Tu dulce presencia.

CAPITULO 38

Luego de quince minutos la mujer se levantó y camino hasta el baño, se dió una ducha y se coloco ropa para ir al trabajo, seguido el hombre imitó su acción pero el optó por algo casual ya que no iría más a la empresa aquel día, sin embargo al ver que a la mujer ya se estaba haciendo tarde la llevaría hasta la escuela, ambos bajaron y fueron hasta el estacionamiento, subieron al auto y comenzaron la marcha.

- Porque llegaste más temprano de lo esperado- inquiere la mujer mientras salen del estacionamiento.

- Realmente no logré llegar a reunión, la secretaria de mi padre me llamo para informarme que tuvieron problemas con la salida del jet debido al clima y pospusieron todo para la semana que viene- confiesa mientras la observa. - Sin embargo el día estaba a mi favor- anuncia con picardía.

- No me recuerdes eso- reprocha con picardía la mujer.

- Quisiera saber en qué momento desapareció la dulce e inocente Rin- inquiere con sorna el mayor.

- Cuando tú la corrompiste- asegura la castaña.

El hombre le dedicó una suave sonrisa para así continuar en silencio.

- Con respecto a tu propuesta de ayer, no sé si sea el momento de traerlo a colación... Pero creo que sí me gustaría intentarlo- confiesa la mujer haciendo referencia a la propuesta de vivir juntos.

- Creí que pensabas que era demasiado pronto...- le recuerda el Taisho.

- Pues cambié de opinión- asegura la menor.

En aquel momento el hombre aprovecho que habían frenado en un semáforo para así depositar un beso es la mejilla de su novia.

- Tus padres no se enojaran- inquiere el albino.

- No lo creo, ellos siempre han respetado mis decisiones- asegura la castaña.

- Entonces que te parece si paso por ti a la salida, hablamos con tu padres y recogemos tus cosas- sugiere con un sonrisa.

- Hagámoslo- responde la joven mientras se encoge de hombros.

Luego de aquella conversación se mantuvieron en silencio, no sabian de que más platicar sin embargo cada uno ya había ocupado su mente en otra cosa como para notarlo, mientras que el peliplata estaba pensando que decirle a los padres de su novia, la castaña estaba tratando de imaginar la reacción de su hermano, sin embargo nada de lo que imaginaba le parecía tan trágico como la actitud del pelinegro, cosa que le hizo replantearse si la actitud de su hermano era tan dramática como ella pensaba o si solo había estigmatizado sus sobreprotección hacia ella; evadió esos pensamientos cuando vio que solo quedaba una cuadra antes de llegar a la escuela así que tomo sus cosas del asiento trasero y las coloco en sus piernas, una vez el hombre aparco frente a la institución la mujer se giró y deposita un corto beso en los labios de el, y acompañada de un te amo dicho por el albino se bajó de la camioneta para caminar hasta la entrada, le parecía irreal todo lo que habia pasado en tan pocas horas, sin embargo aquel había Sido el detonante para tomar la decisión de vivir con su novio, algunos podrían pensar que es apresurado sin embargo luego de todo lo vivido juntos para ella su felicidad estaba junto al albino y los que aún se oponían debían aceptarlo.
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Una vez terminaron las clases tal y como el albino lo había propuesto, estaba afuera esperándola para así ir juntos hasta al casa de los padres de la castaña; al ingresar Akane lo recibió con efusión mientras que Sosuke a pesar de que no tenía na en contra del hombre se mantuvo en una postura serena, lo saludo y charlaron un poco... Sin embargo cuando Rin anuncio el verdadero motivo por el cual estaban ahí  el hombre mayor sintió que podía morir ahí mismo, son embargo sus esposa le dedicó un mala mirada y aún en contra de él les dio la aprobación a los novios par que iniciarán una vida fuera del lecho de sus padres, luego con ayuda de su madre la castaña empacó todo lo necesario en un maleta, pues no podía llevar todos sus cosas con ella en un día, así que optó por llevar lo esencial y luego regresar por lo demás.

Cuando llegó la despedida Sosuke estaba reacio sin embargo antes de que se mancharan, con una sonrisa lanzo un evidente amenaza hacia su yerno, cosa que cuando risa los presentes pero que la castaña tomo como aprobación.

- Si Rin regresa a esta casa, ten por seguro que no volveré a permitir que te la lleves- advierte mientras se gira e ingres de nuevo a la casa.

Cuando partieron la castaña dejo salir una lágrima, sabía que su vida estaba a punto de cambiar para bien y le emocionaba emprender aquella nueva aventura junto con su adorado peliplata, ya no había vuelta atrás, a partir de ahora todo sería diferente.
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- Estás asustada- inquiere el hombre una vez aparcan en el estacionamiento.

- Por supuesto que no- asegura la castaña con una sonrisa.

- Aún no entiendo cómo tus padres pueden ser tan dóciles- confiesa con sorna el hombre.

- Mamá siempre ha dicho que si la felicidad de sus hijos está a su alcance, ella se las brindará... Y ceder por más doloroso que sea es su forma de demostrarlo- anuncia la menor mientras se baja y toma una de las maletas.

- Déjala, yo las llevo- informa el hombre.

- Por supuesto que no, yo también puedo hacerlo- le contradice la mujer con una sonrisa pícara para así caminar junto al Taisho hacia el elevador.

Una vez subieron el hombre no tardo en hacer espacio en su closet para las prendas de la mujer, así mismo juntos acomodaron implementos de aseo y cualquier cosas trivial que la mujer considerara importante para su día a día, al terminar nos ya agotados decidieron tomar algo y relajarse, Rin se preparó un té de manzanilla mientras que el peli plata optó por su tan adorado whisky, la castaña se había acostumbrado tanto a aquel olor el simple hecho de sentirlo se hacia acordar a su novio; una vez cada uno con su bebida se sentaron junto al ventanal, la felicidad que sentía en aquel momento era indescriptible y ambos decidieron cerrar aquel romántico momento con un dulce beso de buenas noches.
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CONTINUARA...

Si llegaste hasta aquí, gracias por leer preciosuraaa.♥️♥️♥️