Capítulo 15

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Un Alpha se enamoró de un Vidente.

Estaba en un bosque. Son los bosques de Price, los conoce porque corrió muchas veces por ellos cuando estaba en la preparatoria. Estaba cerca del lago colmillo. Se dirigió a él y se encontró con una cabaña. Era bonita, de madera y de la chimenea salía humo. Era la cabaña de su abuela

La puerta de la cabaña fue abierta, Danny vestía solo un pantalón de una tela gruesa y botas para trabajo. Su dorso estaba descubierto, tenía un cuerpo joven y entrenado. La mirada de Danny fue al bosque de donde salió Nick, traía madera o, en mejores palabras, un árbol que convertiría en astas de madera.

—Pensé que te había perdido en el bosque—comentó Danny dándole una sonrisa a Nick, él soltó el árbol y se acercó al vidente, acorto el espacio entre sus cuerpos y lo besó, de una manera gentil.

—Perdona, me entretuve con los chicos—respondió tras separarse un poco de los labios del vidente. Nick lo miro de pies a cabeza— ¿por qué estás casi desnudo? —preguntó burlón.

—No te hagas ilusiones, lobito—respondió—solo estaba terminando con la chimenea.

— ¿Crees que fue buena idea mudarnos aquí?

Danny llevó la mirada a la cabaña por un momento.

—Por supuesto, es el regalo de bodas de mamá, además de que está al lado de un lago, no podía decir que no—respondió—y no tenemos cerca a nadie, así que no debemos preocuparnos por el ruido.

Nick rio y Danny nuevamente lo besó. Entendió que estaba en el momento en que la pareja se fue a vivir juntos, Danny tendría más de un cuarto de siglo para este momento.

— ¿Por qué no se ocurrió antes hacer algo así?

Al lado de Taddeo estaba una señora de mediana edad que lo tomó por sorpresa, ella miraba a la pareja que compartía mimos.

—Usted.

La mujer llevó sus ojos a Taddeo y le sonrió cálidamente.

—Hijo mío, es un gusto verte tan sano y fuerte—dijo la mujer—sin duda heredaste lo mejor de cada uno de tus padres.

Taddeo hizo espacio entre él y la mujer.

—No nos conocíamos, pero puedes llamarme madre—continuó la mujer—soy la madre que todo lo decide.

La información que su padre le había compartido también tenía información de algo a lo que había denominado seres superiores, entre ellos, la madre que todo lo decide.

—Eres la mujer que teje los destinos—Taddeo tomó aire y tomó una postura recta—es un placer conocerla.

La mujer que sonrió llevó la mirada nuevamente a la pareja. Nick estaba preparando el árbol y Danny había entrado nuevamente a la cabaña.

—Serás una criatura muy poderosa—murmuró la mujer, sin embargo, Taddeo logró escucharla—. Tienes una peculiar habilidad heredada de generaciones anteriores, que hace mucho no se veía.

Taddeo llevó la mirada a la cabaña.

—Madre, está usted aquí para eliminar esta línea—la mujer rio sutilmente.

—Es cierto que este tipo de líneas no deberían de existir sin que se mediase conmigo, previamente—la mujer caminó hasta la orilla del lago—pero sería una pena no explorar esta posibilidad. ¿No te parece?

Taddeo llegó a su lado. Ella miraba su reflejo en el agua.

—Dime, hijo—ella lo miró a través del reflejo—quieres en verdad conocer que sucedió en esta línea.

El de ojos Azules © #PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora