𝑮𝒐𝒐𝒅 𝑶𝒎𝒆𝒏𝒔: "𝐿𝑎 𝑆𝑒𝑔𝑢𝑛𝑑𝑎 𝑉𝑒𝑛𝑖𝑑𝑎"

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Como guía Polaris a los navegantes durante la noche, la paloma dirigió a Aziraphale y las niñas hacia el norte, atravesando media ciudad hasta Kilburn Park Road, donde se concentraba una multitud de adoradores de quien creían era su tan esperado salvador.

El ave sigue su vuelo hasta el centro del gentío; baja y, sin que aquella se dé cuenta, se fusiona al cuerpo de Samara.

El trío se abre paso entre las personas hasta encontrarse con el Ángel.

—...Oh, Dios...

—¡Sam!

—¡ESPERA! No. Esa de ahí ya no es Sam, querida... Es... Jesucristo...

—¿Estás loco? ¡Es Samara!

—¡Está poseída! ¿No ves el revuelo que está armando?

—...Pero...

—Sam es tu Ángel de la Guarda... Cree que así te está protegiendo... En realidad, está preparando al mundo para su final...

—¿Por qué no estamos haciendo nada para ayudarla?

—Athatriel y Daniel tienen que encontrarnos primero. Tal vez ellos sepan qué hacer.

—¿A dónde se lleva a toda esta gente?

—No tengo la menor idea.

—...Sam es la mejor persona que conozco... No creo que sepa lo que realmente está haciendo...

—...Sólo pensó en protegerte... Nunca cuestionó... ¿Lilit? ¡LILIT!

—...Qué criatura tan suicida... —Furfur y su secuaz observan escondidos entre la muchedumbre—. ¡¿Qué clase de demonio corre directamente al peligro de esa manera?! Un Ángel tan poderoso... puede destruir en segundos a un demonio como ella...

—Es mitad humana; seguramente no lo entiende...

—¡SAM! ¡Sam!

—...Te preocupas mucho por tu Ángel, ¿no es cierto? Eres una pequeña muy dulce... a pesar de ser mitad demonio...

La joven retrocede un paso, asustada.

—...No eres Sam, ¿verdad?

—No lo soy. Pero puedo ayudarte... Sería grandioso que te nos unieras, Lilit... Tu alma aún puede ser salvada... si tan sólo...

—¡Aléjese de esa niña! —Aziraphale corre y aleja a la pequeña, interponiéndose entre esta y el Ángel.

—Ah; Aziraphale... Sabía que estarías en algún lugar, intentando interferir con el Plan... Al final, siempre te vuelves una piedra en el zapato para el Cielo...

—...Es cierto que hemos tenido unas cuantas... desavenencias... estos últimos años...

—¿Dónde está tu lealtad, ángel?

—...Aquí, en la Tierra... Con todos sus habitantes...

—...Muy bien, entonces...

Jesús levanta su mano derecha hacia Aziraphale y, de un segundo a otro, lo transforma en un Samoyedo, blanco y esponjoso.

—¡AAAH!

—¡MIERDA! ¡Olvidé activar el bloqueador!

—¡Actívalo ahora!

Eva salta a la escena y arrastra a Lilit y al perro de regreso a la multitud, alejándolos lo más rápido que puede de ahí.

—¡AHORA! ¡AHORA!

¡BANG! ¡BANG! ¡BANG!

Las personas huyen al oír los disparos. Samara cae al suelo, al ser alcanzada por dos de las tres balas.

—No pudo haber sido tan fácil...

Furfur se acerca al Ángel y se agacha junto a ella, presionándole la garganta con el cañón del arma.

—...Supongo que no habrá Apocalipsis, después de todo... Nadie va a encerrarme en ese Infierno que es... el... Infierno... ¿Sabes lo que digo?

—...Aunque me maten, él... puede... puede volver... en otro... cuerpo... No lo van a... a detener...

—Eso ya lo veremos...

—...No... no quiero que... vuelva... No debí... hacerlo...

—Lástima...

—¡Oye, no seas tonto! Jesús ya no la está controlando... No tiene caso matarla... Y... nos puede servir la ayuda de un Ángel...

—...¿Crees que nos vaya a ayudar?

—Sólo piensa... ¿Cómo vas a aniquilar a Shax, que es un demonio, con balas de fuego infernal?

—...Buen punto... Quizás podamos hacer un trato...

Furfur sonríe grotescamente, sin dejar de apuntar a la mujer.