~39: El rato contigo ~ ✔

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A las 10:07 de la mañana, dos cuerpos jóvenes se vieron saliendo del interior de la conocida Academia que muchos únicamente llamaban "Konoha" o solo "Academia", sin dar importancia a la largura del nombre, que, en sí, no era para tanto. La clase última de la mañana había acabado hacía apenas dos minutos, cuando el reloj había marcado las 10:05, más el camino desde los salones hasta el patio delantero de la institución ocupaba un pequeño transcurso de tiempo.

Shikamaru e Ino, quienes desde su juntamenta en el pasillo esa mañana, camino a la clase de Informática, no se había separado, ahora caminaban por el pasillo exterior, un poco antes de la plaza delantera, pues en esa zona se hayaban ubicadas las máquinas expendedoras donde los que no querían el almuerzo de la escuela, iban a comprar su propio alimento. Máquinas expendedoras de dulces, y de bebidas, básicamente, comida basura. Esa era justo la comida que Shikamaru prefería. La de la escuela contenía muchos vegetales, y a él no le gustaban. Bastante tenía con ser obligado a comerlos en su casa. En la calle y escuela comería lo que se le antojara.

Sin embargo, Ino tenía una opinión muy distinta a la de él. Además de que... desde el comienzo de su dieta se había prohibido a sí misma acercarse a menos de diez metros de los dulces.

No podía permitirse estar cerca de ellos... por nada en el mundo.

—Shikamaru ¿A donde nos estamos dirigiendo? —Habló, mirando con cierto reproche a Shikamaru, pues, aunque se había hecho la tonta, sabía perfectamente la respuesta a su propia pregunta.

—A almorzar —Respondió el moreno simplemente.

Ino suspiró con pesadez. Lo suponía.

—¿Que tiene de malo la comida de la cafetería?

—Sabe a excremento de vaca —Soltó, provocando una risa en la muchacha, que la hizo casi atragantarse con su propia saliva. Él sonrió tras ese logro.

—¿Alguna vez lo haz probado? —Preguntó, divertida.

—No preguntes —Esa respuesta solo la hizo soltar otra carcajada más. Ya estaban a pocos pasos de las máquinas expendedoras.

—Eres muy extraño —Dijo riendo. Shikamaru únicamente sonrió, con su vista concentrada al frente.

—¿Prefieres Papas o dulces? —Preguntó, ubicándose frente a la primera máquina expendedora de aquel pasillo.

Ino se colocó a su lado, mirando la máquina, para después verlo a él con reproche.

—¿Que clase de almuerzo es ese, Nara?

—¿Que tiene de malo? —Volvió a preguntar, rebuscando en el interior de sus bolsillos algo de dinero.

—Te vas a morir de una subida de colesterol —Le hizo saber, cruzando sus brazos a la par que negaba con la cabeza —. Además, las papas se van en nada. No llenan ¿Como esperas sobrevivir así?

—Yo no diría eso —La contrarió Shikamaru, introduciendo un billete en la maquina —. Apuesto a qué no eres capaz de comerte más de tres bolsas sin sentirte satisfecho.

—Eso es un suicidio —Insistió ella.

—Bien. No hay papas para ti —Decidió, recolectando las dos bolsas que la máquina le había dado. Lentamente tomó otro billete y también lo insertó —. ¿Prefieres dulces?

—Yo no quiero nada —Contestó inmediatamente.

Shikamaru la miró de reojo, frunciendo el ceño. Acomodó las bolsas de papitas debajo de su brazo, para introducir un par de números en la máquina, pasando luego a mirarla directamente con el mismo gesto.

Conociéndote Más [ShikaIno] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora