𝐋𝐀 𝐎𝐁𝐒𝐄𝐒𝐈𝐎́𝐍

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- ¿Ya no te has topado con aquel hombre? -pregunta Jenna

- Por suerte no. Maldito idiota -azoto la puerta del casillero - ¿Acaso no vió que venía cruzando la calle?. ¿Qué soy?... ¿La mujer invisible para que no me viera?

Jenna suelta una pequeña risa.

A esta chica le divierten mis insultos.

— Ay, Sam —me abraza— Si el no te habrá matado arrollandote, de seguro tú si. Con ese coraje que tienes dentro

— Si supiera manejar y tuviera un coche. Haría lo mismo que él hizo, para que sienta lo que yo sentí

Llegamos al salón de clases. Nos dirigimos a nuestros pupitres para tomar asiento. Aún faltaban 10 minutos para que iniciarán las clases y para que llegarán la mayoría de los compañeros y amigos del salón.

- ¿Por lo menos era atractivo el sujeto? -alza las cejas de forma pícara

- ¿Por qué me preguntas eso?

- ¿Qué hay de malo?. Que tal si vale la pena

La conversación es interrumpida por una voz grave. Todos dirigen sus miradas hacia aquella voz.

- Vaya -Jenna se queda boquiabierta al ver a su nuevo profesor, cómo también la mayoría de los del salón. En especial las chicas

Aquel hombre alto de ojos color bermellon, cara perfectamente afinada, mentón marcado; cabello negro ondulado, de cuerpo atractivo. Tal vez no se le notaba tanto, pero con solo ver su rostro ya se imagaban lo demás. Vestido de traje completamente negro y una camisa blanca

Esa voz y... Los ojos.

- No puede ser -comento en voz baja- Tiene que ser una puta broma

- ¿Qué pasa? -me pregunta preocupada

- Ese hombre fue el del incidente de ayer - agacho un poco mi cabeza, casi pegándolo al pupitre

- Bueno, tal vez el ni se acuerde de tí o si, pero no tendrá ningún rencor hacia a tí. A pesar de haberle dicho idiota e imbécil, y de haber golpeado su auto

- Gracias por recordarmelo -rueda los ojos— Además no lo golpe, le di una ligera patada. Que es muy diferente

- Buenos días. Me presento, soy su nuevo profesor. El profesor Harper. Tal vez la mayoría o si no es que todos ya se habrá enterado; el profesor William se ha retirado de la institución y ahora yo seré quien les dará su clase

Todo mi salón estaba completamente encantado con él. En especial las chicas, esas miradas como si estuvieran en celo. No negare que es atractivo, pero no es para tanto.

- Me gustaría conocerlos a todos, pero no hay tiempo para presentaciones; además de que ya conozco o ubico a algunos — su mirada se posa en mí y sonrie

Maldita sea. Creó que si se acuerda de mí.

— Pero conforme van pasando los días, las clases, nos estaremos conociendo de poco en poco. Así que comencemos

Aún estaba empezando y ya quería que terminará. Estás vacaciones si que me afectaron, no llevo ni la semana y ya no soporto. Estaba pérdida en mis pensamientos que casi no preste atención a la clase, en eso siento un pequeño golpe en mi hombro

- Dime loca, pero el nuevo profesor no deja de mirarte -dice Jenna susurrando muy cerca de mi oído

- Tal vez es idea tuya. ¿Qué tal si es a ti a quien te está hechando ojo? -le contesto mientras anoto lo que está en el pizarrón

- Eso creí desde un inicio -suelto una pequeña risa- Pero no, es a tí a quien mira

- De seguro debe ser una mirada de odio. ¿No viste como me miró cuando se presento?

- Si lo ví. Su mirada penetrante -se queda pensativa

— ¿A qué te refieres con "penetrante"?

- Como si ese odio se convirtiera en atracción. Un amor a primera vista

Sus palabras me dejaron pensativa

¿Sera cierto eso?. ¿Del odio al amor hay un paso?. No, debe ser una de las tantas fantasías de Jenna, a veces llega a tener una enorme imaginación. Esas películas o series de romance que contienen alguna que otra escenas de sexo, le están afectando. Esa chica vive en el romance.

Pero, ¿qué tal si, sí?

Fijo mi mirada en el profesor para saber si lo que vió Jenna es verdad. El profesor al darse cuenta desvío la mirada rápidamente e inclinó su cabeza ligeramente hacia el libro que tenía en sus manos.

Mierda. Ella tenía razón

Siento como mis mejillas se calentaron, y como mi cuerpo sintió una punzada que vino acompañado con un bochorno. ¿Qué carajos me está pasando?, ¿porqué mi cuerpo está reaccionando así?

Las clase termina y el profesor Harper se acerca a su escritorio a guardar sus cosas en su maletín.

- Bueno chicos. Por hoy lo dejaremos hasta aquí y mañana continuamos con el tema -se despide no sin antes mostrar una pequeña sonrisa que sacó suspiros en el salon

Ay, vamos

- Nos veremos mañana y fue un gusto conocerlos

Su mirada es dirigida hacia mí nuevamente. Junto con una sonrisa.