28 | DEJAR ATRÁS

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--- Pensé que nunca saldrías de mi baño. --- Hablé tan pronto como vi a Tom salir con una toalla alrededor de su cintura y sus trenzas cayendo sobre su hombro mojado.

--- No te demores, Bill se impacienta. --- Dijo Kaulitz.

--- ¿Ahora vas a volver a tratarme como a una presa? --- Pregunté y se detuvo de espaldas y bajó la cabeza dejando escapar una sonrisa siniestra.

--- Violet, quiero que lo entiendas. --- Tom suspiró. --- Si tuve sexo contigo no significa que me importará tu existencia, no me importa, mantenerte con vida es porque lo necesito.

--- ¿Lo Necesitas? Puedes manipular a cualquiera, Tom, excepto a mí. --- Le respondí.

--- No creo que sea yo quien esté usando la manipulación aquí. --- Murmuró el chico.

Rápidamente me callé, sabiendo a qué se refería. Tom no dijo nada más, simplemente salió de mi habitación con pasos ligeros mientras yo permanecía sentada en mi cama como si nada hubiera pasado hace unos minutos. Sí, tal vez sea humillante decirlo, pero me acabo de dar cuenta de que Tom conoce muy bien mis planes, no es un idiota y simplemente "estuvo" conmigo por elección propia, como siempre lo hace con las mujeres. Yo era solo uno más en tu lista.

Me levanté y corrí frente al espejo, cerrando la puerta, suspiré moviendo un poco la pierna, viendo lo que Tom había dibujado, era una pequeña calada de un cigarrillo, un puto CIGARRILLO. Resoplé, rodé los ojos y me metí en la ducha, me di una ducha fría, quitando el olor de Tom de mi cuerpo y lavé mi cabello, que también olía a su perfume. Terminé y usé jeans militares con una camiseta sin mangas y botas de combate, tomé una chaqueta de mezclilla y me la puse sobre los hombros, me recogí el cabello en una cola de caballo y recogí mi arma sobre el escritorio.

Fácilmente podría matar a Tom por todo lo que ha hecho, pero en realidad quiero verlo sufrir, sufrir mucho.

Suspiré, guardé el arma detrás del bolsillo de mi pantalón e iba a irme a la cocina, pero pronto vi a Laila parada frente a la puerta de mi habitación con una mirada desafiante en su rostro.

--- ¿Quien te hace mejor el sexo? --- Ella preguntó y tragué fuerte.

--- ¿De que estas hablando? --- La miré.

--- Oh tú sabes. --- Se burló la morena. --- Primero tiene relaciones sexuales con Bill pensando que nadie lo sabría, luego descaradamente te llevas a Tom, wow. --- Ella rió. --- Realmente eres quien dicen que eres.

--- No me humillaré luchando por un hombre. --- Levanté la cabeza desafiante.

Maldita sea, terminé haciendo ejercicio con Tom y apenas puedo caminar, estás bromeando.

Me quité el abrigo y lo tiré sobre la cama, preparándome como ella, Laila comenzó a caminar lentamente hacia mí. Rápidamente intentó golpearme, pero lo esquivé yendo hacia un lado. La morena suspiró al darse cuenta de su error, levantó su puño golpeándome la cara, se rió victoriosa al ver mi reacción de dolor.

--- Está bueno, ¿no? --- Laila se burló.

--- Oh sí lo es.

Y le pateé la pierna, ella se tambaleó hacia atrás, saqué mi arma del bolsillo y le apunté, pero se me escapó de la mano con su patada.

--- ¿Y quién dijo que lucharía por hombres? ¿Crees que eso me importa? --- Ella respondió lo mismo. --- ¿Cuál es realmente tu plan, Violet? ¿Matar a Tom por la muerte de tu padre? ¿Casarte con Bill y tomar el poder de Tom? O...

--- Deja de decir pura mierda, no me importa ningún puto poder. --- La interrumpí.

--- Estás haciendo todo esto por venganza. --- Se burló Laila. --- Todos aquí ya conocen tu estúpido plan, simplemente no entiendo por qué no has matado a los gemelos todavía.

ᴛɪᴛᴀɴ¹ | Tom Kaulitz. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora