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Jenna tenía razón en sus palabras. No es que nunca me han rechazado o roto el corazón, eso ya lo viví.

La cosa es, que es la primera vez que ando con alguien mucho mayor que yo. Solo llegué a andar con alguien que me llevaba 5 años, pero más no. Hasta ahora con Harper.

Tengo miedo de que él después se cansé de mí, que ya no sienta lo mismo y me terminé; o que ésto solo haya sido un capricho suyo, pero ahora que me pongo a pensarlo nuevamente, suena bastante horrible. Me siento horrible de haber pensado mal de él, y más ahora que él me declaro su amor hacía mí.

- ¿Todo bien Samara? -se acerca a mí. Tomó conciencia y siento con la cabeza- Te me fuiste por un instante. ¿Entonces?

- Ah, si. Disculpa -tomo un respiro y tomo la decisión- Sí, iré. Tienes razón, ambos tenemos una sentimiento tan fuerte el uno al otro, y yo... Creo que... Lo amo

Decir aquella palabra tan fuerte, me hizo sentir como si mi alma se desprendiera de mi cuerpo por unos segundos. Noté la emoción de Jenna, se llevó ambas manos a la boca como si quisiera llorar y gritar.

- Pero no te emociones. ¿Quieres?

- ¿Por qué siempre debes ser arruimar los hermosos momentos?

- No los arruinó. Solo soy realista y trato de no precipitar las cosas -ella hace un mueca

- Claro, lo olvidaba. Eres la señorita "realista" -se da pequeños toquecitos alrededor de sus ojos para secarse las lágrimas- En fin. Debemos ver qué te pondrás mañana

- Ya tengo la ropa para mañana -nuevamente me acuesto en la cama

- Un pantalón, una blusa y unos tenis no cuentan. La ropa fachera no se usa siempre

- Ya lo sé. Y no es fachera, es ropa alternativa -bufé

- Ajá. ¿Entonces que te pondrás mañana? -incline un poco mi cabeza de lado y la mire. Tenía los brazos cruzados y su mirada oudstayen mí

- Un short con una blusa de tirantes y unas botas

- ¡Ay, carajo Samara!. ¡¿En serio?!. Es aún peor que el pantalón y los tenis

Jenna y yo tenemos gustos y estilos completamente diferentes, ni se como mierda nos volvimos mejores amigas si somos tan diferentes. Lo único en que somos semejantes sería en los gustos por la comida y en los géneros musicales.

Algo que me causa gracia es que Jenna se toma muy en serio en la apariencia, y con eso, me refiero a la ropa que usas, dependiendo de la ocasión, el maquillaje, peinado, accesorios; todo ese tipo de cosas en los cuales yo no soy tan buena. Cosa que me hizo preguntar: ¿Qué me vio el profesor?. Hay demasiadas chicas lindas, hermosas que se arreglan y se ven mejor que yo. ¿Cómo fue que se fijó en mí?.

- Relájate no iré a un salón o un evento elegante. Además, es buena elección -me incorporo para sentarme- En esos días de calor

- ¿Por qué mejor no un vestido?

- Vestidos no

- ¿Por qué no?. Se te ven lindos

- Porqué no me gustan y ya -ella rueda los ojos- No es para tanto

- ¿No es para tanto?. Samara, es tu cita. Cita con el profesor Harper -me recalca- Este no es una cita cualquiera como la de tus anteriores parejas que te llevan a una plaza o un parque, o a algún lugar cerca de aquí

- Pero ambas no sabemos a dónde me llevará -me levanto con frustración y algo de cansancio- ¿Cómo saberlo?

- Claro que sí se... -no terminó la oración ya que se tapo la boca- Maldita sea -susurró

- ¿Tú ya lo sabías? -la señaló- Sabes algo, no me importa. No te preguntaré ya que será una sorpresa, así que no pienso arruinarlo. Además de que estoy algo cansada para reclamarte

- No le vayas a decir que te enteraste de que yo ya lo sabía -pone sus manos en mis hombros casi sacudiendome. Haciéndome un puchero

- Tranquila no se lo diré -le sonrió y le doy unas ligeras palmaditas en la mejilla- Usaré vestido, pero solo porque sabes tú ya sabes el plan

Una enorme sonrisa resalta en su rostro, dando unos pequeños saltos.

Está noche será algo larga.

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Puchero: Se define en dos cosas.

1. Objeto: Vasija de barro o de otros materiales, con asiento pequeño, panza abultada, cuello ancho, una sola asa junto a la boca

2. Gesto: Gesto de estar a punto de empezar llorar, sea real o fingido

𝐋𝐀 𝐎𝐁𝐒𝐄𝐒𝐈𝐎́𝐍 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora