Conociéndote Más [ShikaIno]

~1 Compañeros ~

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Para un estudiante de preparatoria, la época de exámenes era la más estresante y desesperante del universo. Fotocopiar apuntes, estudiar hasta tarde temas que nisiquiera recuerdan haber dado en clases, soportar las presiones de profesores y padres, quienes en la mayoría de los casos suelen exigir el máximo.

Todo esto si eres un estudiante promedio.

Cuando son esos estudiantes malos, pésimos, de tenerles lástima, solo les queda una opinión: Hacerle la pelota a los más inteligentes. Si son matones, recurren a la amenaza verbal y física con los típicos nerds del instituto ¿Por qué? Porque el único método de sobrevivir que conocen es la violencia. Pero si solo son un perdedor más, no les queda de otra más que rogar y lamer botas.

Y... si son de esos alumnos destacados, inteligentísimos, pues les espera soportar los "nuevos amigos" que surgen de la nada, y que hacía dos días atrás no recordaban ni su nombre, pero ahora son sus "amigos". Acercamientos por interés, en algunos casos intentos de seducción, soborno, ect.

Si, en los exámenes se veía de todo.

Por todo el salón de clases 3-B se escuchaban los murmullos abrumados de los estudiantes al escuchar las últimas palabras que el profesor de Historia acababa de pronunciar.

-¿Acaba de decir que el 80 por ciento de nuestra nota final depende de ese absurdo proyecto? -Se quejó una chica peliroja, con anteojos, dirigiendo una mirada de profundo desprecio infantil hacia su profesor, Asuma.

-Correcto -Contestó, dedicándole una sonrisa muy tranquila a la chica, algo que la irritó aún más -. Al final de la clase anunciare las parejas que deberán trabajar juntas en esta tarea.

-¡Pero Asuma-sensei! -Exclamó Karín, indignada.

-¿Por qué tiene que ser en dúo? -Preguntó una chica de cabello rosado, que permanecía sentada dos mesas detrás de Karín, junto a un chico de intensos cabellos negros y mirada vacía.

Asuma se recostó, casi sentándose sobre el buró, manteniendo sus brazos sobre este como soporte.

-Por qué son 10 temas diferentes, y nosotros tenemos la suerte de ser una matrícula de 20 alumnos exactos. Tocaría un tema por pareja y eso sería lo más justo. -Explicó, manteniendo la paciencia y tranquilidad que sus alumnos tanto admiraban de él.

-¡Asuma-sensei! -Lo llamó una muchacha con cabello castaño oscuro, recogido en dos cebollas a la parte superior de su cabeza.

-¿Si, Tenten?

-Shikamaru volvió a dormirse en clases -Dijo la chica entre risas, apuntando al nombrado.

El profesor estiró el cuello, pudiendo ver en la última mesa a su mejor, y a la vez más indisciplinado alumno, con ambos brazos cruzados sobre la mesa, la cabeza sobre estos y el rostro oculto. Su espalda subía y bajaba en respiraciones pausadas, lo que confirmaba que el muchacho estaba profundamente dormido.

Asuma, nuevamente demostrando su tranquilidad, miró los materiales junto a él sobre el buró, estiró su brazo hasta tomar el borrador, y cuando ya lo tenía en sus manos, poniendo en práctica los juegos de baseball que se había pasado la adolescencia jugando, lanzó el borrador hasta estrellarlo directamente y con mucha precisión, en la cabeza de Shikamaru.

-¡Aaaahhh! -Shikamaru despertó sobresaltado, poniéndose de pie, con los ojos tan abiertos como dos bolas de billar, la respiración agitada removiendo su pecho y su cabeza girando de un lado a otro en busca del agresor.

Todos los demás adolescentes estallaron en carcajadas incesantes, mientras Asuma solo sonreía con diversión.

-¡¿Que demonios?! -Se quejó el Chico, aún buscando al causante de su brusco despertar -. ¡¿Que rayos pasa con ustedes?! -Espetó Molesto, al notar las risas desbordantes de sus compañeros.