vendida a un mafioso (Tom Kaulitz)

capitulo 21 : a dormir

Desperté y sorprendentemente Tom seguía a mi lado agarrándome como si fuera un oso de peluche. Nunca habíamos despertado cara a cara, así que solo lo mire sin moverme, no quería despertarlo.

Lo miré durante varios minutos preguntándome inocentemente, ¿Como alguien tan lindo podía tener un corazón tan amargo?. Tom siempre me ha parecido muy atractivo pero todo desvanece cuando miro mi pierna. "Tk" una abreviación que me seguirá toda la vida.

-¿No te cansaras?.-Dijo con sus ojos aún cerrados y abrí mis ojos a su máximo. Este lentamente fue abriendo sus ojos.-Llevas 10 minutos mirándome.

-Claro que no, es que aun no despertabas y no queria molestarte. Dije negando todo y este me miro serio.

-No puedes mentirme, no es correcto.-Dijo con su mirada puesta en mi.-Sin embargo supongo no puedo hacer nada al respecto.-Dijo se acomodo un poco soltando mi cintura.

-¿Dormiste? -Dije y este me miro serio.

-Vi que tu igual, antes te costaba conciliar el sueño-Dijo levantandose de la cama al igual que yo rápidamente copie su acto.

-Si-Dije timida. Me miro y suspiro.

-Hoy debo trabajar por los días que me ausente pero tu haz la actividad que gustes.-Dijo y lo mire sorprendida.

-Ah entiendo. Lo haré.-Dije a lo que este solo asintió.-No haré problemas.-Asegure y este asintió.

-Nos vemos luego entonces.-Dijo y se acerco a darme un beso en la frente para luego retirarse.Me vesti y arregle para salir a ver como lograba recrearme. Recordé como solía ser mi recreación en mi país; estudiaba, salía con mi mejor amiga, compartía con mi familia y me gustaba mucho dar paseos al aire libre, algo que me gustaría hacer en este momento. Así que tuve una idea algo arriesgada pero mis buenos términos con tom y las reglas establecidas tendría a la suerte de mi lado. Fui a la biblioteca y tome algún libro nuevo para leer. Respire profundo y me acerque a su oficina hasta estar en la puerta de esta.

-Al jefe no le gusta lo molesten cuando trabaja.-Dijo el hombre que hacia guardia en su puerta.

-Soy su mujer si no sabes-Dije con poca amabilidad a lo que este solo se limitó a volver a acomodarse en su puerta e hice sonar esta.

-Entra.-Se escucho su voz decir. Abrí la puerta y lo vi concentrado en su computador.

-Hola. Dije caminando a el.

-¿Qué haces aquí?.-Dijo sin mirarme.

-Vine a pedirte permiso.-Dije y me miro atento.

-¿Para?.-Dijo intrigado

-Quiero salir al jardín. Dije inocente y él pensó un poco dando un suspiro.

-Bien, que solo sea unos unos 5 metros, NO más.-Aclaro.- haku irá contigo.-Dijo y asenti.

-Bien-Dije y me di la vuelta para salir de ahí.

Haku me acompañaba como una sombra a todos lados, asi que solo camine y espere me abrieran la puerta.¿A donde iras?. Dijo dudoso

-Afuera. Dije tranquila esperando este abriera.

-Debo hablar con el jefe. Dijo y lo mire seria.

-No hará falta, el sabe-Dije tranquila

-Debo decirle al jefe para luego cederle el permiso.-Dijo y lo mire ofendida.

-¿Para que crees fui a su oficina?.-Dije seria.-Yo ya le pregunte y me dijo que si, abrela.-Dije amenazante.

-Debo confirmar esa orden-Dijo y lo mire molesta.

-Soy su mujer y el unico permiso que debo pedir es el de el.-Dije disgustada.