ᴛɪᴛᴀɴ¹ | Tom Kaulitz.

38 | NIÑITO

Caminé todavía un poco cansada por lo sucedido antes, mis manos estaban llenas de sangre y mi cara sucia. Gustav me pidió ayuda para caminar mientras su brazo rodeaba mi cuello. Cuando llegamos a una habitación, lo ayudé a sentarse en una cama de hospital mientras escuchaba sus quejas de dolor. Pronto una enfermera entró a la habitación con su equipo, pues parecía que la otra habitación ya estaba siendo ocupada por Bill.

--- Vamos a examinarte. --- Ella dijo a Gustav.

Él sonrió forzadamente y me pidió que me sentara al lado de Gustav y así lo hice.

Pronto vi la aparición de una mujer pelirroja entrar en la habitación. Rose me miró seriamente y, sobre todo, al chico que estaba a mi lado. Sabía que ella me sermonearía, diría que yo era una irresponsable y que ese no era el acto de un futuro jefe. Pero después de ver el estado en el que se encuentra Tom, dudo mucho que quiera este puesto.

--- Parece que tu plan no funcionó tan bien. --- Dijo la mujer cruzándose de brazos y ajustando su postura.

No le respondí, simplemente bajé la cabeza y permanecí seria.

--- ¿Estás feliz de ver todo lo que has causado? ¿Estás feliz de ver cómo era realmente Kaulitz? Te lo dije. Te lo advertí y todavía no me escuchaste. Estuviste a punto de morir varias veces, ¿y a qué precio? --- Ella dijo.

--- A costa de la verdad. --- Respondí levantando la cabeza mientras la mujer me vendaba el cuello. --- ¿Sabes cuántas cosas he sabido en mi vida? Cosas que nunca me dirías, sólo para que tu puesto pase a otra persona.

--- Pero es obvio. --- Se burló. --- Si te dijera que Gustav es tu medio hermano mayor, ¿cómo reaccionarías? ¿Normalmente? ¿Aunque sabes que es parte de la pandilla que mató a tu padre? ¿Crees que no vi cómo te cegaste con la venganza, Violet?

--- No --- Me levanté, la miré seriamente --- Querías que matara a Tom para que no se interpusiera en tu camino, porque sabes que él no te tiene miedo. Y que si quisiera arruinaría toda tu reputación. --- Vi la mirada de Gustav flotando sobre mí, dejó de conectar los puntos pensativamente y miró a Rose.

--- ¿Tom? --- Ella se rió de la misma manera. --- Es un niño pequeño, Violet. Es un puto niño que no tuvo amor paterno, que lleva el apellido Kaulitz y vive a la sombra de su hermano. ¿De verdad crees que le tengo miedo a un hombre que es dulce pero finge ser amargo? --- Ella me contó toda la historia de Kaulitz, y si hay algo que sé es que Tom nunca será tan despiadado como nosotros, porque no quiere esa vida. --- Sólo quiere muerte y libertad. Pero la gente como él, que habla de libertad pero se priva todo el tiempo, nunca tendrá este sentimiento.

Sus palabras me golpearon. E incluso si la enfrentara, ella tenía razón. Sólo quería ser libre, pero lamentablemente vivirá en esta prisión para siempre. Y por mucho que Tom no quiera, este es el destino que le han marcado, y el que debe seguir.

--- Podra ser un niño pequeño... --- Escuchamos la voz de Gustav, y luego lo miramos, viendo su rostro caído, sus ojos cafés completamente oscuros y sus heridas ya limpias. --- Pero los niños pequeños como él siempre estarán en el poder. Y creo que sabes muy bien que nadie en este sistema es más inteligente que él. Tom no lo hace por poder, lo hace para tener el poder. Eso son los Kaulitz, jefes poderosos y grandes.

Rose tragó saliva y me miró de nuevo.

--- Ambos sintieron pena por el pequeño Tom. --- Rose sonrió. --- Te disparó en la pierna, Violet. ¿Te golpeó, te arrestó, te puso en riesgo, te hizo prisionera y aun así te protegió? Te encanta que te desafíen, ¿no? No lo has matado todavía porque es el único que todavía te desafía después de saber quién eres realmente. Él es el único que te hace sentir poderosa, porque sabes que puedes matarlo en cualquier momento, pero no lo haces, porque te gusta sentirte superior a él.