Conociéndote Más [ShikaIno]

~17: ¿Por qué a mí? ~

El fanart de arriba 👆🏼 lo hice yo, para representar la ropas con las que Ino fue a esa fiesta ;)

Aquí los capítulos prometidos... haber si quieren publicarse todos;-;

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Tomó aquel pequeño vaso de vidrio entre sus delicadas manos, y lo guió hasta sus labios, dando un largo sorbo de aquella bebida entre amarga y dulce, que bajaba en una quemante calentura por su garganta con cada trago que daba.

Sake.

Sonrió, con su rostro envuelto en un notorio sonrojo, debido a la cantidad de alcohol que ahora tenía en su cuerpo. Su mirada medio desorientada, se perdió en el interior de aquella bebida, mientras permanecía sonriendo de aquella manera ilarante, como si le acabasen de contar algo gracioso.

-Uno... -Contó removiendo el vaso de un lado a otro, con ambas manos, en un tono de voz embriagadamente alegre - Dos~... -Sus palabras salían atropelladas, arrastradas, como efecto al estado en que se hayaba - Tres~...

Seguido, vació el contenido que quedaba de aquel embase cristalino en el suelo, y se hecho a reír, de la nada, como una persona sin una gota de cordura en su ser.

Ino Yamanaka estaba borracha a niveles estratosféricos, y para rematar, completamente sola en medio de aquel club nocturno.

¿La razón? Cuando Neji y Tenten se habían largado de allí, habían transcurrido algunos minutos hasta que Hinata decidió ir tras ellos, ya que no podía volver a casa sin su primo, ni su primo sin ella, eran cómplices en aquella fuga, y si llegaban a caer, caían los dos. Kiba, porsupuesto, se había ido con Hinata ¡Por nada del mundo él se le despegaba!

Más tarde, Sakura había caído como mosca ante los efectos del alcohol. Sí, la pelochicle había dicho que se aseguraría de no emborracharse, que ella sí sabía beber. Pero al parecer la situación se le había escapado grandemente de sus manos. El caso era que se había desmayado, y Rock Lee, que era el único un poco más sobrio que quedaba, la había tenido que llevar a su casa. Porsupuesto que el chico no se había ido con la intención de dejar a Ino sola en aquel antro. Claro que no. Él le había dicho que enviaría a alguien a buscarla lo antes posible, porque no podía llevarlas a ambas en brazos, e Ino tampoco podía casi andar de tal embriaguez. Rock Lee era de familia adinerada, y le había orientado a Ino no moverse de aquel sofá en el que se hayaba acostada, hasta que llegara uno de sus empleados a recogerla. Según el muchacho de gruesas cejas, no tardaría. Pero Ino ya llevaba casi una hora esperando, y seguía sin aparecer nadie.

Harta de estar allí esperando, la Yamanaka de sentó en el mismo lugar en el que antes había estado acostada, e hizo un movimiento intentando levantarse. Al lograrlo, todo le dio vueltas por un momento. Solo veía muchas luces de colores, extrañas, siluetas borrosas, y nada más. No podía enfocar nada y su cabeza parecía una montaña rusa. Tambaleo un par de pasos al frente... quería encontrar la salida.

-Ese idiota de Rock Lee... -Murmuró, dando torpes paso con ojos dormidos, Arrastrando cada palabra - dijo que esperara aquí... ¡Pero estoy aburrida! Me voy a mi casa...

Abriéndose camino entre todas aquellas personas, probablemente en el mismo estado que ella o peor, viendo solo las confusas luces borrosas que había por todas partes, Ino se dispuso a encontrar la salida. Necesitaba aire fresco. Unos cuantos minutos le tomó aquel procedimiento. No pudo evitar chocar más de una vez con alguna que otra persona, o con alguna pared provocante a un futuro moratón en su cuerpo, mientras se hayaba en aquella búsqueda. Lo único que se adormilado cerebro podía procesar en ese momento era que quería salir de allí, irse a casa y dormir. Dormir hasta el lunes si era necesario, pues sabía, que al amanecer su cabeza le haría saber literalmente las consecuencias de aquella alocada noche.