual, para Eva se sintió como la primera palabra de afecto que ha recibido en su vida.
—Te veo diferente...
—...Ocurrieron algunas cosas... Tal vez sea el cabello...
—Sí, pero... también es algo más. Te noto un brillo especial... Aunque me gusta tu cabello así; más largo...
—¿Realmente te gusta?
—Me encantas. Eh... Me encanta... tu cabello...
Aziraphale se sonroja; casi tanto como Crowley.
—Vamos, par de tortolitos... Turiel tiene una idea de en dónde podrían lanzar la siguiente plaga...
—¿Qué le pasó a la puerta?
—Belcebú.
—No es mi culpa que la cosa esta sea una chatarra.
Aziraphale ve por el retrovisor a Furfur y su secuaz subir por la parte trasera de la van.
—¿Qué hacen ellos aquí?
—Buscando a Shax.
—¿Dónde está, por cierto? Creí que aparecería con su ejército desde el horizonte...
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𝑮𝒐𝒐𝒅 𝑶𝒎𝒆𝒏𝒔: "𝐿𝑎 𝑆𝑒𝑔𝑢𝑛𝑑𝑎 𝑉𝑒𝑛𝑖𝑑𝑎"
FanfictionEl final de la segunda temporada nos deja a la espera de otra amenaza que llega desde el Cielo: la Segunda Venida de Cristo. Aziraphale deberá decidir, definitivamente, a qué bando se unirá; mientras tanto, Crowley intenta sobrevivir a un corazón ro...